La ruta Rosalina: la vida de Rosalía De Castro convertida en recorrido poético por Galicia

Andrea Blez

24 de febrero de 2025 17:47 h

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Rosalía de Castro, la escritora más representativa de la literatura gallega, nació un 23 de febrero de 1837 en Santiago de Compostela. Como una manera de celebrar su aportación y conocer su vida y obra desde otro punto de vista, en 1980 se propuso una ruta, llamada Rosalina, por Avelino Abuín de Tembra, que promueven desde la Fundación de su mismo nombre por diferentes localidades en las que la poetisa dejó su huella. 

Santiago de Compostela: nacimiento y reposo de Rosalía de Castro

Uno de los puntos más importantes y en el que comienza la ruta Rosalina es Santiago de Compostela, localidad donde nació la escritora y ciudad en la que reposan sus restos. La casa natal de Rosalía de Castro, que sería la lógica primera estación, se encontraba en la actual Avenida que lleva su nombre, pero que no se puede visitar.

Desde aquí se puede partir para visitar otros puntos en la capital gallega, como la capilla del Hostal dos Reis Católicos, donde fue bautizada, así como varias casas en las que vivió y que lo especifican unas placas colocadas en la fachada, como son Casa da Concha, sede actual del Consello Social de la Universidade de Santiago, o en la plaza de la Universidad, que alberga el Instituto de Lingua Galega.

En Santiago de Compostela se pueden visitar también dos monumentos dedicados a la autora, uno en la Alameda compostelana, o en la calle dedicada a su nombre en la plaza de Vigo. La última parada de la ruta Rosalina en la localidad sería la iglesia del convento de San Domingos de Bonaval donde tenemos el Panteón de Galegos Ilustres y donde se encuentra la tumba donde descansan los restos de Rosalía de Castro desde 1891 tras ser trasladados desde Padrón.

Ames, Brión y Dodro: pequeñas paradas de la ruta Rosalina

Tras conocer el Santiago de Compostela de Rosalía de Castro, el siguiente paso es pasar por otras localidades que, aunque en menor medida, también contribuyeron a la vida y obra de la escritora gallega y que merecen una visita, como son Ames, Brión y Dodro. En Ames fue donde esta pasó parte de su infancia con sus tías en una aldea de Castro de Ortoño, A Casa da Tarroeira, donde grupo de jóvenes universitarios fundó allí en 1923 el Seminario de Estudos Galegos.

De ahí pasamos a Brión, donde se ubica la iglesia de San Xulián de Bastavales, cuyas campanas formaron parte de los famosos versos de la poetisa en los Cantares gallegos. Y en Dodro, en Lestobre, tenemos el Pazo da Ermida, que fue lugar de descanso de la escritora y lugar de nacimiento de algunas de sus obras.

A Coruña: vida conyugal de Rosalía de Castro

Otro de los lugares que forma parte de la Ruta Rosalina es A Coruña, donde también vivió durante varias etapas, dos claramente diferenciadas, a finales de la década de los 50 y principios de los 70 del siglo XIX debido a compromisos laborales de su marido, el también escritor Manuel Murguía.

En A Coruña hay dos puntos importantes en la ruta que sigue los pasos de Rosalía de Castro: el Teatro que lleva su nombre, uno de los edificios culturales más emblemáticos de la ciudad, así como la casa de la calle Príncipe en la que escribió el poema que dedicó al general fallecido en la Batalla de Elviña en 1809, John Moore.

Muxía, donde Rosalía de Castro escribió su primera novela

Un punto con historia en la obra de la poetisa es Muxía, un enclave que visitó debido a su relación con la familia Pondal y donde contraería el tifus en la romería de A Barca. Durante el tiempo que estuvo convaleciente, fue cuando escribió su primera novela, La Hija del Mar, siendo claves el El Santuario de Nosa Señora da Barca y el Monte Corpiño.

Padrón: la última etapa de la ruta Rosalina

En Padrón finaliza la ruta Rosalina por ser la localidad en la que pasó sus últimos años de vida y fallecería en 1885. En esta localidad gallega hay varios puntos de importancia en la vida de la escritora, como el Pazo de Arretén, que perteneció a su familia materna, la Casa da Matanza, última vivienda de la autora y sede actual de la fundación que lleva su nombre y que ahora es un museo, la Casa da Rúa do Sol, hogar de la escritora entre los 4 y los 10 años, y el cementerio de Adina, donde fue enterrada.