Tres excursiones que puedes hacer cerca de Madrid para aprovechar el puente y los días festivos

Con el comienzo del mes de diciembre a la vuelta de la esquina, son muchos los que ya cuentan los días, preparándose para el puente de la primera semana o para el resto de festividades del mes. De esta manera, tanto el próximo viernes 6 de diciembre -día de la Constitución Española- como el 25 -día de la Navidad- serán días festivos no laborables. Además, el primero coincide en viernes, por lo que brindará a todos los trabajadores con un fin de semana largo, perfecto para planear un viaje de última hora en el que descubrir algunos de los parajes más llamativos de la península.

El centro del país aglutina gran cantidad de ciudades históricas y parajes únicos esperando ser explorados. Desde urbes con restos de civilizaciones antiguas hasta bosques de enormes árboles y verdes campos, varios destinos cercanos a la comunidad autónoma de Madrid ofrecen experiencias singulares perfectas para una escapada de varios días. De esta forma, es importante tener en cuenta cuáles son los destinos de moda o los que proponen las actividades más llamativas para preparar un viaje lo más agradable posible.

Conocer cuáles son dichos destinos y como disfrutar de ellos al máximo es esencial para gozar de una experiencia completa en el último mes del año. Así, estas son tres excursiones que puedes hacer cerca de Madrid para aprovechar el puente y los días festivos.

Segovia, en Castilla y León

A tan solo 1 hora en coche de Madrid, la ciudad de Segovia es una de las urbes con más historia de toda la Península. Su ocupación inicial data de civilizaciones prehistóricas, aunque su máximo esplendor vino de parte del Imperio Romano, del que aún se conservan monumentos de gran importancia como el atractivo principal del enclave, el Acueducto.

Construido a principios del siglo II, fue levantado con el objetivo de abastecer de agua a toda la ciudad. Además de ser considerado uno de los símbolos característicos de la urbe, al aparecer en su bandera y escudo, fue también declarado Monumento Nacional en el año 1884 y Patrimonio de la Humanidad en el 1985.

Otro de los más llamativos es la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción y San Frutos, de estilo gótico tardío y que se construyó a lo largo de más de 2 siglos, entre los años 1525 y 1768. En su interior, cuenta con 18 capillas y 3 naves con varias cúpulas e infinidad de vidrieras.

Sin embargo, estos no son los únicos monumentos históricos y religiosos de la ciudad, la cual ha ido acumulando durante años obras hasta constituirse como uno de los destinos más destacables por el patrimonio cultural que alberga. Así, estos son otros de los espacios más llamativos de la urbe:

Toledo, en Castilla la Mancha

Una de las mejores opciones a tan solo una hora de Madrid en coche es Toledo. Conocida como “la Ciudad de las Tres Culturas” debido a la convivencia entre cristianos, judíos y musulmanes durante varias épocas, Toledo destaca por la gran calidad patrimonial con la que cuenta.

Pese a que fue una importante ciudad de la provincia Tarraconense bajo el dominio del Imperio Romano, Toledo es principalmente conocida por otras ocupaciones, como cuando se convirtió en capital del Reino Visigodo o cuando fue conquistada por los musulmanes en año 711.

Entre los principales atractivos de Toledo destaca el Alcázar, ubicado en la zona más alta de toda la ciudad. Este edificio ha estado marcado por distintos hechos históricos, como la Guerra de Sucesión, la Guerra de la Independencia o la Guerra Civil Española; durante los cuales ha sufrido varios desperfectos provocados por asedios, incendios y demás.

Sin embargo, este no es el único monumento histórico de la ciudad, ya que ésta cuenta con un variado patrimonio, tanto histórico como religioso. Otras de las construcciones más llamativas son:

Aranjuez, en Madrid

Una de las principales opciones con las que disfrutar de una escapada sin la necesidad de salir de la Comunidad de Madrid es Aranjuez. Pese a que esta cuenta con restos prehistóricos, romanos y musulmanes, no fue hasta el siglo XVI cuando el rey Felipe II le dio al enclave gran importancia al establecerlo como residencia real. De la misma manera, pasó a considerarse ciudad ilustrada tiempo después de la mano de la monarquía de los Borbones.

Entre los monumentos más destacados se encuentra el Palacio Real -residencia de los reyes de España- y los Jardines Reales, los cuales incluyen el Jardín del Príncipe, el de la Isla y el del Parterre. De la misma manera, también es posible disfrutar de la Casa del Labrador, un pequeño palacete rodeado de naturaleza.

A tan solo 45 minutos del centro de Madrid, el enclave también presenta una opción ideal para llevar a cabo diferentes rutas de senderismo sencillas y repletas de entornos y paisajes únicos. Así, el espacio no solo es una gran opción histórica y cultural, sino que también es una gran alternativa para los amantes de la naturaleza y el deporte.