En estas fechas crece el peligro de listas con lo mejor o lo peor del año 2012. Uno de los periódicos más madrugadores ha sido The New York Times, que ya nos ha propuesto su selección de los diez mejores libros del año, de los cuales cinco son de ficción. Por lo que sabemos, sólo uno de ellos está traducido al español, aunque es previsible que el año que viene los otros cuatro inunden nuestras librerías.
-Bring up the bodies, de Hilary Mantel. Esta novela, Que suban los cuerpos, es la continuación de su anterior obra, En la corte del lobo, y sigue hablando de Enrique VIII y Ana Bolena, ahora desde la perspectiva de Cromwell. Las dos obras ganaron el premio Booker y no sería extraño que la anunciada tercera parte también obtenga su correspondiente premio Booker.
-Building stories, de Chris Ware. Construyendo historias no es un libro, sino una caja, y no es una novela, sino un tebeo o novela gráfica. En la caja hay diversos elementos que construyen (¿o “deconstruyen”?) la vida diaria de unos ciudadanos de Chicago y la de una abeja antropomórfica.
-A hologram for the king, de Dave Eggers. Un holograma para el rey es, al parecer, una Muerte de un viajante, pero protagonizada por un hombre de negocios americano en Arabia Saudí.
-NW, de Zadie Smith. La amistad de dos mujeres contada mediante una escritura fragmentaria que va revelando poco a poco lo que quiere decirnos. El título alude al barrio en el que crecieron, el noroeste de Londres.
-The yellow birds, de Kevin Powers. Una novela bélica sobre dos soldados en la guerra de Irak. Uno tiene problemas de adaptación al volver a casa y la pregunta o misterio en torno al que gira el libro es: ¿cómo murió el amigo del narrador? Esta novela, la primera de su autor, que fue soldado en Irak, ha sido traducida al español por Jesús Gómez Gutiérrez y publicada por la editorial Sexto Piso con el título Los pájaros amarillos.