Madrid, 24 jul (EFE).- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha trasladado al juez Juan Carlos Peinado, que investiga a su mujer, Begoña Gómez, su disposición a declarar como testigo, pero le recuerda en una carta que en su condición de jefe del Ejecutivo esa declaración debe prestarse por escrito, una petición a la que se oponen las acusaciones populares.
Estas manifestaciones tienen lugar cinco días antes del día 30, fecha en la que el titular del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid tiene previsto trasladarse a La Moncloa para tomar declaración al presidente del Gobierno como testigo en la causa en la que investiga a Begoña Gómez por supuesto tráfico de influencias y corrupción en los negocios.
En un escrito dirigido al juez Peinado, con fecha de este miércoles, el jefe del Ejecutivo señala que este mismo lunes ha tenido conocimiento “a través de los medios de comunicación” de la providencia del magistrado que le citaba a declarar en calidad de testigo.
Sánchez subraya en el escrito “su voluntad, como no podía ser de otro modo, de colaborar con la administración de Justicia, siempre en el marco del estricto cumplimiento de la Constitución Española y la ley que a todos nos vinculan y que son la máxima garantía de nuestro Estado de Derecho”.
Por eso y “con el fin de garantizar el estricto cumplimiento del ordenamientos jurídico y dadas las cuestiones que son objeto” del procedimiento, Sánchez recuerda al magistrado que esa declaración “debe producirse conforme a lo establecido en el artículo 412.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal”.
Añade en este sentido, que ese precepto prevé que por razón de su cometido como presidente del Gobierno, su declaración se deberá prestar “por escrito”.
“Es notorio -añade- que mi comparecencia resulta inescindible de la condición de presidente del Gobierno”.
Las acusaciones se oponen
No lo ven así las acusaciones populares, dirigidas por Vox, que tras conocer este escrito se han dirigido al juzgado para pedir al juez que mantenga la declaración presencial en el Palacio de la Moncloa, tal y como la acordó.
Vox, Hazteoír, Manos Limpias, Iustitia Europa y Movimiento de Regeneración Política de España afirman en su escrito que la petición de Sánchez “carece del más mínimo sentido”.
Discrepan de que el jefe del Ejecutivo haya sido llamado a declarar por motivos relacionados con su cargo porque -indican- ha tenido conocimiento del procedimiento “por ser el esposo” de Begoña Gómez y no por ser presidente.
Inciden además en que Sánchez tampoco podría acogerse a la dispensa legal que le exime de testificar en contra de su mujer, ya que hay otros dos investigados: el empresario Juan Carlos Barrabés, adjudicatario de varios contratos públicos investigados, y el rector de la Universidad Complutense de Madrid, Joaquín Goyache.
Marlaska: la única forma posible es por escrito
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado que, según su formación como magistrado, la “única forma posible” y “conforme al ordenamiento jurídico” para que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declare como testigo en la causa que investiga a su mujer es por escrito.
La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha dicho que Sánchez colaborará con la Justicia, pero solo hay “un complot y un aliento” de la derecha y ultraderecha en la investigación a Gómez.
Por su parte el portavoz del PP, Miguel Tellado, ha acusado a Pedro Sánchez de usar subterfugios para evitar dar explicaciones públicas de la corrupción de su entorno , pero le ha advertido de que el PP va a fiscalizar al Gobierno y “respirarle en la nunca”.
La Audiencia Provincial de Madrid ha fijado para el 30 de septiembre la deliberación y decisión sobre los recursos presentados por el abogado de Begoña Gómez y por la Fiscalía en los que piden que se archive o acote la investigación del juez Juan Carlos Peinado a la mujer del presidente del Gobierno. EFE
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