Argel, 3 sep (EFE).- La primera medida que llevará a cabo el candidato socialista Youcef Aouchiche, si gana las elecciones presidenciales del próximo sábado 7 de septiembre en Argelia, será “la liberación de los detenidos de opinión y políticos”, aseguró en una entrevista con EFE, en la última jornada de campaña electoral.
Aouchiche, líder del histórico partido de oposición Frente de las Fuerzas Socialistas (FFS), que boicoteó los presidenciales desde 1999, dice que tomó “la difícil decisión” de presentarse, como una estrategia que impulse al partido a un futuro Gobierno y porque “la abstención no es la alternativa para construir el cambio”.
El más joven de los tres candidatos, con 41 años, cree que Argelia vive “un retroceso” de las libertades democráticas y que el “volátil” contexto regional e internacional conlleva “riesgos en la sostenibilidad y continuidad del estado nacional” argelino.
Nacido en la rebelde región de la Cabilia, que registra los índices más altos de abstención en todo el país, afirma que “no todas las condiciones están reunidas para unas elecciones que susciten el interés” ciudadano, pero está convencido de que la participación puede constituir el principio de un proceso de cambio.
Libertades, en el corazón del programa
“Es una cuestión central en nuestro programa electoral, nos comprometemos como primera medida si somos elegidos en el puesto de presidente de la República, (firmaremos) un decreto presidencial para liberación de todos los detenidos de oposición y políticos”, manifestó.
Desde las protestas populares del 'Hirak' que marcaron los anteriores comicios de 2019, cientos de activistas han sido detenidos y actualmente unos 225 continúan en prisión, según datos obtenidos por EFE de defensores de derechos humanos.
Aouchiche, que apuesta por un cambio “pacífico”, cree que la medida es necesaria para “instaurar un clima de tranquilidad y de concordia nacional favorable al inicio de las otras reformas políticas y económicas y sociales”.
Entre sus preocupaciones está la modificación en 2021 del artículo del código penal 87 bis que amplió la categoría de “terrorismo” y las penas: “Una especie de espada de Damocles que está en la cabeza de todos los ciudadanos argelinos”.
Su apuesta por ampliar las libertades permitirá a los argelinos participar “de manera efectiva en el esfuerzo de construcción nacional”, propone.
La abstención no es la alternativa
El candidato socialista compite en la carrera electoral contra el líder islamista de Movimiento de la Sociedad por la Paz (MSP), Abdelaali Hassani, y el actual presidente, Abdelmajid Tebboune, a quien todas las quinielas dan como ganador.
El interrogante continúa en la participación que en 2019 registró el índice más bajo de todas las presidenciales celebradas en Argelia (39,8%), después de un considerable aumento de la abstención en 2014, cuando cayó hasta 51,7%, con previas que se movían entre el 60% y el 85%.
“La abstención no puede constituir una alternativa y no puede arreglar sus problemas, entonces partiendo de este punto de vista deseamos una adhesión fuerte de nuestros ciudadanos para votar por nuestro programa, 'Visión', que es un programa ambicioso”, arenga.
Aouchiche se muestra preocupado por la coyuntura regional, en referencia a las fronteras con los países del Sahel y Libia, y considera que la responsabilidad histórica de su partido les fuerza a implicarse “para la defensa del país, la cohesión y la unidad”.
Independientemente de los resultados, anticipa sobre unos comicios que se dan por decididos, a largo plazo el objetivo se trata de “constituir un frente patriótico progresista, democrático” que pueda ser alternativa “al poder actual”.
“Nuestra participación en estas elecciones es una convicción política y estratégica con el objetivo de movilizar a los ciudadanos y crear otra vez los espacios de acción políticos verdaderos que permitan el compromiso y que darán las condiciones de un verdadero cambio en el país”, sentencia.
Laura Fernández Palomo