“Estaremos aquí durante muchos años en pro de de nuestros ideales y los derechos de los griegos” declaró el líder de Amanecer Dorado en 2013 durante una intervención en el Parlamento griego. Su promesa, o mejor dicho, su amenaza, se hizo realidad en estas últimas elecciones parlamentarias.
Amanecer Dorado, el partido neonazi griego, se ha consolidado como tercera fuerza política en Grecia, a pesar de que su cúpula está en prisión preventiva desde septiembre de 2013. Los cargos a los que se enfrentan abarcan casi todos los delitos del código penal. Entre ellos: gestión de una organización criminal y posesión de armas.
Amanecer Dorado entró en el parlamento griego por primera vez tras las elecciones parlamentarias de 2012. Pasó de un marginal apoyo del 0.29% a un 6.92% que le valió 18 escaños. Desde ese momento empezaron a aumentar drásticamente los ataques violentos, de grupos de asalto vinculados al partido, contra inmigrantes, homosexuales y antifascistas. Mientras, la policía y la justicia griegas miraban hacia otro lado. La gota que colmó el vaso fue el asesinato del músico antifascista Pavlos Fyssas a manos de un alto cargo de la oficina regional de Amanecer Dorado en Nikaia, un barrio obrero del Pireo.
En realidad, el primer triunfo de Amanecer Dorado fue en las elecciones municipales del 2010, cuando su líder, Nikos Michaloliakos, fue elegido concejal del Ayuntamiento de Atenas con 10.222 votos. En aquel momento se atribuyó este hecho al problema que suponían los inmigrantes “ilegales” que había en el centro de Atenas, pero pronto se vio que Amanecer Dorado era un fenómeno más amplio. Para lograr ese primer éxito, Amanecer Dorado, a pesar de una base ideológica ultranacionalista, xenófoba, nativista, racista, irredentista y autoritaria muy clara, empezó a presentarse a si mismo como un partido patriota y ortodoxo.
Pero este cambio fue solo retórico. El núcleo del partido estaba siempre apoyando su convicción nacional-socialista desde el inicio de la formación, a principios de los años ochenta. En numerosas publicaciones del periódico homónimo que salieron desde los 1980, Amanecer Dorado elogió a Adolf Hitler y a distinguidos líderes Nazi. También adoptó la ideología del NSDAP (Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán), su estructura piramidal, su culto del líder, y su estética: los símbolos, el vestuario militar, los uniformes, el saludo romano y los desfiles con antorchas.
Antes de la detención de sus líderes en 2013, la organización estaba creando un ejército secreto de unos 3.000 seguidores. Entró en la red internacional de organizaciones de extrema derecha y hasta llegó a servir como ejemplo para ellas, sobre todo después de su primer triunfo electoral en las elecciones municipales del 2010.
Amanecer Dorado jugó muy bien el papel de único representante del nacionalismo antisistema y logró un gran éxito tanto dentro como fuera de Grecia. En las elecciones europeas de 2014 el partido sacó un alarmante 9.38% consiguiendo 536.409 votos. El pasado 25 de enero, en las recientes elecciones parlamentarias de 2015, su porcentaje bajó al 6.28%, pero si lo comparamos con las últimas elecciones de 2012 sólo perdió 50.000 votos, pasando de 426.025 a 388.000. Eso significa una bajada de un 0.69% y un escaño menos, quedándose así con 17 escaños. Estos resultados se consiguieron con una mínima campaña preelectoral, con el líder interviniendo en los mítines por teléfono desde la cárcel.
Según una investigación de Kapa Research, la mayoría de los votantes de Amanecer Dorado son parados, empresarios, y trabajadores del sector privado, hombres en su mayoría. Los que menos les votan son las amas de casa, los pensionistas y los estudiantes. Los jóvenes, sobre todo entre 24 y 29 años, están más dispuestos a apoyar Amanecer Dorado que los mayores de 54 años. Un 6.1% de los votantes del Amanecer Dorado tiene educación básica, un 7.6% media y un 4.9% alta. También un preocupante 40-50% del cuerpo policial vota a Amanecer Dorado, como en las elecciones de 2012.
De gran interés es también el trasvase de votos. Amanecer Dorado atrajo a un 0.4% de los votantes de Syriza, 0.5% de Nueva Democracia, 0.2% de PASOK, 0.4% del Rio, 0.5% del Partido Comunista, 0.9% de ANEL y un 1.5% de LAOS. Por otro lado, el 10.7% de los votantes de Amanecer Dorado esta vez han optado por Syriza, un 15.3% por Nueva Democracia y un 5.4% por ANEL.
Las elecciones de 2015 han confirmado la existencia de una base electoral sólida de derechas. Un electorado fiel al tríptico “patria-religión-familia” que vota a Amanecer Dorado a pesar su comportamiento ilegal, un hecho más relacionado con una ideología conservadora y autoritaria que con la crisis. Sin embargo, otros factores que han contribuido al auge del apoyo a Amanecer Dorado son tanto la crisis económica, como la crisis política que le acompañó e incluye el voto de protesta contra el status quo, la desilusión con los partidos gobernantes, y la desilusión con el partido populista de extrema derecha LAOS después de apoyar las medidas de austeridad cuando entró en la endeble coalición con Nueva Democracia y PASOK. La respuesta de Amanecer Dorado fue una solución “nacionalista” basada en los valores tradicionales griegos.
Amanecer Dorado también sacó provecho de la realineación del espacio político griego, sobre todo, de la fragmentación de los partidos de centro. Amanecer Dorado es, por encima de todo, un partido diseñado a medida para los tiempos en los que vivimos. Según el abogado Thanasis Kampagiannis, miembro de la iniciativa Jail Golden Dawn, Amanecer Dorado es: una organización de “soldados” callejeros creada para confrontar la “amenaza de las izquierdas”, un contrapeso al auge de Syriza.
Si el nuevo gobierno de Tsipras no es capaz de dar respuestas a la fisura surgida de las últimas elecciones entre proeuropeísmo (austeridad) y antieuropeísmo (antiausteridad), el peligro real de un ascenso mayor de las fuerzas que representan el lado más oscuro de Grecia nos tendría que preocupar a todos.