El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, reprocha a las asociaciones de vecinos que criticaban, entre otras cuestiones, el nuevo sistema de subvenciones municipales que “algunas de ellas, no todas, se gastan el 70% de esas ayudas en facturas de iPhone, teléfono y material de oficina”. El alcalde, cuestionado por el número de asociaciones que presentan esos gastos, no ha sabido precisar el número y ha dicho que son “algunas”.
Javier Maroto asegura que su relación personal con las asociaciones es abierta y positiva “lo cual no quiere decir el Ayuntamiento no deba controlar el gasto que tienen. A nadie le parecerá razonable que se haga esto con el dinero de todos los vitorianos. Las asociaciones no están para eso, deben cumplir otras funciones. Esto tiene que ser reconducido”. Maroto entiende que reducir la partida destinada a subvencionar las actividades del movimiento asociativo es necesario “porque el momento lo requiere. Si a algún vecino o asociación le molesta, deberá entender que hablamos solamente de control de gestión y eficacia de las cuentas públicas”.
De esta forma salía al paso de las críticas vertidas por 26 agrupaciones que acusaban al regidor de anular la participación ciudadana y recortar las subvenciones. Precisamente, los colectivos vecinales se reunirán hoy para analizar las palabras del alcalde y ofrecer una respuesta.