El número de personas que necesitan diálisis o trasplante sigue creciendo en Andalucía, continuando la tendencia ascendente de los últimos años, por lo que ya son casi 11.000 los andaluces que precisan Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS) para reemplazar la función de sus riñones.
No obstante, según se detalla en una nota de prensa emitida este miércoles por la Sociedad Española de Nefrología (SEN), Andalucía se sitúa por debajo de la media nacional en el impacto de la enfermedad renal en sus fases avanzadas, con una prevalencia que alcanzó en 2020 las 1.293 personas por millón de población (pmp) (frente a 1.363 pmp nacional).
De igual modo, la incidencia es ligeramente inferior a la media nacional, con 139 pmp frente a los 141 pmp de la media nacional, con un descenso del 7% respecto a 2019 y situándose entre las comunidades españolas que redujeron su incidencia en 2020.
Los últimos datos en España reflejan la gravedad de esta situación, con una prevalencia de la enfermedad renal crónica (ERC) que ha crecido un 30% en la última década, y con una tasa de personas en TRS --es decir, diálisis o trasplante-- que se sitúa en 1.363 pmp. Por su parte, la incidencia se sitúa en 141 pmp, lo que supone que más de 6.700 personas iniciaron diálisis o trasplante en 2020, año en el que se produjo un ligero descenso en el número de personas que iniciaron TRS debido a la pandemia. En total, más de 64.600 personas con ERC en nuestro país necesitan un tratamiento que reemplace la función de sus riñones.
Además, la tasa de mortalidad ha crecido también más de un 30% en los últimos diez años, y en 2020 fallecieron más de 5.800 personas en TRS en España, con un aumento también motivado por el Covid, ya que los pacientes renales son de “los más vulnerables y que más se han visto afectados por este”, según la SEN.
Con motivo de este día, la SEN quiere hacer un llamamiento sobre el crecimiento de esta enfermedad, y la importancia de la prevención, el diagnóstico precoz y promoción de la salud renal como mejores medidas frenar el avance de una patología que ya afecta entre un 10-15% de la población adulta en España.
Un problema de salud pública
El crecimiento de la ERC, según ha señalado la SEN, se relaciona con factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular (responsables del 50% de los casos), la obesidad, la hipertensión arterial o el tabaquismo, muchos de los cuales podrían prevenirse con la adopción de unos hábitos de vida saludables, que permitirían frenar su avance. A ello hay que sumarle que es una enfermedad que presenta síntomas poco reconocibles en sus estadios iniciales, y que cuenta con una tasa de infradiagnóstico que supera el 40%.
La SEN ha puntualizado que, a pesar de que la prevalencia e incidencia no deja de crecer, la ERC continúa siendo poco conocida para la mayoría de la sociedad y la opinión pública. “Es un grave problema de salud pública que sigue creciendo y que se conoce como la epidemia silenciosa porque su diagnóstico suele ser tardío, cuando la enfermedad ya se encuentra en fases avanzadas”, ha explicado la presidenta de la SEN, Patricia Sequera, añadiendo que “es por ello por lo que se requiere de un mayor esfuerzo de prevención y detección precoz para lograr frenar su crecimiento en España y el mundo”.
Medicina preventiva y detección precoz
“En España somos excelentes en el tratamiento en las fases avanzadas de la ERC, como demuestra nuestro liderazgo mundial en trasplante renal o los altos índices de supervivencia de los pacientes, pero es necesario un mayor esfuerzo en las etapas previas, con un Plan de Salud Renal en España, que recoja todos los esfuerzos y recursos que se pueden destinar para avanzar en las medidas preventivas y de detección precoz, con la colaboración de la atención primaria y aunando otras estrategias que también son básicas para mejorar el tratamiento y la calidad de vida de las personas con ERC”, ha señalado Sequera.
La directora ha subrayado que las estrategias son “por un lado, el fomento de diálisis domiciliaria -con importantes beneficios para los pacientes y para el sistema sanitario-, y por otro, un mayor impulso a la donación de vivo, para así reducir las listas de espera”.
Las ciudades andaluzas se tiñen de rojo
Para sensibilizar a la población sobre el crecimiento de la ERC y promover la prevención y cuidado de la salud del riñón, la SEN, junto a la Asociación Para la Lucha Contra las Enfermedades Renales (Alcer); la Organización Nacional de Trasplantes (ONT); la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica (Seden); la Asociación Española de Nefrología Pediátrica (AENP); y la Asociación Española de Urología (AEU) han promovido una campaña con motivo del Día Mundial del Riñón
Este año las actividades incluyen la iluminación en color rojo de los principales edificios públicos o monumentos más emblemáticos de numerosas ciudades y capitales de provincia de España. La acción se realizará principalmente en la noche del 9 al 10 de marzo y entre las ciudades que participan se encuentran algunas andaluzas como Sevilla (Plaza de España y Plaza Juan de Austria); Málaga (Ayuntamiento), Huelva (Muelle del Río Tinto); Jaén (Ayuntamiento); y Almería Auditorio Maestro Padilla, Teatro Apolo y Fuente de los 103 Pueblos).
Otras ciudades participantes son Madrid, Barcelona, Santander, Oviedo, Vitoria, Valladolid, A Coruña, Vigo, Santiago de Compostela, Palma de Mallorca, Pamplona, Zamora, Murcia, Albacete, Alicante, Castellón, Cuenca, Burgos, Ciudad Real, Santa Cruz de Tenerife, Lleida, Lugo, Ferrol, Palencia, Ceuta y Melilla, entre otras.