“Pero ¿quién va a invertir en cultura en estos tiempos?”

“Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro” (Emily Dickinson). La ExtraVagante, que así da la bienvenida en su página web y en su escaparate, cree en los libros pero también en los libreros. Tres de ellos iniciaron un viaje empresarial y cultural que acaba de ser premiado por su innovadora forma de financiarse. Constituida como cooperativa, cuenta con la inversión de 18 micromecenas. Nuevas ideas para momentos difíciles. El Siglo de Oro pero en la Alameda de Hércules, en Sevilla, a través de pequeños inversores y con el intercambio humano, social, emocional y cultural como principal premisa.

Según cuenta Maite Aragón, presidenta de la cooperativa, que cuenta con el apoyo y la tutela de la Federación Andaluza de Cooperativas y Trabajo Asociado (FAECTA), “lo que parecía una locura (¿quién va a invertir en cultura en estos tiempos?) no lo era tanto”. Después de tres años vendiendo libros en un local de 35 m2 y explotando espacialmente su pequeño patio para actividades culturales, decidieron dar un paso más. Los números no terminaban de cuadrar y optaron por captar socios inversores. Ahora, en su nueva tienda, han logrado fidelizar una clientela comprometida e implicada que valora su esfuerzo a la hora de ofrecer cultura en una zona de Sevilla absorbida de un tiempo a esta parte por otra cultura, la gastronómica.

La ExtraVagante nació como libreria de viajes. Su andadura se remonta a 2008, cuando tres libreros que habían trabajado por cuenta ajena y que tenían claro que querían seguir viviendo de ello, pusieron toda su energía en fundar su propio negocio. “Estábamos completamente perdidos”, recuerda Maite, que agradece el apoyo y asesoramiento del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE) de la Alameda, unos “vecinos” que “siguen estando presentes”. La tienda abrió finalmente en 2009 con el objetivo de difundir cultura en su más diverso sentido.

En 2012 apostaron por reciclarse y, dado su modelo participativo, eligieron la fórmula de la cooperativa y buscaron un local más visible. “Era crecer o morir”, explica Maite. Y no pareció una mala decisión. Hace escasos 20 días les han otorgado el Premio Arco Iris a la Mejor Iniciativa Cooperativa en su 25ª edición.

Estos “libreros kamikazes”, dentro de un sector “muy complicado”, más aún en los tiempos actuales, han conseguido su forma de negocio. Talleres de escritura, cuentacuentos, conferencias, presentaciones, pase de cortos y documentales, creación y apoyo a campañas solidarias, exposiciones, talleres, club de lectura... No sabemos si 'excesivamente peculiar u original', como define la RAE al 'extravagante', pero sí un lugar de encuentro que trata de distinguirse.

“Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro” (Emily Dickinson). La ExtraVagante, que así da la bienvenida en su página web y en su escaparate, cree en los libros pero también en los libreros. Tres de ellos iniciaron un viaje empresarial y cultural que acaba de ser premiado por su innovadora forma de financiarse. Constituida como cooperativa, cuenta con la inversión de 18 micromecenas. Nuevas ideas para momentos difíciles. El Siglo de Oro pero en la Alameda de Hércules, en Sevilla, a través de pequeños inversores y con el intercambio humano, social, emocional y cultural como principal premisa.

Según cuenta Maite Aragón, presidenta de la cooperativa, que cuenta con el apoyo y la tutela de la Federación Andaluza de Cooperativas y Trabajo Asociado (FAECTA), “lo que parecía una locura (¿quién va a invertir en cultura en estos tiempos?) no lo era tanto”. Después de tres años vendiendo libros en un local de 35 m2 y explotando espacialmente su pequeño patio para actividades culturales, decidieron dar un paso más. Los números no terminaban de cuadrar y optaron por captar socios inversores. Ahora, en su nueva tienda, han logrado fidelizar una clientela comprometida e implicada que valora su esfuerzo a la hora de ofrecer cultura en una zona de Sevilla absorbida de un tiempo a esta parte por otra cultura, la gastronómica.