¿Cree que alguna vez se encontrará el cuerpo de García Lorca?
“Yo espero que sí, pero la Junta de Andalucía anterior lo hizo muy mal. Nos prometieron hacer un tercer intento pero lo fueron demorando de una manera alevosa. Juanma Moreno dijo hace un año que había que buscar a Lorca porque es de todos, no de rojos ni azules, y tenía razón, pero veo muy difícil que desde el PP la Junta actúe. Con Vox y Juanma Moreno, no lo sé. Se tiene que conseguir, pero la familia no ayuda nada para localizarlo. Nunca han querido, nunca han ayudado nada. La familia de Lorca, que tiene el desaparecido más llorado, más amado del mundo, podía haber ayudado algo y nunca lo han hecho. ¿Por qué va a ser especialmente doloroso para la familia? Es como si estuvieran ocultando algo, siento decirlo pero es así. Este país tiene que encontrar a sus muertos y enterrarlos, como dijo el Papa”.
Ha dicho al comienzo del recital que lo pasó muy bien investigando la estancia de Federico en Almería.
“Sí, y fue muy importante en su vida. Él dijo en Nueva York que empezó a estudiar música en Almería. Cuando él tenía ocho años su maestro en Fuente Vaqueros estaba en Almería y tenía una casa donde recibía a niños del pueblo, entre ellos a Federico. El poeta estuvo aquí ocho o nueve meses mientras los Escolapios le preparaban para estudiar el Bachillerato, antes que la familia se trasladara a Granada. Pero creo que esto no se ha investigado bastante”.
Eran las primeras reflexiones de este hispanista dublinés con nacionalidad española mientras firmaba autógrafos, recibía besos y felicitaciones tras casi hora y media de recital en honor al poeta ejecutado en 1936 por las tropas franquistas, en un dramático episodio que todavía no está aclarado y del que él, sabe, posiblemente, casi todo.
Almería fue la ciudad elegida para que el recital ‘Como canta el poeta’ llegara un 5 de Junio, exactamente 121 años después del nacimiento de García Lorca, mito que da ahora nombre a la principal Rambla de la capital, que vertebra con mármol, jardines y carriles bici de Norte a Sur la ciudad, cuando hace no tantos años era un descampado que inundaban las riadas.
“No sé exactamente porqué se ha elegido Almería para el aniversario, habría que preguntárselo a Luis Santana, yo no organizo esto”, reconocía el investigador, mientras seguía siendo agasajado por el público del teatro Apolo. “Hemos llorado y hemos disfrutado mucho, ha sido una maravilla, muchas gracias, ha sido un placer señor Gibson. Mi hija me ha dicho 'quiero una foto tuya con Ian Gibson'”, le dijo un asistente, y él, paciente con el gentío repetía “ha sido un placer”, firmaba autógrafos, mientras le seguían haciendo fotos y le contaban anécdotas, chismes locales o actualidad nacional, lo que hacía que Gibson soltara sin tapujos sus ideas o las dejara entre líneas: “sobre todo en una fecha como ahora ¿no?, con el Tribunal Supremo que tenemos... Me permito decir lo que digo porque tengo la nacionalidad española. Lo digo en línea con mi pensamiento sobre esto. Soy hispanista, y si te vas del país, no es lo mismo. Trabajo aquí, no tengo mis cuentas en Suiza, no tengo nada que esconder, lo vivo día a día…”.
'Como canta un poeta' consiguió abarrotar el teatro. Como bis, el barítono Luis Santana interpretó 'Granada' mientras los aplausos arreciaban. Una mujer se abrazaba a su acompañante sin cesar de llorar. El pianista Antonio López, el cantante y Gibson habían tocado la fibra sensible del respetable con su cancionero. “Lorca fue músico y repetía que conocía más de mil canciones”, afirmó Gibson al comienzo.
Fueron 16 canciones recopiladas y armonizadas por el poeta entre los años 20 y su fusilamiento, incluida una versión en alemán, que triunfó entre el público, “al igual que se rieron en la época de Federico”, aseguró Gibson. Allí sonaron por primera vez tres piezas inéditas, como Mariana Pineda, una canción de corro de niños; Canción de Otoño en Castilla, que recopiló en Burgos, y Duérmete niñito mío, una nana gitana, además de las consagradas Zorongo, Tres Morillas, Romancero Gitano, A la muerte de Ignacio Sanchez Mejías, Canciones de Cuna, Nana (Falla), Anda Jaleo,…
Precisamente con esta famosa copla se despidieron del recital-conferencia, en el que mientras Gibson daba a conocer las claves históricas de cada tema y momento, se proyectaban imágenes de Federico ysonaba el piano de Antonio López. Al final, el hispanista se dejó llevar y se arrancó junto a la voz de Luis Santana: “… anda jaleo, jaleo, ya se acabó el alboroto y vamos al tiroteo…”
Al igual que habían avisado al torero Sánchez Mejías de su inminente muerte, “a Lorca le avisaron que no saliera de Madrid, pero como la paloma de la canción, se abstuvo. Le fusilaron a los 38 años también cerca de un olivo. ¡Qué dolor, qué pena más honda”. Finalizó el recital y comenzó una cerrada ovación de una agradecida Almería en el 121 cumpleaños de un redivivo Federico García Lorca, cuyo genio infantil comenzó a aprender música, precisamente, en esta ciudad.