La situación sanitaria “se ha agravado de forma acelerada”, ha expresado el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno, Elías Bendodo, en su comparecencia tras el Consejo de Gobierno. Este martes la comunidad ha alcanzado los 54 fallecimientos, la cifra más alta de esta segunda ola, según los datos de la Consejería de Salud y Familias. También se han contabilizado 2.823 positivos por coronavirus, otro récord. El número de hospitalizaciones se acerca con 2.262 pacientes a los parámetros alcanzados en la pasada primavera donde el número más alto de ingresos, 2.708, se produjo el 30 de marzo.
En este contexto, el Gobierno andaluz ha activado el Plan 3000, un dispositivo de contingencia destinado a soportar hospitalariamente los 3000 ingresos por covid-19. Además, se ha instado a la Consejería de Salud y Familias, liderada por Jesús Aguirre, que ponga en marcha los preparativos para el Plan 4500. La tercera ola es “agresiva”, ha remarcado Bendodo.
El portavoz ha detallado que Andalucía está “preparada y equipada” para la nueva ola de la pandemia. A la partida presupuestaria de 117 millones de euros destinada a hacer frente a la expansión del coronavirus, se ha sumado un paquete de 50 millones de euros más “para seguir acometiendo mejoras” en los centros de salud y hospitalarios de la comunidad. Parte de esa suma irá destinada a adquirir equipamiento sanitario como mascarillas, respiradores, guantes, PCRs y test de antígenos. “Hay material almacenado para los próximos seis meses”, ha apuntado Bendodo.
Restricciones a la espera
En su intervención, el portavoz andaluz no ha dado detalles sobre la modificación en las restricciones del estado de alarma decretado por el Gobierno central el pasado domingo. Las decisiones sobre la franja horaria del toque de queda así como la decisión de cierre o no la comunidad siguen emplazadas a mañana cuando se reúna el Consejo de alertas de salud pública. El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, apeló a la toma de medidas “certeras y serenas” e insistió en el análisis de los datos antes de cualquier actuación. Sin embargo, esta mañana ha dado a entender la clausura de las fronteras autonómicas para el puente de Todos los Santos y Difuntos. “Soy muy pesimista”, ha dicho.
En esta misma línea, Bendodo ha subrayado que al gobierno andaluz “no le va a temblar el pulso con el objetivo de proteger vidas”. También ha avisado que “ni el estado de alarma ni el toque de queda van a servir para nada” si no existe un compromiso “claro” de los ciudadanos. El Gobierno andaluz apela a la “responsabilidad individual” para responder a la expansión de la covid-19 y pide “el acatamiento” de las normas para reducir la expansión del virus. “No vale buscar el resquicio”. También se ha tenido una mención especial al compromiso de los jóvenes para parar el virus.