La dimisión de Pilar Ariza Moreno como secretaria general de Universidades, Investigación y Tecnología de la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad de la Junta de Andalucía ha trascendido este jueves apenas unas horas después de que el consejero, Rogelio Velasco, se apresurara a desmentir la eliminación de la bonificación de las matrículas universitarias para alumnos que aprueben.
A media mañana, la secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, anunciaba en los pasillos del Parlamento que la directora general de Universidades de la Junta, Inmaculada Ramos, había deslizado la idea de la supresión de la que fue medida estrella del Gobierno socialista en la pasada legislatura, en el marco de una reunión con estudiantes en el Consejo Asesor de Universidades. La denuncia tenía visos de veracidad, porque el propio consejero había cuestionado la eficacia de esta medida, tachándola de “regresiva”, y abriendo la puerta a suspenderla.
Sin embargo, Velasco se apresuró a desmentir la denuncia de Díaz, convocó de urgencia a los periodistas en los pasillos del Parlamento y aseguró que la gratuidad de las matrículas se mantendrá “hasta el final de la legislatura”. El consejero aseguró que la reunión en el Consejo Asesor de Universidades fue “transparente, abierta participativa y cordial”, y terminó anunciando un proyecto en ciernes de su departamento para mejorar la movilidad del alumnado universitario entre provincias andaluzas. Cuatro horas después saltaba la noticia de la dimisión de la máxima responsable de política universitaria -después del consejero- aduciendo “motivos personales y profesionales”.
La dimisión de Ariza, según indican fuentes de la Junta, no tiene “nada que ver” con la polémica sobre la gratuidad de las matrículas al que se había referido horas antes la dirigente socialista. Díaz había denunciado que “la directora general de Universidades -que depende directamente de Ariza- trasladó a los representantes de los estudiantes de las universidades públicas de Andalucía que, aunque en el Presupuesto aparezca la partida de las bonificaciones en las matrículas universitarias para los chavales que aprueban, este Gobierno no comparte la gratuidad de la universidad pública y, después, habrá una modificación presupuestaria para eliminar esa bonificación gratuita que tienen los estudiantes cuando aprueban”.
El consejero de Economía salía rápidamente al paso para desmentirlo y aseguró que, según le había transmitido la directora general, en su encuentro con los representantes de los universitarios “no hubo nada oscuro ni oculto, nada en que los estudiantes estuvieran en desacuerdo”.
Fuentes de la Consejería apuntan a este periodico que la dimisión de Pilar Ariza, la superior de Ramos en el escalafón del departamento del Ejecutivo andaluz que dirige Velasco, obedece a “motivos personales y otros motivos profesionales”. El consejero, que en el momento en que hacía las declaraciones conocía la intención de Ariza de presentar su dimisión, enmarcaba las declaraciones de Susana Díaz “dentro del juego político” para, “a ver si a base de repetir mucho algo aunque no sea cierto, la gente termine creyéndoselo”. “No le veo ningún tipo de racionalidad excepto el juego político”, zanjaba.
Fuentes de la Consejería aseguran “rotundamente” que “nada tiene que ver” el cruce de declaraciones entre Díaz y Velasco con la dimisión de Ariza, quien ya habría anunciado su intención de dejar el cargo antes de la citada reunión del miércoles. La secuencia cronológica de los hechos hace que se proyecte una idea algo enrarecida de los acontecimientos, reconocen las fuentes, pero insisten en que la dimisión no es una consecuencia de la polémica sobre la gratuidad de la matrículas.
Cese en Fondos Europeos
Por otro lado, el propio consejero explicaba este mismo jueves que por parte de la Administración autonómica se está “buscando muy activamente” a la persona que se haga cargo de la Dirección General de Fondos Europeos que ha quedado vacante después de que su titular, Isabel Álvarez, haya sido cesada porque “no estaba ejerciendo sus tareas de manera adecuada”.
El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) publicaba en su edición del pasado martes, 14 de mayo, el decreto 462/2019, de 7 de mayo, por el que se disponía el cese, “a petición propia”, de Isabel Álvarez Carmona como directora general de Fondos Europeos, “agradeciéndole los servicios prestados”.
En una atención a medios en el Parlamento andaluz, Velasco ha explicado que él no se considera una persona “extraordinariamente exigente”, sino “razonablemente exigente”, y desde ese criterio “moderado” se dio cuenta de que dicha alto cargo “no estaba ejerciendo sus tareas de manera adecuada”, de forma que trabajaba “en temas que no eran prioritarios” ni “urgentes”, que no figuraban entre “los que estaban establecidos inmediatamente como tareas a acometer”.
El consejero ha explicado que se dio cuenta de que Isabel Álvarez “no podía cambiar su esquema de trabajar, su enfoque”, por lo que “lo mejor ha sido que no continuara”, según ha apostillado.
Velasco ha alegado que cuestiones así ocurren “especialmente en el mundo de la empresa”, pero “también en el sector público”, y aunque cuando se busca contratar a una persona se recaba el “currículum profesional” del aspirante y “la información que puedas obtener en una entrevista de media hora charlando”, esta información “siempre es limitada, parcial, y nunca obtienes una completa hasta que esa persona está desempeñando el cargo y evalúas si lo está haciendo bien”.
Además, ha argumentado que “no conocía a ninguno de los altos cargos” que ha nombrado para su departamento salvo al secretario general de Economía, Manuel Alejandro Hidalgo, porque “me he llevado 30 años viviendo fuera de Sevilla y ha perdido ”muchísimas conexiones profesionales y universitarias“, y al respecto ha explicado que estuvo entrevistando a ”más de 80 personas en las primeras cinco semanas“ como consejero para incorporarlas a su equipo ”con el mejor criterio“, pero ha apostillado que eso también está ”sometido a un margen de error“.
Finalmente, ha revelado que, a expensas de que se encuentre nuevo director general de Fondos Europeos, ha dado “instrucciones” al citado secretario general de Economía para que esté “al cien por cien de su tiempo dedicado a fondos europeos”.