Ángeles Férriz, la “castigada” por Díaz que vuelve a escena para liderar a los socialistas en el Parlamento andaluz

Ángeles Férriz (Sevilla, 1978) es la elegida por Juan Espadas para medirse al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, en las sesiones de control al Gobierno andaluz. La diputada jiennense es la nueva portavoz del grupo socialista y vuelve a la primera fila del escenario político tras ser “castigada” por Susana Díaz a puestos de menor relevancia. Es la cara de la “oposición constructiva” que Espadas pretende desplegar en la cámara andaluza. 

Férriz, una de las personas más cercanas a Espadas, figuraba en todas las quinielas en esta renovación del PSOE-A. Hasta ahora ocupaba la portavocía de Asuntos Europeos, una comisión no legislativa, y donde fue a parar tras las fisuras con Díaz. Fue la propia expresidenta de la Junta de Andalucía la que impulsó su figura dentro del grupo parlamentario en años de buena relación. Férriz incluso recogió firmas para la moción de censura contra de Pedro Sánchez en el comité general que acabó con su dimisión. Después vinieron los desencuentros con Díaz. “Sigue siendo la portavoz de la Ejecutiva Regional, si bien ha admitido que hay presencia más activa y coral de otros portavoces en función de los temas”, dijo en septiembre de 2019 su ahora predecesor, José Fiscal.

Estos casi dos años en la sombra han mermado su exposición mediática. Al principio de la legislatura Férriz desempeñaba las funciones de portavoz de la Comisión de Presidencia. “Era una china en el zapato para Bendodo”, explica uno de los que fuera sus compañeros. Este mismo parlamentario resalta “las dotes políticas y oratorias” de la nueva portavoz socialista y cree que su designación es “magnífica”. Otra de las personas con las que compartió comisión fue el excoordinador de IU Andalucía, Antonio Maíllo, quien ha resaltado, pese a la discrepancia partidista, que “el parlamentarismo gana y eso es bueno para la Política”. Desde el PP auguran momentos de “buenos discursos” en las sesiones de control al Gobierno. Uno de sus diputados, y cercano a Férriz, no duda de su “valía”: “Es una de las mejores oradoras de la cámara, que defiende sus convicciones y que estaba desaprovechada”. Su último careo con Bendodo en la Comisión de Presidencia, a colación de las auditorías en los entes instrumentales, deja muestras de su tono punzante e inquisitivo. “La veo a usted en forma”, le replicó el consejero de Presidencia tras la intervención de la socialista.

Licenciada en Derecho y abogada, Férriz ocupa en la actualidad la Secretaría de Formación y Nuevos Afiliados dentro de la Ejecutiva Regional del PSOE-A, donde también es portavoz aunque su presencia ante los medios ha sido mínima en los últimos tiempos. Coordina el grupo parlamentario socialista de Jaén, donde Juan Espadas consiguió el 65% de los apoyos en liza de la provincia en las primarias. Con anterioridad fue miembro de la Ejecutiva Regional de Juventudes Socialistas de Andalucía y entre el año 2007 y 2009 fue alcaldesa del municipio jiennense de La Carolina donde vive desde los cinco años. También ostentó el cargo de vicepresidenta de la Diputación de Jaén en la que ejerció como responsable de Igualdad y Turismo y Desarrollo Local entre los años 2003 y 2007.

Sin broncas

Férriz ya prepara su interpelación a Moreno -relativa a las ayudas de la Junta a los ayuntamientos para la gestión de la Covid-19- en lo que escenificará el cambio orgánico en el grupo parlamentario socialista. A este nombramiento, ratificado por unanimidad este lunes por la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A, se le suman los de María Márquez, Gerardo Sánchez y Araceli Maese que pasan a repartirse los roles de portavoces adjuntos. La secretaría general del grupo queda en manos de Soledad Pérez, afín a Díaz, en una maniobra de integración de Espadas.

Más allá de las caras, el regidor hispalense busca activar un “nuevo modo de hacer política” que, según su círculo más cercano, sigue la misma hoja de ruta que utilizó cuando estaba en la oposición en el Ayuntamiento de Sevilla: “convertir al PSOE en una fuerza útil, en visualizarla como parte de la solución huyendo de la visión de conflicto que tanto aleja a la política de la gente”. El encuentro que mantendrá con Juan Manuel Moreno este jueves, con respecto a un posible pacto PP-PSOE para el acceso a los fondos europeos por parte los ayuntamientos andaluces, es un ejemplo de ese talante negociador. “Será un PSOE-A duro contra lo que se entienda que no responde al interés de la gente, pero no será un grupo bronco”, rematan las fuentes consultadas.