Cuando el Gobierno acaba de tomar otros 8.700 millones del Fondo de Reserva para pagar las pensiones, el panorama inminente para las personas que deben hacer uso de ellas no es muy alentador. De hecho, Cruz Roja Española advierte de que aquellos que han salido del mercado laboral en su último periodo previo a la jubilación, entre los 45 y los 60 años, podrían convertirse en “jubilados superpobres” al ser muy complicada su reinserción laboral.
“Aparcados sin expectativa”, “colectivo desaparecido” o “desempleados invisibles” son algunas de las calificaciones que han recibido este tipo de personas durante el desayuno informativo 'Mercado Laboral en Andalucía y Oportunidades de Inserción' que han presentado en Sevilla el coordinador general de Cruz Roja Española a nivel nacional, Antoni Bruel I Carreras, y el presidente autonómico, José Carlos Sánchez Berenguel. De las 11.616 personas a las que han dado cobertura en el primer semestre de este año, el 22,7% se corresponde con mayores de 45 años; un grupo de los más afectados por la reforma laboral y el abaratamiento de los despidos por parte de las empresas.
“No es un grupo muy presente en la demanda de empleo porque existen mecanismos sociales o familiares que los mantienen, ya que la dificultad está también en que suelen tener una cualificaciones muy específicas que son de complicada adaptación al mercado laboral”, apunta Bruel. Entre las circunstancias que rodean la situación de estas personas “expulsadas del sistema” es que “no hay mercado” para ellos y es necesaria la “intermediación directa con las empresas”. “Hay que enfocar respuestas para ese colectivo, al que hay que buscar alternativas porque muchos no saben que la indemnización no les va a durar para siempre”, ha incidido sobre quienes más especialmente padecen el estrés, la desconfianza o la falta de autoestima derivados de la falta de trabajo.
La nueva “pobreza laboral”
La labor que Cruz Roja lleva a cabo, según han expuesto, se centra en atender a las personas que salen de una situación de exclusión, las que no deben caer en ella y las que, a pesar de tener un trabajo, padecen una “nueva situación” de “pobreza laboral” debido a la precariedad y temporalidad del empleo. La tasa de inserción de aquellos que desarrollan un itinerario completo alcanzó en 2015 un 39%, según cifras de Cruz Roja, principalmente en el sector servicios y agrícola, adaptando la oferta a las demandas empresariales.
De los grupos atendidos en el Plan de Empleo de Andalucía, el 57% son mujeres y el 43,2 jóvenes menores de 30 años, destacando que las mujeres en dificultad social que son atendidas en proyectos específicos suponen un 15% del total de participantes. El 22% de las personas atendidas son inmigrantes. Los representantes de Cruz Roja han hecho hincapié en que las variables de desempleo se sitúan en Andalucía en general por encima de la media española.