No es habitual que en esta sección aparezca el fútbol de alta competición. Pero sí que podemos tener esa 'debilidad' cuando una imagen global, que se verá en cualquier rincón del planeta, vende Andalucía de esta forma tan relevante. Y hoy, una vez más, ha querido el sevillano Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, ser el mejor embajador posible y se ha ocupado de que la bandera de Andalucía se vea en todo el mundo. El camero, que fue el encargado de recibir el trofeo, se engalanó con la blanca y verde y no la soltó en ningún momento. El malagueño Isco fue el otro andaluz que salió de inicio en la alineación madridista que se ha hecho leyenda, al conseguir la duodécima Copa de Europa y la segunda consecutiva, algo nunca conseguido en el formato de Champions.
En cuanto al partido, el Madrid sufrió algo en una igualada primera mitad, para desmelenarse completamente en la segunda. Los autores de los tantos merengues fueron el mítico ya Cristiano Ronaldo (dos), además de Casemiro y el joven Asensio. Madrid celebra ahora un título que tiene una parte andaluza, una parte muy importante.