Andalucía Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
El rey pide a los políticos “serenidad” para rebajar “el ruido de fondo"
'Sor Collina', la monja que ejercía de enlace entre los presos y la mafia calabresa
OPINIÓN | 'El rey se hace un selfie en el barro', por Isaac Rosa

La campaña de los ‘cataluces’

La campaña de Ciudadanos en Andalucía la protagonizan cuatro personas: su candidato, Juan Marín; el líder de la formación, Albert Rivera; la portavoz nacional y jefa de la oposición en Catalunya, Inés Arrimadas; y el número uno por Málaga y exentrenador de la selección española de baloncesto, de Unicaja y Caja San Fernando, Javier Imbroda, el rookie (novato) de estas elecciones.

Rivera y Arrimadas son cataluces, un término acuñado por la revista Cambio 16 en los años ochenta para describir a las personas nacidas en Andalucía o de padres andaluces emigrados a Catalunya. Rivera recuerda en sus mítines por Andalucía que sus abuelos paternos son de La Coracha, un grupo de casitas, ya desaparecido, junto a la Alcazaba de Málaga; y los maternos, de Cútar.

Arrimadas anuncia nada más tomar la palabra que es un placer “estar en casa”. Nació en Jerez (Cádiz) hace 37 años y estudió Derecho durante cinco años en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. No habla de oídas de Andalucía. Ha estado más tiempo aquí, donde sigue viviendo su familia, que allí.

¿Cuánto fumas?

Respuesta. Todo lo que me da tiempo.

Parecida pregunta se les trasladó a los estrategas de la campaña de Ciudadanos en Andalucía.

¿Cuánto tiempo va a estar Inés Arrimadas en Andalucía?

Respuesta. Todo lo que le dé tiempo.

Ambos cataluces han estado en la precampaña, en el arranque de la misma y a partir de este domingo hasta el final estarán “todo lo que les dé tiempo”, es decir, seis mítines.

No hay nada que perturbe más a la candidatura de la socialista Susana Díaz (también a la de Juanma Moreno) que la presencia de Arrimadas en Andalucía, aunque la implantación provincial de C’s es invisible frente a la de los socialistas. La preocupación se debe a varios motivos: por su impresionante victoria en las elecciones catalanas de hace casi un año, convirtiendo el cinturón rojo de Barcelona en naranja; por el arrastre de simpatías y votos que estiman puede lograr hacia Ciudadanos el próximo 2 de diciembre; y porque la política de distensión de Pedro Sánchez hacia las formaciones independentistas catalanas sitúa a Díaz, en ocasiones, en un terreno incómodo. “A Susana Díaz le avergüenza lo que está ocurriendo, con Sánchez negociando indultos, pero ella calla”, afirma Marín.

En una entrevista publicada días atrás en los periódicos del Grupo Joly, el secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, admitió sin tapujos ese temor. “El mensaje de Inés Arrimadas será muy importante en Cataluña, pero aquí no hace falta porque ya está Susana Díaz”, dijo. Un dirigente del PSOE, que pide el anonimato, reconoce el nerviosismo que provoca a Díaz la dirigente catalana. “Ella cae bien. Le daría un palizón. Todo el mundo sabe que si Arrimadas fuera la candidata a la Junta lo íbamos a pasar muy mal”.

En los actos electorales de Ciudadanos, los asuntos nacionales no lo ocupan todo, como sí ocurre en los del PP cuando interviene Casado. No obstante, sí recuerdan que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno por el apoyo de los independentistas catalanes y subrayan que el PSOE de Andalucía “no pinta nada” en la dirección federal, sino el PSC de Miquel Iceta.

“No es imposible” ganar al PSOE

Los dirigentes de C’s se dirigen a su derecha y a su izquierda. A los votantes del PP que llevan 36 años y medio sin una alegría electoral en el cuerpo y a los votantes desencantados del PSOE. Buscan el centro, aunque a veces no lo hallan.

Ese es el segmento al que se dirige Arrimadas, presentando al PSOE andaluz como un partido agotado. “Todo lo que podía dar el PSOE de Andalucía, ya lo ha dado”. De Díaz suele decir que “es más de lo mismo” y recuerda “que no ha trabajado en otra cosa” que en la política.

Arrimadas se erige en defensora de sus paisanos de nacimiento desde Catalunya. “Yo estaba en el Parlament de Catalunya defendiendo a los andaluces cuando decían que los andaluces estaban todo el día en el bar. ¿Dónde estaba Susana Díaz?”, suelta en los mítines.

Promete, sin entrar en detalles, un cambio de gestión en la Junta para “que los padres que llevaron a sus hijos al aeropuerto puedan volver a recogerlos porque aquí hay oportunidades para trabajar”. Esta frase implica un cierto reconocimiento del avance de Andalucía, porque el avión no fue el medio de transporte en el que emigraron miles y miles de andaluces a mediados del siglo pasado. Y también pretende convencer a los que la escuchan de que “no es imposible” ganar al todopoderoso PSOE andaluz. “A los que os dicen que no es posible ganar, recordadles que nosotros lo demostramos en Cataluña y ganamos a los nacionalistas”.

Javier Imbroda está convencido de ello y en los mítines cuenta su experiencia como entrenador. “En 2015 fuimos el equipo revelación, el equipo simpático, y ahora tocamos las narices al bipartidismo. Somos los únicos que podemos ganar a los socialistas, lo saben los andaluces, excepto los que viven del PSOE”, afirma.

Juan Marín, que ha apoyado a Susana Díaz en los tres años y medio de legislatura, dice “estar encantado” con la presencia de Arrimadas y de Rivera. “Son un activo del partido en toda España, pero en Andalucía, todavía más, porque Inés es de aquí, es andaluza”, afirma a eldiario.es. A Marín no le importa que cuando visita Cataluña, la gente le confunda “con un escolta” de la jerezana. Allí percibe en la calle más tensión, mientras aquí va bajo palio. “Hay mucho descerebrado que para provocar la insulta, porque les fastidia que una mujer andaluza les desmonte las mentiras”, opina.

¿Le molesta a Juan Marín que le digan que si fuera Arrimadas la candidata podrían ganar las elecciones en Andalucía? El candidato a la presidencia de la Junta ríe y contesta con otra pregunta. “¿Cómo me va a molestar? No me molesta ningún halago a Inés, al revés, es un orgullo. Ella tiene un trabajo en Cataluña y cada uno en un sitio. Lo importante es que hay un solo proyecto. Ni celos, ni líos como los de Pedro Sánchez y Susana Díaz, y los de Casado y Moreno”.

La campaña de Ciudadanos en Andalucía la protagonizan cuatro personas: su candidato, Juan Marín; el líder de la formación, Albert Rivera; la portavoz nacional y jefa de la oposición en Catalunya, Inés Arrimadas; y el número uno por Málaga y exentrenador de la selección española de baloncesto, de Unicaja y Caja San Fernando, Javier Imbroda, el rookie (novato) de estas elecciones.

Rivera y Arrimadas son cataluces, un término acuñado por la revista Cambio 16 en los años ochenta para describir a las personas nacidas en Andalucía o de padres andaluces emigrados a Catalunya. Rivera recuerda en sus mítines por Andalucía que sus abuelos paternos son de La Coracha, un grupo de casitas, ya desaparecido, junto a la Alcazaba de Málaga; y los maternos, de Cútar.