Marmitako: guiso compuesto de bonito con patatas, cebolla, pimiento y tomate. Sírvase caliente en cazuela de barro siempre que sus vecinos no confundan una reunión de amigos con la preparación de un atentado terrorista. Reincidentes lo sabe. A finales del año 1991, la banda andaluza de punk rock se vio envuelta en la desarticulación de un supuesto comando de ETA que deja en minucias, o casi, los reiterados episodios policiales del aeropuerto de Miami. Lo cuenta el reciente documental Reincidentes, erre que erre.
La detención del vocalista Fernando Madina por alteración del orden público e intoxicación etílica ha recordado la que en 2010 sufrió el guitarrista Juan Manuel Rodríguez, también en el aeropuerto de Miami, confundido con un criminal buscado por el FBI. Aunque no se sabe si hubiera sido peor si los hubieran pillado preparando un marmitako.
“Cinco jóvenes sospechosos de colocar bombas”
“Cinco jóvenes sospechosos de colocar bombas”Así fue aquel suceso, explicado a través de los titulares de prensa de entonces: “La Policía detiene en Sevilla a cinco jóvenes sospechosos de colocar las últimas bombas”; “Los primeros indicios apuntan a que los jóvenes forman un comando de ETA”; “Un vehículo de Bilbao motivó a un vecino a denunciar la localización de los implicados”, “Familiares y amigos denuncian como ‘error’ la operación policial”.
El desmentido oficial fue un tanto más escueto: “La delegación guarda silencio tras la fallida operación en busca de etarras”. Era el inicio de la década que arrancaba con las Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla (Expo’92) y el detenido de Reincidentes José Luis Nieto, Selu, junto a otros cuatro jóvenes: José Ramón Garitaonaindía, Antonio Murgoitio, Igor Utadui y César Urrutxi, residentes en las localidades vizcaínas de Zaldívar y Elorrio.
“Un vecino llamó, dijo que debajo de mi casa había dos coches con matrículas del País Vasco y que había mucha gente extraña entrando y saliendo”, relata el que fuera saxofonista del grupo. Más tarde, “justificaron que el perro que buscaba explosivos confundió el olor con el del atún”, aunque, matiza, “nunca fue atún, fue bonito del norte”. Desde entonces, cuenta Selu, “empezaron a llamarnos el Comando Marmitako”.
La implicación del rock en los movimientos sociales
La implicación del rock en los movimientos socialesEs una de las anécdotas de tres décadas de historia para una banda histórica. Reincidentes, erre que erre es un audiovisual que recorre los últimos 30 años de movimientos sociales en España y Latinoamérica. Desgrana, dice su director y guionista, Miguel Paredes, de Intermedia Producciones, “esas luchas olvidadas, los logros conseguidos y la implicación del rock en las coyunturas políticas vividas”. El hilo conductor recae en la trayectoria musical de la propia banda andaluza, que cede protagonismo “a antropólogos, políticos, músicos y amigos” que desgranan la historia reciente.
Retrata así temas como el inicio de la transición democrática y la lucha universitaria (germen de Reincidentes), el movimiento de ocupación, antimilitarista y de insumisión, las protestas contra el ingreso en la OTAN y la Expo’92, la censura y el feminismo o Marinaleda y Latinoamérica como ejemplos de pueblos que resisten. Hasta llegar a la recuperación de la memoria histórica, el movimiento antiglobalización o el 15M.
Parajes transitados por una “juventud rebelde” que recuperan voz a través de protagonistas como Juanjo Pizarro: “la transición fue un espejismo”; Ángel del Río: “nos vendieron la moto del fin de la historia”, pero se ha llegado a “un capitalismo neoliberal ecocida y genocida”; Mireya Forel: “los pilares de la economía tenían miedo de que esta revolución democrática se transformara más allá”.
Pueblos andaluces: un hervidero de inconformismo y transformación
O Felix Talego: “en los pueblos andaluces había un hervidero de inconformismo y deseos de transformación”; Luis Pizarro: “los sectores más reaccionarios se hacen dueños del tinglado”; Fermín Muguruza: “cuando alguien dice que no es político, esa ya es una decisión política” e Isidro Maqueda: “el movimiento de insumisión era muy contestado, había gente que nos veía ya como los rebeldes totales”.
Otros tantos protagonistas, además de los propios integrantes del grupo sevillano, desgranan las últimas décadas. “Decidimos darle un enfoque en el que el protagonismo lo adquirieran todos los movimientos sociales”, relata el director, “luchas” que en estos años “han tomado muy diferentes formas” pero que, entiende Miguel Paredes, “en el fondo es única y hay un objetivo común”. “No es”, avisa, en todo caso, “el típico documental que habla sobre un grupo de rock”.
Para el vocalista de Reincidentes, Fernando Madina, “vivimos en un momento ya en que a base de tanto palo la gente ya se está comiendo la zanahoria y está pasando de todo”. Una época en que están “solidificando en los cerebros de la gente el hecho de que mientras puedas comer está todo bien”. Pero especifica: “sólo comer, porque últimamente ya ni protestar”.
Madina ha sido detenido estos días en Miami y su ficha policial indica: “Chargue: disorderly intoxication. Case Number: M13052467”. “M”, ¿de marmitako, quizás? ¿Y qué hubiera dicho el periodista José María Carrascal de un suceso así? A comienzos de los años 90, cuando Selu fue detenido junto a un presunto comando de ETA, dijo: “Tienen suerte estos gánsters de la capital andaluza (…) ¿a qué se debe? ¿A que los etarras pierden la cabeza con la manzanilla o a que los sevillanos están más alerta que el resto de los españoles? Sería interesante estudiarlo”.