Andalucía Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
La apuesta de Macron por la derecha fracasa en tres meses
Segunda oportunidad para Muface: las aseguradoras ponen sus condiciones
'Sus rosarios, nuestros ovarios', por Neus Tomàs

Carta abierta a Juan Manuel Moreno Bonilla a favor de la financiación de las universidades públicas andaluzas

4 de diciembre de 2024 06:01 h

0

Estimado Presidente,

Con el máximo respeto y desde la única pretensión de colaboración que nos ha caracterizado como entidad que intenta dar voz a una parte importante de la sociedad civil andaluza, queremos transmitirle la preocupación por las últimas noticias que alertan sobre la situación presupuestaria y financiera de nuestro sistema universitario público.

Para empezar, a nadie se le escapa la importancia vital que tiene la universidad para muchos de nuestros jóvenes; casi doscientos cincuenta mil están matriculados en nuestro sistema universitario público. Desde su acceso al mismo, sus aspiraciones individuales reflejan también las de sus familias, y las de la sociedad en su conjunto, que ven en la educación superior pública no sólo la posibilidad de adquirir competencias y capacidades para el desarrollo personal y profesional, sino la materialización efectiva de los principios constitucionales de equidad e igualdad de oportunidades. Estas aspiraciones tienen especial relevancia para las clases medias y trabajadora, y para colectivos en situación tradicional de desventaja, como son las mujeres y el mundo rural. Ni que decir tiene que todo ello es especialmente importante en Andalucía.

Es un derecho legítimo de todos los andaluces a progresar, sin condición económica familiar, ni deuda adquirida, que condicione el libre pensamiento, conocimiento y el mejor hacer. Nuestro capital humano es en gran parte universitario, y todo apoyo es poco.

La primacía del mérito y el esfuerzo, ambos primordiales en el ámbito universitario, ayuda a que las personas puedan llegar a expresar todo su potencial individual en el ámbito de la sociedad, enriqueciéndola económicamente y fortaleciéndola colectivamente.

Sin embargo, el rol de la universidad trasciende a su consideración como un mero centro de educación avanzada. Con ser de por sí suficientemente importante este aspecto, el sistema universitario abarca otras funciones y otros roles que repercuten directamente en nuestro modelo social y económico, como se ha hecho evidente en nuestra tierra en las últimas décadas.

Andalucía disfruta de un sistema universitario público, construido con un extraordinario esfuerzo intergeneracional

Andalucía disfruta de un sistema universitario público, construido con un extraordinario esfuerzo intergeneracional de muchas décadas, que, pese a todas las dificultades, tiene una calidad contrastada, y que genera decenas de miles de empleos cualificados, directos e indirectos. 

Está, además, articulado territorialmente, lo que supone sin duda un valor añadido a cuidar. En cada provincia, se produce y difunde el conocimiento avanzado, y se está en condiciones de asegurar su transferencia, no sólo a través de la formación de las personas como profesionales, sino también directamente a través del I+D+i orientado a sectores productivos, tanto públicos como privados, que son estratégicos para Andalucía.

Como modelo diferencial, frente a otros posibles, y fruto de decisiones políticas que respondieron en cada momento a la demanda social, tenemos la suerte de que en cada provincia de nuestra Comunidad haya una universidad pública de calidad (dos en el caso de la provincia de Sevilla). Por ser cercanas, permiten a los estudiantes no desvincularse de su ámbito más próximo si no lo desean, y también aseguran la conexión de las dinámicas académicas, tanto formativas como de generación y transferencia del conocimiento, con los sectores productivos del entorno. Pese a las dificultades que recurrentemente se señalan, los datos de empleabilidad de los egresados, de investigación y de transferencia del conocimiento así lo corroboran, y tenemos reiterados ejemplos de ello: las universidades públicas son un factor de retención y atracción de riqueza en el territorio que no se puede desaprovechar.

Una financiación adecuada, cumpliendo por otro lado con los compromisos que nos consta que se habían adquirido, es un elemento básico para asegurar la pervivencia de nuestro modelo y su necesario crecimiento y evolución

Una financiación adecuada, cumpliendo por otro lado con los compromisos que nos consta que se habían adquirido, es un elemento básico para asegurar la pervivencia de nuestro modelo y su necesario crecimiento y evolución. La universidad pública devuelve a la sociedad, y a su economía, mucho más de lo que recibe como financiación (hasta cuatro veces más, según algunos estudios). Esta financiación no debe entenderse como un gasto, sino como una inversión fundamental. No hay sistema o modelo económico robusto, o que pretenda serlo, que no se sustente en la creación y transmisión del conocimiento. Y, además, tiene el sistema universitario la enorme suerte y la responsabilidad de dar formación a los líderes del futuro en Andalucía.

El momento actual es de vital importancia. Los cambios sociales y económicos, en plena evolución a los paradigmas de digitalización y sostenibilidad, exigen no desatender nuestro sistema de conocimiento, del que las universidades públicas son el principal protagonista en Andalucía. Demandan estos cambios, además, un compromiso concreto y real. Corresponde a la Junta de Andalucía cumplir con su deber legal de proveer de financiación suficiente al sistema universitario público, que es, por otra parte, el que únicamente está en condiciones de funcionar con criterios de calidad contrastados. No hacerlo sería una dejación de esta función básica de la administración autonómica y afectaría al desarrollo no solo del propio sistema universitario sino a la sociedad en su conjunto. Universidades públicas con más de 500 años de existencia no pueden estar en riesgo, un lujo que pagaremos caro.

Sabemos que esto le preocupa, y no dudamos de que atenderá, con atención, la petición que le hacemos con esta carta, que no hace más que reiterar las voces de los responsables universitarios públicos (rectores, consejos de gobierno, claustros…), a los que además pedimos respetuosamente que reciba y escuche directamente, bien mediante una reunión expresa para tratar este asunto fundamental, bien, convocando y siendo presidido por usted el Consejo Andaluz de Universidades. Si se suman las comunidades universitarias (estudiantes, profesores, investigadores y el personal técnico de administración y servicios) y sus familias, más de un millón de andaluces están pendientes de su decisión.

Quedamos a la espera de sus noticias, un cordial saludo,

Francisco Casero Rodríguez, Presidente. Fundación Savia por el Compromiso y los Valores

Estimado Presidente,

Con el máximo respeto y desde la única pretensión de colaboración que nos ha caracterizado como entidad que intenta dar voz a una parte importante de la sociedad civil andaluza, queremos transmitirle la preocupación por las últimas noticias que alertan sobre la situación presupuestaria y financiera de nuestro sistema universitario público.