Tras acumular pérdidas superiores a los 3 millones de euros en los últimos cuatro años, según su gestora, la finca La Almoraima, una extensión de 14.000 hectáreas situada en el Parque Natural Los Alcornocales (Cádiz), ha generado más de un millón de euros de beneficios a lo largo de 2013, según el Gobierno de la nación.
Isabel Ugalde, gerente desde marzo de 2012 de La Almoraima, la sociedad anónima cuyo socio mayoritario es el Organismo Autónomo de Parques Nacionales, ha reconocido a eldiario.es/Andalucía que “este año voy a presentar más de un millón de beneficios”. Según la gestora, el balance positivo se alcanza a pesar de haber tenido que “aflorar partidas ocultas de 2011 y 400.000 euros en pérdidas de años anteriores”. Durante su primer año de gestión, las pérdidas ascendieron a 1,22 millones de euros.
La Almoraima es objeto de disputa entre la Junta de Andalucía y el gobierno central desde que éste anunciara su venta en octubre del año pasado. El ministro Miguel Arias Cañete llegó a ofrecerle la finca al Gobierno autonómico si pagaba 300 millones de euros, algo a lo que la Junta se negó rotundamente.
Ante las cifras positivas adelantadas por la gerente de La Almoraima, cabe preguntarse por qué se sigue defendiendo su venta al mejor postor. Ugalde, que presentará los datos definitivos en los próximos meses y que ha llegado a afirmar que “un Gobierno no está para cuidar vacas”, asegura que la venta se hace “para poder disminuir el déficit público y paliar así una situación excesivamente complicada”.
“Los parques naturales generan depresión económica”
Ugalde, que ha amenazado con llevar a la Junta de Andalucía a los tribunales por incluir el 100% de La Almoraima en el Parque Natural e iniciar los trámites para declararla monte público frenando así sus planes para crear un resort de lujo con campo de golf y aeródromo incluido, asegura que “los parques generan depresión económica. No es su única causa, pero contribuye”.
Ecologistas ha reclamado este viernes el cese de la gerente. Ante dicha petición la gerente afirma, haciendo alusión a sus estudios de ingeniería agrónoma y sus vínculos con la industria del corcho, que “si hay algún currículum idóneo para gestionar esta finca, es el mío”.
La gerente “incurre en un conflicto de intereses”
La organización ecologistas ha insistido también en que la empresaria “incurre en un conflicto de intereses escandaloso, pues hay que recordar que es propietaria privada de un latifundio en ese mismo espacio; es además copropietaria de una empresa dedicada al negocio del corcho, cuando la finca pública que administra tiene en este sector su principal activo económico”.
Según Ugalde, se trata de “una empresa familiar, una comunidad de bienes. No genera ningún conflicto. Lo planteé cuando me nombraron y me dijeron que no. Al estar en el sector corchero, eso ha beneficiado a La Almoraima y no al revés”.
Las organizaciones, que han llegado a denominar “la Capilla Sixtina del bosque mediterráneo” a este alcornocal bien conservado, sin fragmentar y con una biodiversidad envidiable, se oponen a la venta del patrimonio natural del país a manos privadas. Según las organizaciones conservacionistas, sería como vender Las Meninas o El Guernica.
La semana pasada Salma Hayek y su multimillonario marido, François-Henri Pinault, visitaron la finca para valorar su posible compra, aunque finalmente manifestaron que no era lo que buscan. El Plan Especial de Ordenación de Usos de la Finca diseñado por Ugalde iba dirigido precisamente a un turismo de lujo. Sin embargo, con la inclusión de la Almoraima en el Parque Natural, la construcción de los campos de golf, el aeródromo o el hotel de lujo quedaban descartados. El desarrollo económico sostenible es el que se propone desde la Junta de Andalucía, las organizaciones ecologistas y el propio ayuntamiento de Castellar de la Frontera, en cuyo término está la finca.