El endeudamiento por la Covid permite a Andalucía destinar cifras “históricas” a sanidad y educación en los presupuestos

Ya están las cuentas andaluzas en el Parlamento. El consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, ha presentado en la mañana de este miércoles el anteproyecto de Ley de Presupuestos de Andalucía para 2021 tras demorarse “un poquito del plazo” que se había fijado a finales de octubre. En la comparecencia tras el Consejo de Gobierno, Bravo ha detallado unos presupuestos en los que “era necesario el blindaje social de la sanidad, de la educación y de las políticas sociales” para paliar las consecuencias socioeconómicas derivadas de la pandemia. Eran las prioridades avanzadas con semanas de anterioridad y así se reflejan en unas cuentas que destinan 22.470 millones de euros, un 55,9%, a estas materias.

El presupuesto de Andalucía para 2021 es de 40.188 millones de euros, un 3,7% más con respecto a 2020. Los esfuerzos del Gobierno andaluz están “enfocados en combatir el coronavirus” y buscan la recuperación socioeconómica a través de las ayudas a la generación de empleo, el apoyo a las empresas, transformación digital y la revolución verde.

Sube el gasto no financiero (6,5%), el gasto de personal (4,8%) y los gastos corrientes (5,6%) El crecimiento de las partidas es una constante de estos presupuestos donde se han alcanzado cifras “históricas” en sanidad, educación y políticas sociales. Esto se produce gracias a la relajación de las reglas fiscales promovidas por la Unión Europea. Siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Hacienda, las cuentas para 2021 permiten un endeudamiento del 2,2%, unos 3.300 millones de euros, del que el Gobierno central asume el 1,1%.

En este nuevo contexto fiscal, la dotación para sanidad es de 11.566 millones de euros, 716 millones más que en 2020. El objetivo está destinado al refuerzo del personal así como a la adquisición de material sanitario. Otra de las “prioridades” es la educación. Los fondos se incrementan en un 7% y llegan a la cifra de 8.322 millones de euros. Otra nueva marca. La partida destinada a la dependencia y la atención a los mayores alcanza los 1.609 millones de euros. Estos tres ejes suman 1.353 millones más, esto es, el 62,5% del incremento del gasto no financiero.

Las cuentas andaluzas también presentan una dotación de 3.991 millones de euros para la inversión pública en 2021, la mayor de los últimos ocho presupuestos, mientras que los fondos asignados a la creación de empleo llegan a los 1.173,6 millones de euros, un 7,4% más que el año anterior. El gasto de personal llega a los 13.134 millones de euros.

El anteproyecto recoge también un “Fondo Covid”, 450 millones de euros, que están sin asignar y a disposición del Ejecutivo andaluz para encarar las necesidades que “surjan” en relación a la crisis sanitaria durante el próximo año. Cabe destacar que el equipo de Bravo no ha incluido en los presupuestos los ingresos adicionales del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia ni la Ayuda a la Recuperación para la Cohesión y los Territorios de Europa (REACT-EU), a la espera de conocer los detalles de su distribución.

“Son las mejores cuentas que se pueden presentar en este momento”, ha expresado el titular de Hacienda. También ha remarcado que no va a “tirar la casa por la ventana” y que el endeudamiento del 2,2% no es una referencia sino una “obligación”. Bravo ha presumido que desde que asumió el control de San Telmo, el Gobierno de PP y Cs, ha defendido la estabilidad presupuestaria y que Andalucía ha cumplido con las tres reglas fiscales –objetivo de deuda, objetivo de déficit y regla de gasto–, al menos en 2019 que es el ejercicio cerrado. “Somos una comunidad cumplidora”, ha rematado el consejero.

Esperando a Vox

Juan Bravo, siempre ha agradecido “la voluntad” de las otras fuerzas políticas para “sentarse a hablar” sobre los cuentas andaluzas. Tras la presentación del anteproyecto de Ley de Presupuestos, el consejero de Hacienda y Financiación Europea ha apelado al “compromiso” del resto de partidos para sacar adelante unos presupuestos que ha calificado de “rigurosos” y que generan “certidumbre y estabilidad”.

Ciudadanos, en la coalición de Gobierno, ha defendido las cuentas andaluzas para 2021 a través de su portavoz parlamentario, Sergio Romero, que ha pedido el respaldo de la cámara andaluza. “No se entendería que la oposición no apoyara los presupuestos, no hay excusas por parte de la oposición para no aprobarlos”, ha dicho.

Adelante Andalucía, a través de su portavoz de Hacienda, Guzmán Ahumada, ha dicho que el presupuesto “se queda corto para afrontar los retos que tiene Andalucía y las necesidades de los andaluces”. Además, ha explica que las partidas destinadas a sanidad, educación y políticas sociales son consecuencia de la “coyuntura actual” y que se cimentan en los fondos provenientes del Estado y de la Unión Europea.

Por su parte, los socialistas andaluces han lamentado que después de jornadas de trabajo sobre los presupuestos, el consenso se busque sólo en el “socio preferente”, es decir, Vox. “El único consenso que ha buscado Moreno Bonilla es el de la ultraderecha”, ha dicho el portavoz parlamentario de PSEO-A, José Fiscal.

Pero, el anteproyecto de Ley de los Presupuestos de Andalucía llega al Parlamento sin el respaldo de Vox, después de que la formación suspendiera el diálogo presupuestario por las “tensiones” con el Ejecutivo andaluz. El motivo tiene raíz en la intervención del líder del PP, Pablo Casado, durante la moción de censura presentada contra el Gobierno de Pedro Sánchez, por el partido de Abascal.

Desde el Gobierno andaluz “siguen negociando con Vox” aunque el portavoz popular, José Antonio Nieto, ha insistido en que no se aceptarán “sellos ideológicos” en la cuentas de la comunidad.