La Junta de Andalucía ha anunciado que la estación de esquí de Sierra Nevada podrá abrir a partir del 18 de diciembre debido al acusado descenso en la incidencia de contagios por Covid-19 en Andalucía. La apertura supone que la estación granadina se convierta en la primera que inaugurará su temporada de las que se consideran las más grandes de España como Baqueira Bert o Formigal. Sin embargo, será la segunda zona esquiable que esté abierta después de que León abriese apenas 3,75 kilómetros de Leiteragos esta misma semana.
El anuncio del Gobierno andaluz enmarca la apertura en la segunda fase de la desescalada de esta segunda ola de la Covid-19 en la región. Porque la Junta de Andalucía ha establecido que desde el próximo sábado y hasta el 17 de diciembre se permitirá la movilidad solo dentro de las provincias. Sin embargo, desde el 18 de diciembre, fecha en la que abre Sierra Nevada, los andaluces podrán moverse con libertad dentro de toda la comunidad hasta el 6 de enero. Y desde el 23 de diciembre y hasta el mismo día 6, también podrán entrar y salir de Andalucía para reunirse con familiares. A partir de ese día, la Junta deberá tomar nuevas medidas que pueden ser más restrictivas, iguales o menos duras, dependiendo de cómo se desarrolle la pandemia del Covid-19 en la comunidad.
Es decir, Sierra Nevada estará abierta durante casi un mes solo para los andaluces, sin que se permita la entrada de visitantes llegados fuera de la región, salvo que tengan salvoconducto para reuniones familiares o por trabajo. Un hecho importante sobre todo porque desde Europa, países como Francia o Bélgica, cuyos ciudadanos suelen viajar a la estación de esquí granadina, controlarán que sus nacionales no salgan de sus fronteras para disfrutar de la nieve en otros países.
Se da la circunstancia de que Baqueira Beret iba a ser la primera de las grandes estaciones en abrir sus puertas, porque la apertura estaba prevista para este 11 de diciembre. Pero la inauguración de la temporada de la estación leridana en el Pirineo catalán ha quedado pospuesta sin fecha por los datos de contagio de Covid-19 que siguen sin dar confianza a las autoridades catalanas para abrir la mano en este sentido. Queda por ver si el anuncio de la apertura de Sierra Nevada por parte de la Junta de Andalucía anima a otras comunidades a hacer lo propio con sus estaciones de esquí.
Un debate europeo
La apertura de la estación granadina se engloba también en pleno debate europeo sobre la conveniencia de abrir este tipo de instalaciones. Los países de la Unión Europea cuestionan si se debe permitir que abran después de que en la pasada primavera una estación en el corazón del viejo continente fuese foco de infección de muchos ciudadanos europeos. Entonces, Ischgl, en Austria, provocó las protestas de algunos países de Europa que vieron irresponsable tal apertura.
Sin embargo, el país austríaco ha vuelto a abrir sus estaciones durante este mes de diciembre. Una decisión que la canciller alemana, Angela Merkel, no comparte, hasta el punto de que ha llegado a pedir a los estados de la Unión Europea que se apruebe una normativa a escala que prohíba la apertura de las estaciones de toda Europa. Ahora, la decisión de abrir Sierra Nevada en España abre un nuevo escenario para el debate al respecto del control de los contagios de Covid-19 en este tipo de instalaciones del viejo continente.