- Su relevancia se ha podido comprobar a comienzos de esta legislatura cuando el PSOE-A se valió de ella y su pacto con C's para evitar que se tramitaran algunas iniciativas legislativas
La Mesa del Parlamento de Andalucía es su órgano rector y por tanto toma todas las decisiones importantes en su funcionamiento. Tanto que, a comienzos de esta legislatura, permitió vivir un episodio sin precedentes en la institución cuando el PSOE-A se valió de su control, respaldado por sus socios de investidura de C's, para bloquear determinadas iniciativas legislativas y evitar que fueran debatidas en el pleno por el riesgo que esto suponía para el PSOE de Susana Díaz que gobierna en minoría.
Que en su composición tras las elecciones autonómicas del 22 de marzo de 2015 se garantizara a los socialistas su control (con tres miembros más la complicidad del único de C's) pesó la falta de experiencia de Podemos, que renunció a entrar en esta “pelea por sillones”, como insistían el PP-A e IU, conocedores de su importancia. En este análisis han coincidido diputados de los cinco grupos tras la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que anula esa composición tras el recurso del PP-A. Porque la Mesa de la Cámara son más que sillones -mejor pagados que el resto de diputados y que además incluyen asistente y chófer entre otras ventajas- como se puede comprobar en la relación de sus funciones.
Partamos de que la Mesa de la Cámara, que también integra la diputación permanente en manos de la que está ahora mismo el Parlamento de Andalucía por ser mes inhábil, la componen siete miembros. El presidente del Parlamento de Andalucía, que es quien la dirige y coordina, además de representar a la institución y decidir en dudas en la interpretación del reglamento; tres vicepresidentes, que le sustituyen, por su orden, en caso de ausencia, vacante o imposibilidad; y tres secretarios, que supervisan las actas, asisten para asegurar el orden en los debates y la corrección en las votaciones...
Hasta este lunes la componían tres miembros del PSOE-A, el presidente Juan Pablo Durán, la vicepresidenta primera Teresa Jiménez y la secretaria primera Verónica Pérez; uno del PP-A, la vicepresidenta segunda Esperanza Oña; uno de Podemos, el vicepresidente tercero Juan Moreno Yagüe; uno de C's, el secretario segundo Julio Díaz; y otro de IU, el secretario tercero José Antonio Castro. Tras la sentencia del TC, este último se ha quedado fuera, cediendo su puesto a Julio Díaz, quien a su vez deja la secretaría segunda a la popular Patricia del Pozo como nueva integrante, de manera que el PP-A ya tiene dos puestos y la coalición de izquierdas ninguno. Es la primera vez que un grupo no está en la Mesa de la Cámara.
Estos siete diputados son los que toman todas las decisiones relacionadas con el funcionamiento de la institución, comenzando por que elaboran su presupuesto, dirigen y controlan la ejecución del mismo. También en la Mesa de la Cámara se aprueba la relación de puestos de trabajo (RPT) del personal, las plantillas y la determinación de funciones correspondientes a cada uno de dichos puestos, así como las bases que regulan su acceso. Todos los gastos de la cámara deben ser autorizados por la misma.
También es la encargada de calificar, siguiendo reglamento, los escritos y documentos de índole parlamentaria, y determinar la admisibilidad o no los mismos; además de decidir su tramitación. O sea, califica las interpelaciones, preguntas, mociones, enmiendas, proposiciones no de ley y proposiciones de ley presentadas, comprueba que cumplen los requisitos establecidos en el reglamento y dispone su inclusión en el orden del día de la sesión plenaria que se celebre la semana siguiente o, en su caso, en la comisión parlamentaria correspondiente.
Retribuciones fijas y senadores por designación autonómica
En relación a los demás diputados, la Mesa de la Cámara fija cada año, oída la Junta de Portavoces, la cuantía de las retribuciones fijas y periódicas, así como de las ayudas e indemnizaciones de los diputados, y sus modalidades. Es también la que aprueba los modelos para las declaraciones sobre actividades y bienes e intereses que están obligados los diputados a presentar.
Es asimismo la encargada de programar las líneas generales de actuación de la institución y fijar su calendario para los plenos y comisiones en cada periodo de sesiones, de acuerdo con la Junta de Portavoces. Es más, también puede acordar la prórroga o reducción de los plazos establecidos en el reglamento.
Por otra parte, corresponde a los letrados la redacción de los escritos de demanda y en su caso de desestimiento en los recursos de inconstitucionalidad interpuestos o que vaya a interponer el Parlamento de Andalucía, pero previamente requieren del visto bueno de la Mesa de la Cámara.
Por poner un último ejemplo de sus funciones, hay que apuntar también que en el nombramiento de los senadores por designación autonómica, del Defensor del Pueblo Andaluz y otros, la Mesa de la Cámara, contando con el acuerdo de la Junta de Portavoces adoptado por mayoría al menos de tres quintos, dicta las disposiciones complementarias a las que pudiera haber lugar.