Visto para sentencia el juicio de los ERE, una “experiencia vital” según Chaves
El juicio de los ERE ha durado lo que duran las condenas: 'x' años y un día. Más concretamente, un año y una sesión. El pasado jueves se cumplían justamente 365 días desde que el 13 de diciembre de 2017 arrancara la vista oral, que ha celebrado 152 sesiones con el interrogatorio a los 21 acusados y la práctica de la prueba con más de un centenar de testigos, las periciales y los informes finales de cada una de las partes. A fin de cuentas lo más importante, la sentencia, se conocerá no antes del próximo verano, sin que los plazos se puedan concretar más. A partir de ahí llegarán, a buen seguro, los recursos, que alargarán el proceso varios años más.
“Esto no ha terminado”, ha dicho precisamente Griñán a la salida de la Audiencia de Sevilla. Minutos antes, exactamente a las 14.15 horas de este 17 de diciembre, el presidente del tribunal, Juan Antonio Calle Peña, pronunció las palabras: “visto para sentencia”. Tras la lectura del informe final del abogado de Antonio Lozano, exdirector de Presupuestos de la Junta, Calle Peña daba paso a la última fase del juicio con el derecho a la última palabra de los acusados “por si tienen algo que manifestar a lo ya declarado”, anunció.
Casi la totalidad de los 21 exaltos cargos andaluces acusados han optado por acercarse al micrófono, como les había indicado Calle, para señalar “nada que añadir, señoría”. Manuel Chaves, uno de los primeros en hablar, se ha expresado en idénticos términos “salvo” para mostrar su “reconimiento a la labor del tribunal” y decir que las intervenciones de los abogados y de los fiscales “han sido un cúmulo de conocimiento e información, una experiencia vital”. Griñán, el siguiente en levantarse para su ejercer su derecho a la última palabra, ha querido también mostrar su reconocimiento al trabajo del tribunal y de todas las partes.
Tras el “visto para sentencia”, el presidente del tribunal ha querido también lanzar “unas palabras de agradecimiento por la colaboración prestada” por todas las partes para el desarrollo de un juicio “de la complejidad” del celebrado. Los agradecimientos los ha extendido a los funcionarios y al “esfuerzo” de los letrados para “compaginar” la vista oral con otros compromisos judiciales, aludiendo a la “mutua colaboración entre el tribunal y las partes”. “Se da por concluida la sesión y el juicio”, ha señalado finalmente Calle.
La pieza del denominado 'procedimiento específico', la primera de las decenas de piezas que contiene la macrocausa de los ERE que ha llegadp a juicio, empieza a escribir su sentencia, al menos la de primera instancia. La Fiscalía Anticorrupción pide seis años de cárcel y otros 30 años de inhabilitación para José Antonio Griñán por delitos continuados de prevaricación y malversación, mientras que a Manuel Chaves le reclama diez años de inhabilitación por prevaricación.
Las preguntas de antes del juicio siguen teniendo vigencia y las versiones de cómo sucedió todo siguen difiriendo en bastantes puntos. ¿Hubo una trama organizada para quebrantar la normativa en la concesión de ayudas para evitar la fiscalidad? ¿Fueron suficientes los avisos del interventor general? ¿Había normativa a nivel estatal que daba cabida al tipo de ayudas que concedió la Junta de Andalucía? subvenciones en Expedientes de Regulación de Empleo? ¿Conocían tantos miembros del Gobierno autonómico el supuesto quebrantamiento de la legalidad? La justicia, ahora sí, empieza a dictar sentencia.