La consigna es clara: los chare (centros hospitalarios de alta resolución y especialidades) que no hayan empezado a construirse no se van a poner en marcha. De momento, se quedan sobre el papel los prometidos -en algunos casos hace una década- para los municipios de La Carolina, Mijas, Estepona, Órgiva y Palma del Río, muchos de ellos con el convenio firmado, el proyecto redactado y el suelo ya puesto a disposición por parte de las administraciones locales. Tampoco hay dinero para reactivar el de Aracena, que estaba un paso por delante porque las obras habían empezado, pero están paralizadas desde 2010.
La Consejería de Salud, Igualdad y Políticas Sociales asegura que va a concluir los más avanzados, y que en todo caso llevan años de retraso en las obras, de manera que han retomado -o se hará en breve- los trabajos del chare de la Janda (Vejer), Lepe y Guadalhorce (Cártama). Los tres quiere ponerlos en marcha en 2015, de manera escalonada. También para el próximo año ha prometido habilitar dos chare de la provincia de Sevilla a los que les falta el equipamiento: Lebrija y Écija. Un poco más tardará el de Cazorla, que tenía prevista su inauguración en 2012 pero en estos momentos está ejecutado en un 35%. La buena noticia es que éste no se ha descartado, según confirman desde la Junta de Andalucía.
Desde la consejería señalan que en el contexto de crisis y de contención del déficit público impuesto por el Gobierno de la Nación, “la Junta de Andalucía se ha visto obligada, por imperativo legal, a realizar ajustes en sus presupuestos, lo que a nivel de infraestructuras en el ámbito sanitario ha obligado a realizar una recalendarización de las actuaciones, primando aquellas obras ya iniciadas sobre las pendientes de inicio”. Insisten las mismas fuentes en que “los compromisos adquiridos siguen manteniéndose”. Pero sin fecha, claro.
Un modelo para tiempos mejores
En este sentido, la crisis ha supuesto un duro varapalo para un modelo concebido como un hospital de proximidad, pensado para poblaciones alejadas de grandes núcleos urbanos o con un potencial demográfico importante. Cuando se comenzó a implantar este modelo el compromiso era que ningún ciudadano estuviera a más de 30 minutos de un centro hospitalario. Están pensados para hospitalizaciones cortas -no más de tres días- y funcionan sobre todo por cirugía ambulatoria. En estos momentos hay nueve en funcionamiento en toda Andalucía.
En este contexto, desde la Junta de Andalucía subrayan también que el esfuerzo por los servicios públicos se mantiene, “sin cerrar o privatizar centros de salud u hospitales, como ha ocurrido en otras comunidades autónomas gobernadas por el PP”. Destaca la inversión en la materia desde 2008: 904 millones de euros en obras, reformas y equipamiento en centros de atención primaria y especializada. De este modo, desde 2008 se han puesto en funcionamiento 143 centros de atención primaria nuevos (13 en lo que va de 2014), así como cuatro hospitales: los chare de la Sierra Norte de Sevilla (Constantina); Valle del Guadiato, en Córdoba; Alcalá la Real, en Jaén; y Loja, en Granada.