La Junta Electoral de Andalucía ha denegado a Teresa Rodríguez, presidenta y candidata de Adelante Andalucía, los derechos políticos y económicos que reclamaba por considerarse heredera legítima de la coalición que encabezó en las elecciones andaluzas de 2018, y que llevaba el mismo nombre que la actual. Las subvenciones electorales que emanan de aquella primera confluencia entre Podemos, IU y otras dos formaciones andalucistas minoritarias le corresponden a IU, uno de los socios mayoritarios de la Adelante Andalucía original, que ahora encabeza una nueva coalición: Por Andalucía.
La Junta Electoral ha resuelto así el conflicto latente tras la ruptura volcánica de aquella primera confluencia. El resultado es que Teresa Rodríguez no tendrá acceso al más de medio millón de euros en concepto de anticipo de la subvención electoral de Adelante para financiar su campaña de cara a los comicios del 19 de junio. Ese dinero va a parar íntegramente a la coalición Por Andalucía, liderada por su candidata, Inmaculada Nieto, y de la que forman parte IU, Más País, Equo e Iniciativa del Pueblo Andaluz, más una vinculación política con Podemos y Alianza Verde. Fuentes próximas a Rodríguez anuncian que recurrirán la decisión ante la Junta Electoral Central.
La resolución de la Junta Electoral Andaluza tiene importancia más allá de la financiación de esta campaña, advierten ambas partes afectadas a este periódico, porque previsiblemente también afectará a la visibilidad de los candidatos en los espacios electorales de los medios públicos de comunicación y la cobertura que estos hagan, algo que preocupaba a Rodríguez más que las subvenciones. Es la primera vez que un árbitro externo media en el conflicto entre los socios fundadores de Adelante Andalucía, tras una ruptura que se resolvió con la expulsión de la ex líder de su grupo parlamentario bajo la acusación de tránsfuga.
Tanto IU como Podemos renunciaron a impugnar ante la Junta Electoral y ante los tribunales el uso de la marca Adelante Andalucía, que Rodríguez tiene registrado como coalición y como partido político en el registro del Ministerio de Interior. Eso ha permitido a la gaditana concurrir por segunda vez como candidata de Adelante a la Presidencia de la Junta a los próximos comicios, sin embargo, las resoluciones previas de la Junta Electoral le dejaban poco margen para recuperar todos los derechos inherentes a dicha coalición.
Alegaciones de Por Andalucía
Tanto Rodríguez como Por Andalucía habían solicitado el anticipo de las subvenciones electorales por el mismo concepto, esto es, su pertenencia a Adelante en las elecciones de hace tres años, cuando lograron 17 diputados y 661.371 votos. La Junta Electoral les dio un periodo de alegaciones para justificar su reclamación, y este lunes resolvió a favor de la coalición que encabeza Inma Nieto.
IU esgrimió el criterio establecido por la Junta Electoral Central (JEC) en 2021: “La Junta Electoral Central tiene declarado que tienen derecho a percibir adelanto de subvenciones electorales los partidos políticos que concurrieron a las anteriores elecciones equivalentes formando parte de una coalición electoral y a las nuevas elecciones convocadas lo hacen en solitario o formando parte de una coalición electoral distinta”. Y subrayó en su escrito que “similar criterio ha sido aplicado por la JEC para la determinación de los espacios gratuitos de propaganda electoral que corresponden a las entidades políticas que en las anteriores elecciones equivalentes concurrieron formando parte de una coalición electoral”.
La financiación pública que correspondía a Adelante hace tres años era de 2.194.854 euros, pero la confluencia sólo gastó 1.700.811,85 euros. Los partidos con representación parlamentaria sólo pueden acceder a un máximo del 30% de sus subvenciones electorales, en el caso de la antigua coalición de izquierdas, la cifra asciende a 510.243,55 euros.
Las alegaciones que presenta IU ante la Junta Electoral recogen el relato pormenorizado de la ruptura de Adelante Andalucía, la expulsión de Rodríguez y otros 10 diputados -que pasan a ser no adscritos- y apelan a la reforma exprés del reglamento del Parlamento, en la que se enmarca dicha expulsión. También se especifica que el grupo parlamentario Adelante cambió el nombre y pasó a llamarse Unidas Podemos, acusando a Rodríguez de “usurpación” de la marca.
Por todo ello, concluyen, “se infiere que todos los escaños obtenidos por la coalición Adelante Andalucía en las elecciones de 2018 tanto los originarios como las sustituciones producidas durante la legislatura fueron obtenidos por candidatos miembros en el momento de registro de las candidaturas por Podemos así como por IU, sin que ninguno de los otros dos partidos coaligados obtuvieran escaño alguno”. Es decir, que los derechos políticos y económicos de aquellos diputados corresponderían al partido al que pertenecían en 2018, no al que pasaron a pertenecer tras su expulsión.
Alegaciones de Adelante
Las alegaciones de Teresa Rodríguez van en sentido contrario: “La coalición Adelante Andalucía-Andalucistas deber ser beneficiaria en su parte proporcional al anticipo electoral, ya que está conformada con dos de los cuatro partidos que participaban de la anterior coalición de las elecciones andaluzas de 2018”. El escrito de IU recuerda que los dos partidos andalucistas minoritarios no tuvieron acceso a la subvención hace tres años, por lo tanto no son depositarios de ese derecho ahora. Rodríguez, en cambio, alega que uno de esos partidos que sigue integrado en Adelante -Primavera Andaluza- “sí tiene representación, en concreto, una senadora de designación autonómica”, y añade que “de los 17 escaños, con independencia de los cambios producidos durante la legislatura, 11 de ellos nunca abandonaron la coalición anterior de Adelante Andalucía”.
El argumento principal de Rodríguez es que aquella coalición era un sujeto político propio, “no una suma de siglas”, y por tanto sus miembros representaban a ese sujeto, y no a los partidos originarios de los que provenían. La anterior Adelante Andalucía no era una mera suma de siglas y de reparto de miembros de las listas electorales, ya que la coalición se estructuró con una organización diferenciada de los partidos integrantes, dirigida orgánicamente por el grupo motor (...) Tan era así, que incluso se solicitó en la propia Junta Electoral Andaluza que no figuraran partido ni condición de independiente en las papeletas electorales. Con lo que los candidatos los eran de la Coalición y no de los partidos que la impulsaban“.
Por último, y apelando al mismo criterio establecido por la Junta Electoral Central que usa IU en sus alegaciones, Rodríguez solicita “al menos el 50% del anticipo que le correspondería” a la antigua Adelante Andalucía, “considerando que el 50% de los partidos políticos firmantes de aquella coalición [los dos minoritarios andalucistas] permanece” en la nueva Adelante.
La ausencia de Podemos
IU también se adelanta en su argumentación y avisa a la Junta Electoral de que en la nueva coalición con la que concurre a los comicios del 19 de junio -Por Andalucía- “NO” está Podemos, porque llegó tarde al registro, aunque sus candidatos sí figuran como independientes en sus listas. El Reparto de los ingresos en materia de subvenciones electorales de la antigua Adelante Andalucía estaba sujeto a un acuerdo adoptado para la aportación de fondos a los gastos de campaña electoral, en la proporción siguiente: Podemos 62,57%; IU 37’25%; Primavera Andaluza 0%; Izquierda Andalucista 0%.
Ante el riesgo de que la Junta Electoral limitase la subvención de Por Andalucía al porcentaje correspondiente a IU, la formación de Toni Valero argumenta que “la Junta Electoral Central tiene establecido el criterio de que si alguno de los partidos que en su momento integraron una coalición y que tuvieran un porcentaje de derechos políticos y económicos no concurre a los siguientes comicios, ni en coalición ni por separado, sus votos y escaños de distribuirán entre las restantes entidades políticas en su momento coaligadas que fueran a su vez beneficiarias de derechos políticos y económicos”.
IU solicita la totalidad del adelanto de los fondos para financiar la campaña de Por Andalucía. “Como única formación política acreedora del derecho al anticipo para gastos electorales contemplado en el artículo 127 bis de la LOREG, corresponde a esta coalición que represento los derechos electorales de la coalición electoral Adelante Andalucía de 2018”, concluye el escrito. La Junta Electoral Andaluza ha dado por bueno este criterio y concede todo el adelanto solicitado a Por Andalucía.