El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) cuenta con 24 institutos o centros de investigación -propios o mixtos con otras instituciones- tres centros nacionales adscritos al organismo (IEO, INIA e IGME) y un centro de divulgación, el Museo Casa de la Ciencia de Sevilla. En este espacio divulgativo, las opiniones de los/as autores/as son de exclusiva responsabilidad suya.
Cómo comunicamos ciencia
Como bien sabéis los lectores de este blog, si no contamos los nuevos descubrimientos de la ciencia, el conocimiento generado no sirve para nada. Los científicos tenemos canales para comunicar los nuevos avances a otros investigadores, por ejemplo mediante artículos científicos, pero nos es más difícil llegar a un público más amplio. El problema es que contar conceptos complejos de forma amena y eficaz no es sencillo, y nadie nos ha enseñado a hacerlo. Por eso, científicos y diseñadores gráficos están uniendo fuerzas para fortalecer el poder de la comunicación de la investigación a través de piezas visuales atractivas, informativas e incluso sorprendentes.
Esto es exactamente lo que hemos hecho un grupo de científicos y diseñadores gráficos durante los últimos meses. El resultado final son una colección de infográficos que comunican sus hallazgos tal vez tan bien como los canales comunes de comunicaciones que los científicos usan o incluso mejor. El reto es animar a más científicos a acoger el diseño gráfico como un activo serio en los esfuerzos de comunicación de la ciencia, así como un proceso útil para el avance de la ciencia en sí. Pero para ello, también necesitamos que las agencias que financian proyectos apoyen este tipo de iniciativas.
Las representaciones visuales de los hallazgos científicos no son una novedad. De hecho, las personas las han venido haciendo por cientos de años, pero las nuevas tecnologías, nuevas audiencias y nuevas formas de comunicar están logrando que los gráficos de alta calidad y sofisticados sean cada vez más importantes, y las colaboraciones con profesionales cualificados son la manera más productiva de crearlos.
Para probar la eficacia de las colaboraciones entre científicos y artistas gráficos, la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia (AAAS) ha emparejado para actuar como equipo a seis laboratorios de investigación que trabajan en retos alimentarios y agrícolas relevantes para la sociedad con diseñadores gráficos y creadores de contenido para medios. Además de la investigación sobre los orígenes de los alimentos, abordaron temas complejos relacionados con los polinizadores y las amenazas que se ciernen sobre la biodiversidad, el fitomejoramiento moderno, el desarrollo agrícola y el cambio en el uso de la tierra, y nuevas tecnologías en la agricultura. Puedes encontrar todos los trabajos aquí (link), pero quiero destacar el que realizamos junto a Yael Kisel sobre la importancia de entender el contexto ecológico para conservar a los polinizadores.
Ver la ciencia a través de los ojos de un artista gráfico desafía el razonamiento sobre cómo reducir mecanismos complejos a una forma más accesible. La comunicación de la ciencia en general está ampliando y derrumbando barreras entre los científicos y el público, y las infografías se han convertido en un fenómeno generalizado. Las alianzas entre ciencia y arte están surgiendo por todos lados como hongos después de la lluvia. Estamos aprovechando algo que está tomando mucha fuerza, y estoy ansioso de ver cómo este campo continúa desarrollándose.
Leer el nuevo artículo en Nature Communications Biology
Como bien sabéis los lectores de este blog, si no contamos los nuevos descubrimientos de la ciencia, el conocimiento generado no sirve para nada. Los científicos tenemos canales para comunicar los nuevos avances a otros investigadores, por ejemplo mediante artículos científicos, pero nos es más difícil llegar a un público más amplio. El problema es que contar conceptos complejos de forma amena y eficaz no es sencillo, y nadie nos ha enseñado a hacerlo. Por eso, científicos y diseñadores gráficos están uniendo fuerzas para fortalecer el poder de la comunicación de la investigación a través de piezas visuales atractivas, informativas e incluso sorprendentes.
Esto es exactamente lo que hemos hecho un grupo de científicos y diseñadores gráficos durante los últimos meses. El resultado final son una colección de infográficos que comunican sus hallazgos tal vez tan bien como los canales comunes de comunicaciones que los científicos usan o incluso mejor. El reto es animar a más científicos a acoger el diseño gráfico como un activo serio en los esfuerzos de comunicación de la ciencia, así como un proceso útil para el avance de la ciencia en sí. Pero para ello, también necesitamos que las agencias que financian proyectos apoyen este tipo de iniciativas.