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Sol Díaz, ilustradora: “Las mujeres estamos cansadas ya de aparentar, queremos ser”

Sol Díaz

José Antonio Barrionuevo

¿Qué se entiende por ser una mujer elegante? Una mujer distinguida, dotada de gracia, culta, discreta y con estilo. Pero existen otros tipos de elegancia, y no solo aquellos establecidos por los convencionalismos sociales. Para la ilustradora Sol Díaz, “una mujer elegante es dueña y soberana de su cuerpo”; “una mujer elegante cubre sus temores con pelo”; “una mujer elegante dialoga con su parte oscura para iluminarse”.

En estas viñetas repletas de humor, sarcasmo e ironía, la autora chilena Sol Díaz despliega muchas respuestas a esta pregunta, reflejando diversos tipos de mujer elegante: salvaje, libre, insegura o de paso firma. “Ese otro tipo de elegancia es ese misterio que llevamos todos dentro, donde nunca somos tan libres, ni tan conservadores, elaboramos discursos hacia afuera, pero guardamos pequeñas encrucijadas por dentro. Busco entrar en ese lugar de sentimientos prohibidos, vergüenzas, historias que no contamos, secretos, recuerdos, deseos, que se mezclan con peinados de peluquería, uñas perfectamente pintadas, cuerpos castos e impolutos”, nos cuenta Sol. “Me gusta jugar con las contradicciones que veo en mí y en todas las mujeres. Me interesa encontrar a esa mujer real y libre que vive en ese interior oscuro de cada intento de perfección que tanto construimos para caer bien, agradar y aparentar”.

Cuando le preguntamos a Sol por qué tipo de mujer elegante se considera ella, entre risas nos dice que “La peor. Creo que soy una mujer elegante muy contradictoria: a veces me creo muy libre y valiente y al rato me visitan unas voces con ideas de señora, con miedos y vergüenzas... Pero no me complico, juego con esa contradicción, me causa curiosidad, me gusta saber que hay varias partes de mí, muchas que aún ni conozco”.

Estas mujeres elegantes de Sol Díaz empezaron a aparecer en uno de sus cuadernos, en “una croquera muy elegante, pequeña y con papeles fabrianos texturados, ¡muy elegante! (risas), que me regaló una amiga. La miré y me dije ”tengo que hacer puros dibujos elegantes en ella“. Y así empecé a jugar con un lápiz muy delgado y comenzaron a aparecer estas mujeres de peinados elevados, cuellos largos, tacones y secretos. Este libro son todos dibujos sacados directamente de esa croquera, sin edición. Quise siempre mantener ese primer impulso de las primeras rayas, sin pretensiones”.

Avenauta: ilustración arriesgada

Detrás de la edición española de '¿Cómo ser una mujer elegante?' está Avenauta, una nueva editorial nacida en Sevilla, de la mano de Bárbara y Guillermo, que ya tienen una trayectoria con el álbum ilustrado infantil con Tres Tigres Tristes. “Desde que empezamos en este mundillo de la ilustración y sus creadores, hemos visto pasar ante nuestro ojos proyectos de libros ilustrados orientados a un lector experimentado, con cierto bagaje visual, y no queríamos dejar escapar la oportunidad de publicarlos. El objetivo sigue siendo el de crear libros visualmente bellos, pero esta vez apostamos por temáticas y estilos gráficos más arriesgados, orientadas a un público adulto”.

Si la primera vida de estas mujeres elegantes fue en el cuaderno de Sol, la segunda fue en un blog. “Me gusta hacer blogs porque de alguna forma puedo ver mi trabajo más de lejos, veo las viñetas o los dibujos cómo se van desarrollando y eso me da una mejor idea de lo que busco en ellos. Por eso siempre que creo un personaje o una historia, generalmente la subo a un blog. Así también la comparto con la gente y la pueden ver más personas, entre ellos editores a los cuales les podría interesar”. Y del blog, al libro. “La idea del libro nuevo editado ahora en España por Avenauta no salió en una reunión física, sino en un email, donde me decían que habían visto mi trabajo y me invitaban a ser parte de este proyecto”.

Cansadas de aparentar

A través de las noticias Sol, desde Chile, está al tanto de los casos de violencia machista que siguen produciéndose en España, y también de las movilizaciones de mujeres desde el pasado 8 de marzo.

¿Cómo crees que ayuda a esa reivindicación tu trabajo? “Sí, he visto las noticias y me parece terrible por su puesto. Aquí en Chile vivimos situaciones muy parecidas y ya creo que en el mundo entero. Uf, hay que hacer tanto y nos falta mucho como sociedad.... Estamos en un proceso, muy poderoso, que ya se inició pero se viene un camino largo por delante. Yo creo que mi trabajo habla desde un lugar bien íntimo, desde un sentir, desde las emociones, preguntas y mundos internos que habito como mujer y desde ahí, inevitablemente, se reflejan las miradas de muchas mujeres, chilenas, argentinas, peruanas, españolas, mexicanas y me imagino que ¡muchas más! Vivimos todas los mismos miedos, inseguridades, buscamos las mismas libertades, las mismas verdades, estamos cansadas ya de aparentar, queremos ser. Creo que al hablar desde ese interior conectamos con una voz inconsciente y colectiva y desde ahí podemos abrir pequeñas ventanas donde más voces resuenen y eso ayude a reflexionar y tomar más conciencia, a darnos valor para plantarnos firmes en este camino que se nos viene”.

El humor es una de las herramientas de Sol para luchar contra los convencionalismos. “A mí me parece una herramienta fundamental. El humor tiene esa gran cualidad de mostrarnos una realidad muchas veces dolorosa de tal manera que nos llegamos a reír de lo incómodo que nos pone. El humor nos incomoda, produce quiebros; eso es siempre importante para generar cambios, para cuestionarse a uno mismo, para reflexionar acerca de lo que somos y lo que sentimos. Siempre pasa como algo muy ligero, tonto y simple pero es muy poderoso”.

A Sol le gusta mucho el lápiz, las líneas. “También las manchas del grafito y mucho la acuarela. Generalmente trabajo formatos pequeños. Mis ilustraciones creo que siempre buscan la simpleza, me gusta que se hable con poco, sin ruidos, sin pretensiones. Me gustan mucho los bocetos, el movimiento, el error. Creo que para hablar de forma honesta hay que dibujar sin querer lucirse, sin planificaciones. Siempre me ha interesado decir algo con el dibujo, no tanto el dibujo por la técnica, y en eso me gusta jugar con diferentes estilos y materiales a los diferentes libros e historias que hago, me gusta cambiar. A veces una historia requiere de detalles, a veces simplemente de líneas”.

Las mujeres elegantes de Sol Díaz surgen de una idea, que ella anota, “en el celular (en las notas) o en croqueras o papeles, lo que tenga más a mano. A veces estoy dibujando otras cosas y se me ocurre algo y lo anoto al ladito. Después la retomo y la dibujo. Luego la escaneo y la paso al blog. Otras veces se me ocurre la imagen y luego la vuelvo a mirar, a veces días después, y le escribo algo. Intento siempre que el texto no sea evidentemente conectado con la imagen, trato de no decirlo todo, que quede un espacio abierto, una pregunta”.

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