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Cadiwoman: 11 años de letras de carnaval para hacer “pedagogía del feminismo” a través del humor

Las Cadiwoman, este año, se convertirán en 'Las Juanis Joplin' en la cita del Carnaval de Cádiz. Esta chirigota callejera se ha convertido en un referente a la hora de hacer pedagogía sobre el feminismo a través del humor y no va a ser menos este año. Detrás de esta agrupación hay un trabajo coral donde todas sus componentes aportan, pero la figura de Susana Ginesta es importante como autora de las letras de la chirigota. Las reivindicaciones feministas que llevan a las calles cada año, ahora, han quedado reunidas en el libro Cadiwoman, el superpoder del feminismo chirigotero, de la editorial Macnulti, firmado por la propia Ginesta.

Ginesta es, entre otras cosas, chirigotera, licenciada en Derecho y experta en políticas de igualdad, género e identidades. Se ha puesto a bucear en las letras de sus agrupaciones y ha salido un libro desde el que se puede analizar una sociedad: “Es un ensayo, una retrospectiva de las letras que he sacado en los últimos once años. Las letras son la excusa para hablar de política, feminismo, y de la necesidad de comprender la desigualdad y de transmitir herramientas para transformar la sociedad con el humor como clave. La chirigota puede ser un mecanismo transgresor y transformador porque el humor reblandece creencias”.

La autora gaditana tiene claro que “el Carnaval es la excusa para hablar y reivindicar con las letras las desigualdades que existen y el machismo latente que hay en todas las esferas de la sociedad”.

Para los que no estén identificados con Cadiwoman, hay que ubicar la agrupación dentro del carnaval callejero de Cádiz. Esa experiencia como grupo ha derivado en un libro retrospectivo: “Es un personaje que se mimetiza en un tipo cada año y contextualiza un momento histórico y político y eso permite hablar de la realidad de hoy en día y de otros momentos y de otras cuestiones y compararlo con la actualidad. Cadiwoman es una superheroína de Cádiz que cada año se mimetiza en un personaje para contar cosas y nos metemos en una cabina telefónica ficticia para transformarnos en ese mundo distópico y hablar de lo que nos pasa a las mujeres y de esas realidades”.

El feminismo está presente en un repertorio muy variado. No sólo se habla de lo que atañe a las mujeres, pero sí desde una perspectiva concreta. “Cada uno escribe de lo que le apetece y nosotras hablamos de muchas cosas, pero siempre tenemos en cuenta la perspectiva de género, un enfoque feminista para no perpetuar roles. El humor se puede hacer desde muchas perspectivas, pero si queremos avanzar no podemos caer en los chistes machistas de siempre. Hablamos de muchos temas, pero sin caer en los tópicos”, subraya Ginesta.

El Carnaval de 2020 está siendo noticia por el debate de los límites del humor a través de la chirogota Aquí estamos de paso, pero también existe una crítica que no puede faltar: “El Carnaval mantiene esa esencia crítica no sólo desde lo local. Aquí se habla de sistemas políticos, de Trump o de Bolsonaro porque es un medio donde se puede criticar lo más transcendente e incluso espiritual. Dependiendo de tus conocimientos o de tu visión para abrir más o menos tu espectro. Cuando se dice que en el Carnaval está todo inventado yo no estoy de acuerdo, porque debe ir en paralelo a una sociedad que siempre va cambiando”.

Carnaval de calle, más libre

Algunos aficionados sólo relacionan el Carnaval con el concurso del Teatro Falla, pero Cadiwoman es una agrupación de la calle y Susana Ginesta matiza las diferencias, con el denominador común del machismo: “Está el Carnaval del COAC y el de la calle. Los concursos tienen que avanzar, todavía hay muchos resquicios de Carnaval añejo y se le puede dar una vuelta. El de la calle es más anárquico y hay menos presión porque no hay un jurado, ni unos medios de comunicación y es más libre. Es más cómodo expresarse porque no te encorsetas tanto. El machismo se infiltra por todas partes y el Carnaval no está exento de ese prisma patriarcal porque forma parte de la vida y de nuestra forma de vivir y hay que mejorarlo poco a poco”.