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Cronología de la intensa búsqueda de Julen: casi dos semanas en vilo por el niño de dos años que cayó en un pozo

Todo comenzó el domingo 13 de enero. El pozo de Totalán al que cayó Julen, de dos años y medio, ha sido el centro de las miradas desde aquella fatídica jornada. Cientos de personas han trabajado durante 13 días en la búsqueda del niño, cuyo cuerpo sin vida ha sido hallado esta pasada madrugada, después de que los mineros excavaran ya el túnel definitivo en la fase final del rescate. Así se han ido sucediendo los días en un pueblo que hasta el final se ha resistido a la frustración:

Domingo 13 enero. Un niño de la barriada malagueña de El Palo cayó a un pozo de unos 100 metros de profundidad y apenas 25 centímetros de diámetro mientras jugaba cerca del Cerro de la Corona, al que su familia había acudido para pasar el domingo. En torno a las dos del mediodía sus padres y los servicios de emergencia dieron el aviso, y se movilizó un dispositivo de rescate que trabajó durante todo el día y toda la noche hasta esta pasada madrugada.

La familia había acudido allí a pasar la tarde del domingo. Los padres informaron a los servicios de rescate que escucharon el llanto del niño poco después de caer al pozo. La subdelegada no confirmó que el pozo estuviese sin señalizar. Desde el primer momento, los equipos de emergencias trataron de localizar al niño introduciendo una cámara en el pozo. Toparon con un fondo, una especie de tapón a 71 metros de profundidad, sin encontrar al niño.

Lunes 14 de enero. Mientras la sociedad iba tomando consciencia del angustioso rescate y los equipos de emergencia barajaban tres alternativas para rescatar a Julen, se halló una bolsa de chucherías en el pozo que aumentó las esperanzas. No se descartaba entonces ninguna opción técnica, tras casi 24 horas tratando de sacar al pequeño de dos años, teniendo en cuenta que el estrecho pozo estaba sin recubrir, lo que dificultaba los trabajos. “Sólo barajamos la búsqueda, localización y rescate del niño”, decían los portavoces de la Guardia Civil.

Martes 15 de enero. El operativo, dos noches después, seguía trabajando. Un centenar de efectivos de bomberos, policías, sanitarios, expertos en rescate, ingenieros, etc. continuó trabajando sin descanso en la zona. Las opciones para el rescate seguían abiertas: seguir extrayendo la tierra pero con un sistema más especializado, para lo que se utilizarían más vehículos; hacer un segundo pozo paralelo, para lo que antes había que entubar el primero para protegerlo; y probar a hacer una excavación a cielo abierto desde el lateral de la montaña. Finalmente se optó por trabajar en abrir otro orificio lateral y en horizontal con el fin de acceder a donde estaría el pequeño. Paralelamente, un equipo de rescate minero de Asturias se desplazó hasta Totalán.

Pese a los esfuerzos, los padres hacían su primera aparición en las televisiones. El padre, José Roselló, mostraba su descontento con las tareas de rescate. “Muchos tuits de apoyo, muchos votos, pero medios ninguno”. “No pongáis que está viniendo ni el alcalde ni nadie, poned que no están haciendo una p... mierda. Que lleva 30 horas un niño metido en un pozo, que estamos muriéndonos”. Los plazos empezaron a fallar, a tenor de que ya entonces se anunció que en 48 horas estarían hechos dos túneles para acceder al pozo.

Miércoles 16 de enero. Las noticias seguían dando esperanzas: restos biológicos hallados en el pozo se correspondían con Julen. Los trabajos continuaban. La Guardia Civil destacaba que “ha habido más de 60 ofrecimientos de empresas mundiales y ahora hay 12 equipos entre empresas de extracción y técnicos teóricos que van a trabajar en la elaboración y ejecución de los dos túneles”.

El padre de Julen, esta vez acompañado del padre de la niña Mari Luz, Juan José Cortés, aseguraba ante la prensa que lo que le da fuerza es “saber que voy a ver a mi hijo con vida”, pidiendo “que no paremos hasta sacar a mi hijo de donde está”, “que esto no decaiga hasta que podamos sacarlo con vida de ahí”. El padre matizó sus declaraciones del día anterior: “Si me he quejado es porque no han tenido medios en un primer momento; estoy viendo un poco de luz y están avanzando”. Mientras medios internacionales se hacían eco de la noticia de Totalán, una marcha en el pueblo quiso solidarizarse con la familia: 'Todos somos Julen'.

Jueves 17 de enero. El operativo contempló hacer un segundo túnel vertical paralelo al pozo. La subdelegada, María Gámez, que durante los primeros días trasladó la información a la prensa, dijo que el objetivo era tener dos puntos de acceso ante las distintas situaciones que se podrían dar a la hora de perforar. Las premisas eran “llegar cuanto antes” pero también “con seguridad para el menor y también para los trabajadores en la zona”. “No hemos parado en ningún momento y no vamos a parar hasta rescatar al menor de allí”, ha repetido estos días.

Viernes 18 de enero. Aunque la intención era que los expertos comenzaran esa jornada la perforación de un túnel vertical paralelo al agujero al que cayó el pequeño, las labores de movimiento de tierra previas se alargaron hasta la noche. En condiciones normales este tipo de perforaciones “pueden llevar unas 15 horas aproximadamente, a no ser que nos volvamos a encontrar este material y nos ralentice”, dijo el ingeniero coordinador del operativo de rescate de Julen, Ángel García Villar.

Sábado 19 de enero. El también representante del Colegio de Ingenieros de Caminos, explicó en una rueda de prensa que había comenzado la perforación vertical para llegar hasta Julen, esperando alcanzar el lugar donde se supone que está al pequeño en unas 35 horas “si es todo muy favorable”. El ingeniero precisó que ya se había llegado ya a la cota de menos 23 metros después de que consiguieran atravesar un macizo rocoso que había dificultado las tareas durante la noche, cuando habían previsto el viernes que podrían iniciar la perforación.

Una vez finalizada la perforación vertical, habrá que excavar una galería horizontal que llegue hasta el tapón ubicado a unos 70 metros dentro del pozo, lugar donde creen que se encuentra Julen, operación que “también en unas condiciones favorables” puede durar unas 20 horas, explicó.

Domingo 20 de enero. “Seguimos trabajando sin parar y muy pronto esperamos alcanzar el objetivo deseado”. El mensaje era el mismo pero la perforación avanzaba. Ya se habían perforado 45 metros de la galería vertical paralela a la del pequeño, estando previsto llegar a los 60 metros durante la noche. Una vez se concluya esa operación, según se explicó, habría que encamisar el pozo, en lo que se tardarían unas cinco o seis horas.

Asimismo, y a petición de la Brigada de Salvamento Minero de Hunosa, llegada desde Asturias, la galería vertical por la que ellos descenderán se rellenará con algo de tierra, en lo que se prevé emplear no más de dos o tres horas, para asegurar así su descenso. Desde ese momento, la duración de los trabajos vendría determinada por los materiales que estos especialistas encontraran en el camino.

Lunes 21 de enero. Los servicios de rescate terminaron definitivamente el pozo vertical paralelo al de Julen, de 60 metros, dando pie a que arrancaran las tareas previas a los trabajos que tienen que realizar los mineros para llegar al niño. Se tendrá, como habían anunciado los expetos, que encamisar el túnel y rellenar con algo de tierra antes de que los mineros puedan empezar a picar el túnel horizontal.

Martes 22 de enero. Las tareas previas a la ejecución de la excavación horizontal que desarrollarán los mineros para rescatar a Julen continuaron durante la noche. Sin embargo, se encontraron nuevas dificultades técnicas en dicho proceso.

Surgen problemas para encajar el tubo de encamisado por el que descenderán los especialistas de la Brigada de Salvamento Minero de Hunosa, antes de comenzar a cavar unos cuatro metros en horizontal, a 72 de profundidad, para llegar hasta el pozo donde se encuentra el pequeño. En esto se estiman unas 24 horas por lo que se llegaría ya a este miércoles.

Los tubos no encajan en el túnel vertical a partir de la cota -40, y esto ha obligado a retirarlos, y a empezar a rellenar de nuevo el orificio para perforar con un diámetro mayor.

En paralelo, hay unas diligencias de investigación abiertas en el juzgado de instrucción número 9 de Málaga, como ha adelantado El Mundo y puede confirmar eldiario.es Andalucía. Estas diligencias se abrieron a raíz de la desaparición del niño. En los días posteriores a la desaparición de Julen, la Guardia Civil tomó declaración al menos al pocero, al propietario de la finca, familiar del niño, y a los padres de Julen. Es lo habitual ante una desaparición, destacan fuentes conocedoras de la investigación.

En varias declaraciones a los medios de comunicación, el pocero Antonio Sánchez aseguró que había dejado el pozo sellado con una piedra y arena cuando terminó de perforar. Fuentes cercanas a la investigación explican que la Guardia Civil remite todas las actuaciones al juzgado. Entre ellas, un informe del Seprona en el que se da cuenta de la situación del pozo y la titularidad de la parcela, que también se remitió a los órganos de la Junta de Andalucía encargados de velar por la legalidad de este tipo de obras.

Miércoles 23 de enero. La perforadora que trabaja en el pozo vertical paralelo al de Julen termina de reperfilar la galería ejecutada, comenzándose de nuevo el entubado de la misma. Después, se han acometido trabajos de limpieza del interior de este túnel, iniciándose de nuevo el encamisado de los 60 metros.

Por la tarde, los técnicos trabajan en resolver las nuevas complicaciones detectadas en la operación de encamisado o entubado. Así, tras detectarse un saliente en los últimos metros del túnel vertical y con el objetivo de acelerar el proceso, los técnicos trabajan directamente sobre el entubado rebajando el diámetro en el tramo final del cilindro, que tiene que apoyarse sobre el fondo de esa citada galería, según han precisado desde la Subdelegación del Gobierno.

Jueves 24 de enero. Los especialistas que forman el equipo para rescatar a Julen mantienen “optimismo y mucho ánimo” para hallar al pequeño. Así lo aseguró el portavoz de la Guardia Civil Jorge Martín después de que, por fin, bajaran por el túnel vertical paralelo al que está Julen los dos primeros miembros del grupo de rescate pertenecientes a la Brigada de Salvamento Minero que ha venido de Asturias.

Un descenso que, ha dicho, “les va a llevar a comenzar la excavación de la galería” vertical y paralela al pozo en el que cayó Julen con el objetivo de acceder hasta el lugar en el que se encuentra el pequeño.

Viernes 25 de enero. Los efectivos de la Brigada de Salvamento Minero avanzaron lentamente durante toda la jonada para completar la galería horizontal. Las condiciones del terreno obligaron a realizar hasta cuatro microvoladuras. Los mineros habían comenzado en la tarde anterior la excavación de unos cuatro metros para conectar el túnel vertical perforado previamente con el pozo en el que se encontraba el pequeño.

Los equipos de rescate localizaron el cuerpo sin vida del pequeño Julen al filo de la una y media de la madrugada, según confirmó poco después la Subdelegación del Gobierno en Málaga. Fue el fatal desenlace de un operativo de búsqueda que ha durado 13 días y en el que han colaborado más de 300 personas.