Los ciudadanos están hartos de estar hartos y gracias a esa atmósfera están proliferando movimientos ciudadanos que pueden traducirse en alternativas de cara a las próximas elecciones, sean generales o municipales. En Jerez se ha vivido recientemente un nuevo ejemplo. Ganemos Jerez ha visto la luz en un acto que ha llegado a reunir a unas 500 personas y que supone el punto de partida de una carrera de fondo para ser algo más que un simple discurso reivindicativo.
Ganemos Jerez funciona en paralelo a otras plataformas ciudadanas similares del país, pero es un proyecto concebido libre y que sólo piensa en los jerezanos. Ni siquiera hay una estructura de partido a nivel provincial. Únicamente es un grupo de ciudadanos que pretende tener fuerza confluyendo a la izquierda para desbancar al bipartidismo, que en Jerez es tripartidismo por la importancia historia de Pedro Pacheco.
“No es un partido como tal en el sentido de que incluso participa gente que está en otros partidos. No decimos que lo vamos a hacer mejor que Podemos o que IU. La idea no es que haya una papeleta más a la hora de votar, sino que haya menos”, explica Manuel Román, uno de los integrantes de la formación.
En su hoja de ruta remarcan uno de los objetivos innegociables: “Tenemos el deber de ofrecer, de darnos, un futuro claro, un proyecto de ciudad y de sociedad distinto, basado en una economía que no fomente la especulación y la corrupción, sino la economía social y local, que no sirva para enriquecer más a bancos y grandes corporaciones, sino para crear más empleo con derechos y que se marque el sencillo objetivo de mejorar la vida de sus convecinas”.
Y para ello se busca integrar a Podemos y a IU, algo que ya se ha logrado en Madrid con el segundo partido. “La idea es crear una candidatura elegida por primarias abiertas. Lo interesante es que la lista sea creada por todos los jerezanos. Pero no somos salvadores y si el llamamiento no tiene aceptación, no saldremos porque no hay vocación política. Buscamos ganar las elecciones, sea a través de Podemos o IU. Creemos que ellos no van a ganar en solitario si no hay un movimiento ciudadano grande. No queremos ser un tercero en discordia, sino el aglutinador de esa fuerza que hay en la calle”, remarca Román.
En el acto de presentación ante los jerezanos se vio que aquello no era un mítim a la antigua usanza. Hubo un vídeo con objetivos e ideas, pero sobre una lluvia de preguntas de los presentes, que querían saber cómo respira esta formación para saber de qué pie puede cojear en un momento de gran desconfianza hacia todo lo que huela a política.
Y aunque pueda sonar a contraproducente, desde Ganemos Jerez no se venden remedios milagrosos para ganarse la simpatía de los posibles votantes: “Nosotros no damos una imagen de que vamos a solucionar los problemas. No pretendemos ahora hacer promesas, sólo prometemos que habrá una transparencia, una auditoría de la deuda del Ayuntamiento. Que la gente sabe de dónde viene, si se gasta más en asfaltar que otras ciudades, por ejemplo. Pero no hay una varita mágica. Podemos hacer más cosas si crecemos y nos sentamos con transparencia y se toman decisiones en consenso. La economía en el Ayuntamiento es como una caja negra, muy difícil de descifrar y ocultando números y con eso hay que acabar”.
No existe una estrategia que entronque deliberadamente con lo que se puede estar cociendo en ciudades cercanas como Sevilla. Aquí las bases para seguir adelante se sentarán en unas jornadas que tendrán lugar a primeros de octubre, donde ya se pulsará más en serio el calado que puede tener este proyecto entre los jerezanos. “En cierta medida Jerez sí es clásica, como sucede con toda Andalucía, pero sí hay un desapego a las opciones políticas de hasta ahora. Hay una mayoría de gente que quiere otra cosa y que quiere echar a la gente que lleva mandando desde hace años. Es un clima transversal y aquí especialmente porque los gobiernos han defraudado y por eso hay esas ganas de cambio. Viendo el momento histórico sí existen características para que los ciudadanos busquen otras fórmulas. Realmente el reto es después de las elecciones. Ganar las elecciones puede ser fácil si se compara con lo de después”.
Queda por decidir cómo se diseña la candidatura, cómo se eligente a los candidatos y calibrar cómo puede participar el ciudadano. Todo Jerez está invitado a formar parte de un grupo formado inicialmente por unos 200 integrantes que proceden de movimientos vecinales, gente de Podemos, de IU, que han trabajado contra la drogodependencia o en los sindicatos. Teóricamente, una formación con experiencia que sabe de qué se queja el pueblo.
“No queremos dejar la ciudad, ni su entorno rural, en manos de un grupo de concejales, sino transformarla entre todos y todas, antes, durante y después de las elecciones. No buscamos líderes, ni personas que actuen como salvadoras, porque no existen. Queremos personas que ejerzan un liderazgo compartido y plural de un proyecto en que nos sintamos representados todos, reconocibles por la ciudadanía, que verbalicen las propuestas y en las que podamos delegar también multitud de decisiones diarias que deberán tomar y no podrán ser consultadas”, explican a quien les quiere oír. Una alternativa más para una ciudad que tiene la opción de cambiar el paso tras años hablando de deuda, de Eres y de paro.