El salón de actos del IES Las Aguas, situado en el Polígono San Pablo de Sevilla, está lleno de pancartas reivindicativas, colchonetas, sacos de dormir y bolsas con comida. Un centenar de docentes, tanto de primaria como de secundaria, ocuparon este instituto el pasado viernes (el mismo día que se aprobó la reforma de la Ley Orgánica para la Calidad Educativa, Lomce) para visibilizar la situación de los 4.502 interinos que este año no han podido obtener plaza.
El año pasado, el Gobierno central aumentó a dos el número de hora lectivas de los profesores con plaza (Decreto Ley 14/2012), lo que acarreó la salida de los centros de los interinos que cubrían las bajas y sustituciones durante el trascurso del curso académico. Esta plataforma de docentes pide la eliminación “total e inmediata” del Plan de Calidad frente a la suspensión progresiva que propone la Junta para “devolver a las aulas” a los interinos a los que afectó está medida.
Este lunes, como durante los otros cuatro días de ocupación, se ha realizado una concentración de apoyo frente al instituto de distintos movimientos sociales y vecinos. Según Marisa de Santa María, una interina granadina que participa en el encierro, “nos apoya mucha gente tanto del 15M como de las distintas mareas, vecinos del barrio que incluso nos han llegado a traer comida”. “Tenemos ducha, agua caliente...así que aquí nos quedamos hasta que nos echen”, explica con convicción.
No es la primera vez que esta plataforma de docentes lleva su protesta más allá de las manifestaciones y las huelgas educativas. En el mes de diciembre se encerraron en la Corrala Utopía, también en Sevilla, y realizaron una marcha desde Antequera hasta la capital, haciendo visible su problema en un buen número de pueblos andaluces. Según Iván Menudo, portavoz de la plataforma, “como las soluciones no llegan hemos optado en hacer algo un poquito más impactante que ha sido ocupar un centro público. Esto es un símbolo. Hemos ocupado el sitio del que nos han echado”. “Invitamos a los padres y madres, a los alumnos, a los profesores y a todo el que quiera apoyar la defensa de una educación pública y de calidad”, añade.
“Queremos trabajar, pero en un sistema educativo que funcione y para eso, esas plazas deben volver a aparecer. Son necesarias para cubrir guardias, sustituciones, preparación de las clases... Sobre todo porque este año hay 30.000 alumnos más y esto supone una pérdida irreparable de calidad en la atención y la evaluación a los estudiantes”, sostiene Menudo.
“Vamos a ir haciendo turnos para que en todo momento haya un buen número de personas en el centro. En ningún momento nuestra intención es paralizar la actividad docente del mismo”, asegura Menudo. Los portavoces de la plataforma han denunciado también el progresivo abandono de muchos de los centros educativos de la comunidad por parte de las instituciones. De ahí, que hayan elegido este instituto en el que ya sólo imparten clase cuatro profesores a un total de 60 alumnos de segundo ciclo de secundaria y bachillerato. Para Iván Menudo, “esto es un dinero público que se invirtió y se está dejando morir poco a poco”. “Hay humedades, los techos se están cayendo, el patio está dejado de la mano de dios”, cuenta.
Las Aguas, “reflejo del desmantelamiento de la educación pública”
Las Aguas, “reflejo del desmantelamiento de la educación pública”Luisa González es profesora de Lengua y Literatura y ha venido desde Málaga para protestar por los recortes y defender su puesto de trabajo.“Coincide que este centro simbólicamente es un reflejo del desmantelamiento de la educación pública”, apunta.
“Oposité con muy buena nota, me quedé muy bien colocada en el Tribunal y he trabajado un curso y medio”, afirma. “Estuve en unos seis centros, en Cádiz, Málaga y Sevilla, y ahora parece que sobramos”, añade. “Nuestra reivindación es que las dos horas no sean de docencia directa. Eso es lo que le pedimos a la Junta de Andalucía”.
Por su parte, la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía ha asegurado que hará “todo lo posible” para buscar recursos y permitir que el máximo posible de los interinos despedidos pueda volver a incorporarse al sistema educativo, señalando que más de 2.000 han sido reintegrados en el mismo.