El Parlamento de Andalucía ha aprobado en este jueves en pleno la primera ley de un grupo de la oposición aprobada en la presente legislatura, a propuesta de Podemos. Esto lo hace doblemente llamativo en una comunidad autónoma donde las relaciones de este partido con el PSOE, que gobierna, están marcadas por posturas irreconciliables entre sus dos líderes, Teresa Rodríguez y Susana Díaz.
La Ley de Senderos, debatida el miércoles por la tarde, ha contado este jueves con los votos a favor del PSOE, Podemos, C's e IU y la abstención del PP, lo que ya se auguraba hace unas semanas cuando superó con igual respaldo el dictamen en comisión parlamentaria, como adelantó eldiario.es/andalucia.
La ley, que desde su toma en consideración el pasado año, ha experimentado modificaciones sobre la propuesta que presentó el diputado David Moscoso, establece el marco regulador para los más de 10.000 kilómetros de senderos de Andalucía, garantizando su uso para deporte, ocio y esparcimiento, respetando también sus funciones en la economía y el respeto del entorno.
El Gobierno de Andalucía deberá garantizar en el desarrollo de esta ley la recuperación del patrimonio viario tradicional y la conservación de las antiguas vías de comunicación, además de otros elementos medioambientales y culturales directamente vinculados a ellas. En paralelo, se propiciará la creación de una red de senderos de uso deportivo de Andalucía y su integración en las nacionales e internacionales.
Básicamente, la ley distingue entre los usos principales de los senderos los de tipo medioambiental, deportivo y turístico. La regulación de los mismos se llevar a cabo reglamentariamente. “Esta norma puede generar un importante impacto económico y empleo en la comunidad autónoma y fomentar el desarrollo de los pueblos”, ha defendido el diputado de Podemos.
María Luisa Bustinduy (PSOE), cuya formación votó en contra de que esta ley fuera tramitada, pero no lo pudo evitar porque la oposición sí lo apoyó en bloque, ha justificado el cambio de opinión porque “un trabajo de diálogo y consenso, ha mejorado el texto con la introducción de todas las enmiendas presentadas por los socialistas para que la ley no haga entrar en colisión distintos intereses legítimos”. En esta línea, ha agradecido la “generosidad” del proponente.
Desde el PP, Rosario Alarcón, ha expresado los recelos de su grupo que, pese a que no se oponía a la tramitación de la ley, ha insistido en que hay que tener una mayor garantía de “respeto y reconocimiento de los usos tradicionales agrarios y forestales”. Por eso, en el debate presentó una enmienda in voce -a cuya aceptación condicionó el voto de su grupo- para que los senderos sólo discurran por bienes de dominio público y garantizar con ello la protección de la propiedad privada, que cree que se pone en riesgo. Sin embargo, no se tramitó esta enmienda in voce por falta de unanimidad, dado que se opuso el PSOE.
Para C's, por cuestiones parecidas a las manifestadas por los populares, ha resultado muy complicado que se llegara a este consenso, lo que ha celebrado su diputado José Antonio Funes. “Hay muchas más razones para el acuerdo que para el desacuerdo y lo importante es que, con esta ley, los senderos se van a regular”, ha considerado, con lo que le ha garantizado el voto a favor.
Finalmente, Carmen Pérez (IU), para quien “Andalucía va a la cola en esta materia”, ha encontrado en esta negociación de los grupos “una oportunidad histórica para la regulación de los senderos”, que cree que no debe perder una comunidad autónoma con un patrimonio tan rico en vías de comunicación de este tipo.