PRESUPUESTOS

Teresa Rodríguez se alía con tres grupos nacionalistas para llevar enmiendas sobre Andalucía a los Presupuestos Generales

Daniel Cela

26 de octubre de 2022 14:36 h

0

La coalición andalucista Adelante Andalucía, que preside Teresa Rodríguez, carece de representación en el Congreso y en el Senado, pero se las ha ingeniado para presentar enmiendas a los próximos Presupuestos Generales del Estado a través de tres grupos nacionalistas -Compromís, BNG y la CUP-, que registrarán las propuestas como propias de forma “solidaria”. En total son 41 enmiendas que movilizarán más de 800 millones de euros de inversión para Andalucía.

De los tres grupos que han aceptado compartir el trámite del registro de enmiendas con Teresa Rodríguez, sólo Compromís ha sido uno de los socios de legislatura del Gobierno de Pedro Sánchez. Los nueve diputados de la coalición valenciana integrada por Iniciativa (ecosocialista), Bloc (nacionalista) y VerdsEquo (ecologista) ya votaron a favor de los Presupuestos Generales de 2021 y de 2022, junto a otras diez formaciones minoritarias que lograron arañar en la negociación la inclusión de cientos de enmiendas parciales a las más de 60 secciones y departamentos de las cuentas del Estado.

Las 41 enmiendas de Adelante Andalucía entrarán en el Congreso divididas en tres subgrupos: un paquete de propuestas llegará de la mano de Compromís, otro de los diputados de BNG y un tercero por parte de la CUP. Fuentes próximas a Rodríguez aseguran que esta división es de carácter meramente “técnico”, para sortear el complejo procedimiento de registro de enmiendas, y que en ningún caso la separación de propuestas tiene que ver con un choque de los intereses andaluces con los de sus compañeros catalanes, gallegos y valencianos, que van a cursar sus reivindicaciones en el Congreso.

102 andaluces en el Congreso y el Senado

Los nacionalistas gallegos de BNG han formado parte de esa mayoría parlamentaria que sustenta a Sánchez, pero han votado en contra de la mayoría de leyes significativas del Gobierno PSOE-Unidas Podemos, incluido los Presupuestos. Más alejada aún ha sido la posición del grupo independentista catalán CUP. El perfil de estas formaciones oscila entre el regionalismo, el nacionalismo y el independentismo, en todos los casos se reivindica un reparto de fondos del Estado más generoso con la periferia de España y más cotas de autogobierno para sus territorios.

Rodríguez también ha entregado sus 41 enmiendas a los 61 diputados andaluces que hay en el Congreso -de PSOE, PP, Vox y Unidas Podemos- para posibilitar que cualquiera de estas grandes formaciones haga suya algunas de sus propuestas. Pero esta vía es menos probable. La dirigente andalucista está convencida de que “un partido de ámbito estatal no puede defender los intereses de Andalucía”, por eso su estrategia pasa por apoyarse en formaciones pseudo nacionalistas para introducir sus reivindicaciones para Andalucía en los Presupuestos Generales.

Es difícil que la mayoría fructifique, sobre todo aquellas que reclaman una mayor inversión para solventar la ausencia endémica de industrialización en Andalucía, pero el objetivo de Teresa Rodríguez va más allá del debate presupuestario. La gaditana prepara el desembarco de su coalición como marca propia en las próximas elecciones generales, algo que ya intentó hace tres años, cuando formaba parte de Podemos y estaba coaligada con IU, pero sus socios frenaron ese salto a Madrid al defender que su candidatura era la de Unidas Podemos.

Con la expulsión del grupo parlamentario Adelante Andalucía, bajo la acusación de tránsfuga, Rodríguez rehizo la coalición sin los dos partidos fundadores -Podemos e IU- y compitió con ellos en las últimas elecciones andaluzas del 19 de junio. La gaditana, sin apenas dinero ni cobertura mediática en las cadenas públicas, logró dos diputados en el Parlamento autonómico, a costa de fragmentar el voto de izquierdas que aspiraba aglutinar la nueva coalición Por Andalucía, comandada por sus antiguos socios. La campaña de Rodríguez en el 19J fue eminentemente andalucista. Junto a ella, este miércoles en el Congreso estaba la ex senadora de Adelante Andalucía, Pilar González, designada en representación de la comunidad autónoma por la anterior coalición, pero que no ha repetido en las listas tras la ruptura abrupta con Podemos e IU.

Desde el año 2000 no hay ningún partido nacionalista andaluz en el Congreso, donde el PA llegó a tener una voz significativa. Hay 61 diputados andaluces en la Cámara baja y 41 representantes en el Senado, pero Rodríguez defiende que quienes militan bajo siglas de partidos de ámbito estatal terminan primando los intereses de su formación frente a los intereses de Andalucía. De hecho, la gaditana le niega al presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, la categoría de “andalucista” que el dirigente del PP se viene atribuyendo desde mucho antes de la campaña electoral. “No existe el andalucismo de derechas. Andalucía no es la Lombardía italiana ni la Baviera alemana”, ha asegurado.

Las enmiendas de Adelante Andalucía incluyen propuestas para desarrollar los trenes de cercanías y media distancia en la comunidad, un paquete de lucha contra la inflación, incluida la reducción del IVA de los productos frescos, y varios planes de empleo específicos.

Por un periodismo comprometido con la Memoria Histórica

Ayúdanos a seguir haciendo periodismo comprometido con la verdad, la justicia y la reparación, donde es especialmente crucial depender de los lectores.

Por eso ahora, los socios y socias de elDiario.es también pueden añadir a su cuota una cantidad extra destinada íntegramente a nuestra redacción de Andalucía. Si quieres apoyar nuestra labor, hazte socio/socia y haz una aportación extra para nuestra cabecera.