Mary Romero (Huesca, 1990), es la concejala de Tecnología y Atención a la Ciudadanía del Ayuntamiento de Huesca por Aragón Sí Puede. Este jueves, en su ciudad, comienza una nueva edición del Congreso de Periodismo Digital de Huesca. Cita obligada en el mundillo periodístico, que cumple su mayoría de edad.
El Congreso de Periodismo Digital de Huesca alcanza su mayoría de edad, ¿qué significa para la ciudad?
Con 18 se alcanza la madurez, y no todos los congresos llegan. Todo el mundo conoce este congreso, para Huesca es un referente. Y también a nivel internacional. Cada año vienen personas de una tremenda talla en el mundo del periodismo, con representación de medios con distintos cortes ideológicos. Es un hito importante para la ciudad, que se convierte en un centro de debate político y sobre el modelo de negocio del periodismo.
De la programación de este año, ¿qué es lo que destaca?
Que se vaya a emitir en directo Carne Cruda me parece muy interesante. Pero tampoco quiero destacar solo una cosa. Creo que será un congreso muy político, en el que también se discutirá acerca del tratamiento de la violencia machista en los medios, que es un asunto realmente importante.
¿Cree que se trata bien?
Está el código deontológico y hay un rigor, pero desde el punto de vista del feminismo se puede mejorar para dar un impulso al apoyo a las víctimas.
¿Por qué periodistas importantes nacionales e internacionales vienen cada año a Huesca? ¿Qué tiene este Congreso que tanto atrae?
Es una cita fija, con renombre, las universidades, los periodistas, están pendientes; se ha convertido en un centro neurálgico de debate. Hay ponencias, debates y puntos de encuentro importantes tanto para las nuevas generaciones como para los propios periodistas de referencia.
¿Y cómo convencería a los que no vienen?
Se pierden una oportunidad espectacular. Es importante venir, debatir y hablar sobre la comunicación y el modelo de negocio.
¿En qué cree que se podría mejorar el congreso?
Se podría pensar en añadir algún día más o incluso abrir espacios de debate con la ciudadanía: quizás alguna ponencia con colectivos sociales de fuera del mundo periodístico.
¿Cómo ve el estado de salud del periodismo?
La relación política-periodismo es una relación complicada, debe hacer su función de contrapoder, de darle a la ciudadanía una información, ya sea buena o mala. Los políticos tenemos que entender que, al estar en primera línea, nos lo reconocerán si hacemos algo positivo, pero también apareceremos si es negativo. Es importante que los medios de comunicación busquen un modelo de negocio que les permita ser independientes, y eso es algo complicado muchas veces.