La Policía Nacional ha detenido en Zaragoza, tras varias inspecciones, a cinco responsables por delitos contra los derechos de los trabajadores por explotación laboral de extranjeros y a diez trabajadores por delitos de falsedad documental, al no tener los permisos de residencia o trabajo en regla o disponer de un documento de solicitantes de asilo falsos. Estas detenciones se producen tras una serie de inspecciones de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras junto con funcionarios designados por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Zaragoza con el fin de perseguir posibles fraudes a la Seguridad Social y luchar contra el empleo irregular, ha informado la Policía Nacional.
En primer lugar, la Unidad de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (UCRIF) de Zaragoza había recibido información donde se alertaba de la posible presencia de personas extranjeras trabajando en situación irregular o con documentación falsificada o suplantación de identidad en un matadero a las afueras de la capital.
Los agentes, junto con la Inspección de Trabajo, establecieron un dispositivo que desembocó en la identificación de 55 personas, entre las que se encontraban el responsable y la encargada de este grupo empresarial, que culminó con la detención de cuatro de los trabajadores como presuntos autores de un delito de falsificación de documento público por presentar en el matadero documentos de solicitantes de asilo falsificados. Los detenidos manifestaron que habían pagado por conseguir estos documentos para acceder al puesto de trabajo y que engañaron a los responsables de su contratación.
Inspecciones en restaurantes y en una empresa textil
De forma paralela, este mismo grupo estaba investigando posibles delitos de falsedad documental en tres restaurantes zaragozanos. En el primero, los agentes identificaron a 19 trabajadores extranjeros y detectaron indicios de falsedad en al menos dos casos --uno estaba falsificado y el otro era auténtico pero no pertenecía a la persona que se identificaba por el mismo--, que quedaron detenidos.
En el segundo restaurante, se identificaron a 12 empleados, entre ellos el titular verdadero de los papeles que portaba el detenido en el establecimiento anterior, por lo que lo detuvieron como cooperador necesario en un delito de falsedad documental y favorecimiento a la inmigración irregular. Los agentes detuvieron también a otras tres personas, encargados de estos locales, como presuntos autores de un delito contra los derechos de los trabajadores.
La investigación continuó con una tercera actuación, que se saldó con la identificación de 10 trabajadores y la detención de tres de ellos por hacerse pasar por otras personas, ya que carecían de permiso de residencia y trabajo en España. La última detenida fue la propietaria del restaurante por delitos contra los derechos de los trabajadores, falsedad documental y de imponerse sanciones en el orden laboral por diversas infracciones administrativas.
Por último, la Policía Nacional detuvo la semana pasada a la propietaria de un taller textil de Zaragoza como presunta responsable de un delito contra los derechos de los trabajadores por explotación laboral.