El aeropuerto de Huesca sigue agonizando tras el cierre de la escuela de pilotos

Miguel Barluenga

Huesca —
17 de noviembre de 2020 22:52 h

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Costó cerca de 60 millones de euros y vuelve a estar vacío. El aeropuerto Huesca-Pirineos no remonta el vuelo. Tras el cierre de la escuela de pilotos Airways Aviation, un nuevo fiasco que además se encuentra judicializado, se abre de nuevo un panorama incierto y solo aliviado muy en parte por la actividad generada tras el nuevo ascenso de la Sociedad Deportiva Huesca a Primera División. La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha declarado nulo el despido colectivo de los 18 trabajadores de la escuela, que deberán ser ahora indemnizados por esta compañía australiana.

El origen de este nuevo contratiempo dentro de una larga lista se encuentra en la cancelación por impagos del contrato con el Gobierno libio para formar a pilotos libios en la capital oscense, lo que sumado a la inactividad acrecentada por la pandemia desde el mes de marzo ha terminado por enterrar la esperanza de dar un uso continuado a la infraestructura. La falta de ingresos en Airways Aviation se esgrimió como principal argumento por parte de la empresa para justificar el cierre, y las conversaciones con la administraciones públicas para la búsqueda de una solución no fructificaron.

Gestionado por AENA, Airways Aviation firmó a través de su filial, Atlantic Fligth Training Limited (AFT) un contrato de cinco años de duración con la sociedad dependiente del Gobierno de Aragón Promoción de Actividades Aeroportuarias, SLU (PAA) por el que se comprometía a invertir al menos 700.000 euros en el acondicionamiento de las nuevas instalaciones y a generar, en cinco años, un total de 45 empleos. La realidad ha sido bien diferente.

Las instalaciones, que se pusieron al día y adecentaron para el uso de la academia, están ahora abandonadas y la compañía se ha marchado dejando deudas con los hoteles donde alojó a sus alumnos. Desmantelado el centro de formación, Airways Aviation trasladó los 8 aviones y el simulador de vuelo que se empleaba en Huesca hasta su nueva base en Montpellier (Francia), que ha tomado ahora el relevo como academia y acoge alumnos de Oriente Próximo y Reino Unido como en su día el Huesca-Pirineos.

El Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha declarado nulo el despido colectivo, que afecta a 18 trabajadores, porque argumenta que durante el periodo de consultas no hubo negociación de buena fe. El fallo ratifica la demanda realizada por el sindicato UGT-Aragón y argumenta que la empresa decidió de forma unilateral el despido antes de iniciar el reglamentario periodo de consultas. Para el Tribunal, “ni siquiera los nefastos efectos de la pandemia” en nuestro país podrían justificar por sí solos el despedido colectivo porque «se ha probado la continuidad de otras bases con la misma actividad en otros países (Francia, Australia) igualmente afectados por esta“.

Los trabajadores no pueden volver puesto que la Escuela de Pilotos está cerrada y la empresa, en concurso voluntario de acreedores. Airways Aviation ha sido condenada a indemnizar a los empleados con 33 días de salario por año de servicio y a abonar los salarios de tramitación desde a fecha de efecto del despido, el pasado 3 de agosto.

Aeropuerto de interés general

En octubre de 2000, el aeródromo de Huesca pasó a calificarse “aeropuerto de interés general”. Era el primer paso para convertirse en otro ejemplo de los excesos cometidos en la red de aeropuertos de España. Se inauguró en 2007 y supuso una inversión de 40 millones de euros. Las previsiones apuntaban a 160.000 pasajeros al año. Pronto se demostraron exorbitantes. En su primer ejercicio sumó 1.386 pasajeros, y el año de mayor afluencia hasta entonces (2009) alcanzó los 6.200.

En 2011, tras el cese de operaciones de Pyrenair, el aeropuerto dejó de tener actividad comercial. La llegada de Airways Aviation, escuela de pilotos con base en el Reino Unido, ha sido otro de los alicientes para la infraestructura. 4.684 personas pasaron por sus pistas en 2016, en su primer año de funcionamiento, y forma a personal de varios países árabes y el Reino Unido. Según datos de Airways Aviation, el impacto en la economía local supera los 2 millones y medio de euros y ha generado unos 20 puestos de trabajo.

Desde el 7 de mayo, el aeropuerto opera a demanda, dentro de su horario habitual, bajo petición previa de las compañías aéreas con tres horas de antelación. El dato acumulado del año 2020 es el menor de entre todos los aeropuertos españoles, con 1.361 entre enero y octubre. El farolillo rojo de la clasificación está no obstante muy cerca del penúltimo, Albacete con 1.536, y de Madrid-Cuatro Vientos con 1.676.

En el mes de octubre se contabilizaron 164 pasajeros, un aumento del 8.100% respecto al mismo mes en 2019, y solo por delante en la estadística de aeropuertos nacionales de Albacete con 95. Salamanca registró 226 y Madrid-Cuatro Vientos, 227. En septiembre fueron 344, con empujones como el desplazamiento del Atlético de Madrid los días 29 y 30 o del Real Valladolid días después para medirse a la Sociedad Deportiva Huesca en la Liga de fútbol de Primera División