El Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (TACPA) ha aceptado a trámite las alegaciones que formuló el grupo de Podemos en el Ayuntamiento de Zaragoza contra el pliego de La Romareda, por lo que el proyecto del nuevo campo se paraliza hasta que el actual Gobierno de la ciudad no encuentre una alternativa con “tranquilidad, serenidad y confianza”.
Así lo ha confirmado esta tarde el consejero de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, Víctor Serrano, quien ha convocado una rueda de prensa de urgencia porque el TACPA “viene a dar la razón y a estimar las alegaciones contra La Romareda”, aunque ha asegurado que se ha dado “por cuestiones más formales que de fondo”.
Tal y como ha señalado Serrano, “el TACPA es un órgano administrativo y no jurisdiccional, por lo que cabe interponer un recurso contencioso administrativo al Tribunal Superior de Justicia de Aragón”.
“Con absoluto pesar para nosotros, la izquierda ha puesto una zancadilla a la ciudad y la estrategia que trazó el cuatripartito de Javier Lambán en el Gobierno aragonés por intentar tumbar el mejor proyecto de campo de fútbol ha tenido éxito con esta resolución”, ha subrayado sobre este resultado, un “daño probablemente irreparable”.
En este sentido, el consejero, quien ha dicho que “es un día triste para todos”, ha indicado que “es una pena esta resolución porque era el mejor proyecto que ha tenido la ciudad, con una inversión privada y que hacía que los zaragozanos no tuvieran que pagar ni un solo euro de sus bolsillos” para tener un nuevo campo.
Del mismo modo, Víctor Serrano ha apuntado que, aunque “la alegría de los políticos de izquierda contrasta con ese jarro de agua fría que nos hemos llevado”, las urnas en mayo “les pusieron en su sitio”.
“El señor Lambán está a punto de abandonar el Pignatelli y el señor Rivarés, que es quien firmó este recurso, ya ni siquiera es concejal del Ayuntamiento de Zaragoza”, ha valorado.
No obstante, Serrano ha reconocido que “está en riesgo el cumplimiento de plazos” y “es una pena que los 335 millones que iba a generar el Mundial de fútbol 2030 en Zaragoza están en entredicho por la actitud hostil de la izquierda”.
A pesar de este recurso, el consejero ha remarcado que el equipo de gobierno y la actual alcaldesa “van a defender la nueva Romareda”, por lo que “se levantarán y liderarán el sueño de los zaragozanos y zaragocistas”. “Hoy más que nunca caben palabras como trabajo y esfuerzo”, ha sostenido.
Por lo tanto, Víctor Serrano ha trasladado un mensaje de “tranquilidad” porque “el mismo empuje, ganas e ilusión manejados en los últimos años, continuarán con el nuevo equipo para impulsar el nuevo campo de fútbol”.