Por alusiones, o por falta de ellas

Al señor Alberto Cubero, concejal de Servicios Públicos:

Leímos con estupor en un artículo aparecido en Heraldo de Aragón el 23 de mayo de 2017, que, después de 52 avisos y 11 animales de compañía muertos en nuestra ciudad a manos de uno o varios criminales sueltos, el señor Cubero, concejal de Servicios Públicos, está pensando tomar medidas tales como elaborar un mapa que alerte de las zonas en las que se han encontrado trampas con veneno y objetos punzantes para las mascotas o aumentar el número de perros de rastreo para detectar venenos.

Únicamente mencionar que ese mapa lleva en funcionamiento hace más de un año y se actualiza diariamente. No solo eso. PACMA elaboró un informe completo en el que se detallan todos los casos, incluyendo fecha y lugar exacto del incidente, así como la propuesta de doce medidas a implementar con el objetivo de prevenir y paliar esta situación. Ambos documentos, mapa e informe, obran en su poder desde hace algo más de siete meses. A juzgar por su respuesta, se diría que dicha documentación se encuentra en el fondo de algún cajón que no abre usted frecuentemente.

También comentarle que, como podrá ver, cuando tenga a bien leerlas, ninguna de las medidas propuestas se refiere a utilizar a un perro antiveneno, por diferentes motivos. Primero y el más importante, los animales no son herramientas que deban hacer el trabajo que a ustedes les corresponde. Pero también por muchos otros motivos. Entre sus planes no entra darles una jubilación decente a esos animales (que pregunten a Albatros si está contento en su actual hogar). Porque no son detectores de metales, por lo que difícilmente localizarán la infinidad de trampas como carne con clavos o cuchillas que encontramos diariamente. Porque usted estará muy contento con el trabajo de Albatros o de Alba, pero nos gustaría saber la cantidad de muestras que han encontrado en las zonas verdes de Zaragoza (corríjame si son más de….0). Porque se trata de dar con los indeseables que ponen en peligro a los miembros de nuestras familias, no de ir buscando las trampas que colocan, como si de una yincana se tratara. Y por un sinfín de motivos más que no enumeraré para no desbordar este escrito.

Nos alegra que, tras esa lacra de sufrimiento, se le hiciera la pregunta que más de 13.000 personas llevan un año esperando: ¿qué van a hacer al respecto?  Lástima que nos haya decepcionado tanto la respuesta, sobre todo cuando tratan de echar balones fuera diciendo que es la Policía Local quien debe actuar. Es curioso, cuando nos reunimos con la Policía Local, ellos nos dijeron lo mismo sobre ustedes. No nos extraña que los vecinos de algunos de los barrios afectados hayan empezado ya a organizarse para actuar. Quizá los sueldos del Ayuntamiento y el de la Policía deberían pagárselos a estos vecinos.

A la redacción de Heraldo de Aragón informarle que en mayo de 2016 comenzó su andadura la página de Facebook Alerta Zaragoza con la intención de recoger los puntos en los que se encontraban sustancias y objetos nocivos para animales de compañía y niños. Algunos tildaron la iniciativa de alarmista. Hemos dicho en repetidas ocasiones que alertar no es alarmar y que el riesgo está en la calle, no solamente para animales sino para niños, repartidores, jardineros y usuarios de los parques en general.

Nos sentimos capacitados para responder a algunos puntos del artículo por alusiones, o por falta de ellas.

En primer lugar, esos 52 avisos han sido recogidos por la página mencionada arriba, Alerta Zaragoza, creada por PACMA en mayo de 2016, no por “asociaciones animalistas”, como ustedes aseguran. No sabemos exactamente si el error está en pensar que PACMA es una asociación y no un partido político, como avalan los más de 280.000 votos al Congreso y más de un millón al Senado obtenidos en las últimas elecciones generales, o porque desconocen la autoría de la herramienta. De ser así, les invitamos a contactar con la fuente la próxima vez, para garantizar el rigor de la información que publican.

Como bien saben por anteriores ocasiones en las que les hemos atendido encantados, la información de contacto de nuestros portavoces está disponible en su base de datos. A la espera de recibir su llamada para contrastar la noticia, les adelantamos algún que otro apunte.

Como he explicado anteriormente, Alerta Zaragoza fue creada en mayo de 2016 y se actualiza con cada aviso de que tenemos constancia. Actualmente somos más de 3.500 usuarios en la página, ciudadanos francamente preocupados por el riesgo que supone salir simplemente a pasear por Zaragoza. Cada nuevo aviso es comunicado simultáneamente a la Oficina de Protección Animal mediante un mail en el que se detalla la información pertinente. Desde que empezó a funcionar la herramienta, PACMA se ha reunido con Policía Local, con la Oficina de Protección Animal, con el área de Servicios Públicos (de la que es responsable el señor Cubero) y con SEPRONA. PACMA también ha realizado una concentración en la puerta del Ayuntamiento como protesta por la ausencia de medidas por parte de las Administraciones competentes, ha elaborado tres informes y ha presentado unas doce propuestas para solucionar este gravísimo problema. Además, por supuesto, de la masiva difusión en medios de comunicación de la problemática y la información y sensibilización de la población respecto a la misma.

Quedamos, como siempre, a su disposición. Desde PACMA seguiremos trabajando por todos los animales, porque, reitero, sabemos que alertar no es alarmar y cada vida cuenta desde el primer aviso, desde el primer minuto.

Atentamente,

Olga García

Coordinadora de PACMA Zaragoza

Al señor Alberto Cubero, concejal de Servicios Públicos:

Leímos con estupor en un artículo aparecido en Heraldo de Aragón el 23 de mayo de 2017, que, después de 52 avisos y 11 animales de compañía muertos en nuestra ciudad a manos de uno o varios criminales sueltos, el señor Cubero, concejal de Servicios Públicos, está pensando tomar medidas tales como elaborar un mapa que alerte de las zonas en las que se han encontrado trampas con veneno y objetos punzantes para las mascotas o aumentar el número de perros de rastreo para detectar venenos.