No se alertó a la población. El subdelegado del Gobierno en Teruel, José María Valero, ha reconocido que no se dio ningún aviso especial a los vecinos para que no salieran de sus casas, mientras se desarrollaba el operativo de búsqueda de ‘Igor el Ruso’, que asesinó, el pasado 14 de diciembre, a tres personas –dos de ellas guardias civiles– entre Albalate del Arzobispo y Andorra (Teruel). El motivo, ha explicado, es que no fueron conscientes de la peligrosidad del asesino hasta el momento de su detención, “cuando se conoció su identidad”.
En los días posteriores a los sucesos, tanto los amigos del ganadero asesinado, como sus compañeros de sindicato y la propia viuda, criticaron duramente el dispositivo de la Guardia Civil y la labor de Interior.
Tal y como apuntaron desde el sindicato, “debían haber pensado en la seguridad de los ciudadanos cuando ocurrió el primer tiroteo el 5 de diciembre en Albalate del Arzobispo (Teruel) y quizá no habría pasado lo del día 14”.
Para Valero, “nada salió bien, porque hubo tres muertes”. Eso sí, acto seguido ha defendido sin ambages el operativo de la Guardia Civil: “Cuando ocurre un hecho es muy fácil hablar, hay que ponerse en el cuerpo de la Guardia Civil, su labor fue satisfactoria, pero con el grave problema de las tres muertes”.
En la reunión estaban presentes la alcaldesa de Andorra y el alcalde de Albalate del Arzobispo. Ambos consistorios se presentarán como acusación particular en la causa contra Norbert Feher, conocido como ‘Igor el Ruso’.