Tal y como se esperaba, los Presupuestos de Aragón para el 2024 han sido aprobado con 39 votos a favor, los del PP, Vox y el PAR. Teruel Existe también ha votado a favor, aunque con el matiz de que solo lo hace a una parte del documento. Alcanza una cifra global de 8.256 millones de euros, un 3,6% más que el ejercicio anterior, y entrará en vigor el 1 de enero.
Unos presupuestos en los que se puede ver la influencia de Vox, el socio del PP en el gobierno. Se han aceptado 35 de las 48 enmiendas que presentó la formación de la ultraderecha, que se ve muy reconocida en estas primeras cuentas del tripartito. Entre ellas, hay varias que reducen notablemente los presupuestos destinados a cooperación internacional, violencia machista (que se transforma en violencia intrafamiliar, filioparental y contra los ancianos), subvenciones a los sindicatos o a la política lingüística que protege las lenguas propias de la comunidad: el aragonés y el catalán
El Pleno del Parlamento regional ha debatido, desde la mañana de este viernes, las secciones de la Ley de Presupuestos. El consejero de Hacienda y Administración Pública, Roberto Bermúdez de Castro, ha declarado a los medios, en los pasillos de las Cortes, que el Ejecutivo PP-VOX está “muy satisfecho” porque los Presupuestos se aprueban en tiempo y forma, también por “el apoyo de partidos de diferente ideología” y porque sube el Presupuesto para Educación, Sanidad y Servicios Sociales, cumpliéndose también los objetivos para carreteras.
Durante el debate, el PP ha resaltado la inversión en las partidas sociales, como la mejora del transporte sanitario urgente o de la Atención Primaria, entre otras medidas, mientras que VOX ha resaltado las partidas de fondos propios por 22 millones de euros para el sector primario.
El PSOE ha apostado por el crecimiento “inteligente” de la economía para crear empleo de calidad, Podemos ha alertado del aumento de la siniestralidad laboral, especialmente en la construcción, e IU ha defendido la agricultura social y familiar.
Aragón Teruel Existe ha reivindicado la inversión industrial en el territorio, mencionando el caso de Cuencas Mineras (Teruel), y el PAR ha recomendado el control cinegético del lobo y el impulso a las cooperativas agrarias. Por su parte, CHA ha apostado por el comercio y la mejora de las carreteras.