El alcalde de Zaragoza confía en sacar adelante los presupuestos con el apoyo de PSOE y CHA. Adelanta algunos de los grandes números de esas futuras cuentas y asegura orgulloso que se mantienen en la línea de luchar contra el cambio climático y la desigualdad. Se avanzará en vivienda social, sinhogarismo y memoria histórica y se duplicarán los presupuestos participativos.
Sobre la intervención en el Ayuntamiento de Madrid, se pregunta “¿quién controla al controlador? ¿Quién controla a Montoro cuando usa su poder para impedir un ejercicio de la política diferente al que han hecho ellos?”. Y se moja en el problema catalán: “La encarcelación de los exconsellers se ha aplicado en la línea de un castigo por hechos aún no juzgados. En la línea de ‘ahora vais a ver’”
¿Habrá presupuestos antes de final de año?
Planteamos celeridad. Queremos que las conversaciones con las formaciones que nos apoyaron en la investidura (PSOE y CHA) no se dilaten. Muchos son grandes temas de ciudad que ya conocen, ya se anunciaban en los plurianuales del año anterior; se podría decir que gran parte de estos presupuestos ya están negociados, no sería lógico que se opusieran. Hay que hacer coincidir los presupuestos con el año natural, entre otras cosas, para no hacerles la faena a las entidades sociales. A principios de la semana que viene espero que ya sean aprobados por Gobierno.
¿Por qué no ha habido conversaciones previas con estos partidos?
Sí las ha habido. Por ejemplo, se han desbloqueado los depósitos del Pignatelli y la ampliación del parque Pignatelli después de dos años. Está claro que los temas se van hablando y que, aunque algunos cuestan más de la cuenta, se van desbloqueando. Yo tengo confianza, otra cosa es que se pueda estar ya mirando en clave electoral a dos años vista.
¿Cuáles serán las grandes cifras de los presupuestos?
El presupuesto aumenta un 4 % y, como hemos salido del plan de ajuste, eso nos permitirá acudir a financiación de los bancos a largo plazo. Además, vamos a amortizar cerca de 135 millones de euros de deuda: del 126 % que nos encontramos al llegar, estaremos en un 100 % a finales del año que viene. Y la inversión aumenta un 22 %, hasta más de 60 millones de euros.
¿Y las líneas principales?
Seguimos las líneas estratégicas de nuestro programa de gobierno: lucha contra el cambio climático y contra la desigualdad. Se trabajará mucho en vivienda, donde el presupuesto crece un 50 %: hemos aumentado el parque de alquiler de vivienda social en un 25 %, poniendo más de 450 viviendas en el mercado. En derechos sociales, se invertirá un millón más en ayuda al domicilio y en ayudas al alquiler para los jóvenes. Hay un tema muy bonito que es el plan estratégico sobre el sinhogarismo: en el marco de la reforma del albergue se trabajará para que las personas puedan compartir el espacio con su mascota y se harán itinerarios para asegurar una alternativa habitacional a más largo plazo.
¿En cuanto a obras e infraestructuras?
Dentro de la rehabilitación de espacios emblemáticos, la reforma del Mercado Central es una cuestión prioritaria. También las ayudas a los mercados de barrio, se rehabilitarán algunos de ellos con ayudas al alquiler a pequeños puestos que se subvencionarán un 50 %. Se actuará en los depósitos del Pignatelli; la reforma duplicaría la capacidad del parque Pignatelli y supondrá equipamientos para mayores para todos los barrios colindantes.
¿Qué se hará en esa línea de lucha contra el cambio climático que comentaba?
Se empezará a hacer la compra directa al pool de energía, estamos ahorrando ya cerca de 4 millones de euros en energía. También comenzarán las primeras instalaciones fotovoltaicas en edificios municipales. En cuanto a la flota de autobuses, esta se va a aumentar un 24 % más de lo previsto (62 vehículos más) para llegar a 253. Y se va a intentar que sean todos híbridos incluso introduciendo ya el vehículo eléctrico. Se va a seguir implementando el carril-bici y, para ello, los presupuestos participativos han supuesto un empuje importante
¿Están satisfechos con el funcionamiento de los presupuestos participativos?
Sí, muy satisfechos. La gente está encantada. Introduciremos alguna novedad: los presupuestos participativos se van a duplicar, pero van a ser bianuales, eso permitirá afrontar obras que vayan más allá de contratos menores. Además, sumamos la posibilidad de que, hasta 2 millones, se puedan utilizar para obras de ciudad, es decir, que todo el mundo opine, aunque no sean de su barrio. También incorporamos a los barrios rurales.
Se ha trabajado mucho en memoria histórica, ¿qué más se va a hacer?
Vamos a elaborar un terreno de rutas emocionales para trabajar la memoria histórica en barrios y centros educativos. Queremos digitalizar muchos testimonios orales que han recogido profesores de Historia. En cultura queremos hacer un ciclo de memoria en teatros municipales y filmoteca. Y seguir trabajando en retirada de símbolos.
¿Existe aún una posible negociación en el tema del Impuesto sobre la Contaminación de las Aguas (ICA) o solo aceptarían la supresión del impuesto para los zaragozanos?
Es una nebulosa. En mis conversaciones con el señor Lambán le dije que primero el tranvía y luego el ICA. Pero la deuda del tranvía la han querido resolver sin negociar y el ICA lo han impuesto también sin negociar. Son malos precedentes para entablar una negociación. Pero todo es negociable. Me consta que Podemos está hablando de derogación del ICA y que Lambán ha hablado de modificarlo, pero a mí no me ha apuntado las líneas.
Considerando el ICA un impuesto medioambiental, ¿puede resultar contradictorio que una formación de izquierdas esté en contra?
¿Cómo se defiende que le pongas un impuesto medioambiental a una ciudad que ha pagado ese impuesto por 20 años?, porque se ha pagado su depuradora sin apoyo público. Si es un impuesto medioambiental, habrá que aclarar qué ha ocurrido en términos de transparencia y auditoria pública en las cuentas del Instituto Aragonés del Agua.
El informe del letrado de Ecociudad habla de que usted encargó una información reservada cuando no tenía competencias para ello, ¿es cierto?
Es falso y calumnioso. Yo llevé a Fiscalía la declaración de un testigo que, al tiempo que se autoinculpaba, culpaba. No hice más que recoger un testimonio, que podía ser delito, y que el fiscal lo consideró con la suficiente verosimilitud como para formular una denuncia. Pero yo no he formulado una denuncia contra nadie. Cuando se habla de información reservada, solo se puede hablar en términos de una información para proteger a un testigo de posibles coacciones. Que luego sirvió de poco porque ese testigo se desdijo.
Si se queda en nada, ¿teme que sea otra vez eso de ‘difama que algo queda’?
Es clarísimo. Durante 40 años he trabajado y vivido en el mundo del derecho y nadie ha cuestionado mi ética profesional. Y, de repente, porque eres un cargo público, te tienes que someter a cualquier tipo de actuación calumniosa y sin poderte defender. Es triste y decepcionante por lo que desvela de cómo es la política municipal, que es una trituradora de carne humana y de sentimientos.
¿Qué recorrido jurídico le ve?
No creo que la Fiscalía se deje llevar por presiones de ningún tipo. Siempre he defendido la neutralidad de jueces y fiscales y confío en que se resuelva a la mayor brevedad.
El Gobierno de Zaragoza se ha llevado varios reveses jurídicos desde que está Zaragoza en Común, ¿cómo lo interpretan?
Se interpreta como una situación de cambio. Con una normativa que durante 20 años ha primado la externalización de servicios públicos, políticas neoliberales de privatización en favor de grandes corporaciones y una normativa estatal más rígida que la propia normativa europea. Cuando tomamos decisiones lo hacemos con base en lo que dice la asesoría jurídica municipal, y nos encontramos con entidades poco proclives a que las administraciones municipales cumplan una labor social, como son la CEOE, la Delegación del Gobierno como brazo político del PP frente a las políticas sociales del Ayuntamiento. Y el propio PP directamente a través de sus servicios jurídicos.
¿Qué opinión le merece la intervención de Montoro en el Ayuntamiento de Madrid?
El PP lleva mucho tiempo defendiendo un relato falso, que es el de buen gestor, y lo que han hecho es llevar la corrupción al seno de las administraciones públicas y que 48.000 millones de euros se vayan por el desagüe de la corrupción y de los sobrecostes en materia de contratación pública. Esto quiere decir que no soportan que gente que viene de plataformas ciudadanas, que no son expertos, que no han vivido de la política, les estén saneando las cuentas a ellos. Nos encontramos en una situación tan paradójica que quien incumple las cuentas le exige a quien las cumple que no invierta los ahorros en materia social o en generación de empleo. La pregunta es ¿quién controla al controlador? ¿Quién controla a Montoro cuando usa su poder para impedir un ejercicio de la política diferente al que han hecho ellos?
¿Qué futuro a corto plazo le ve al problema catalán?
Es muy preocupante porque se está apostando todo por el PP a que las elecciones ya lo solucionarán todo, pero yo sigo sin oír hablar de diálogo. Y si el espacio electoral es parecido al que hay, ¿a dónde vamos? Me preocupa la fractura social que hay en Catalunya, estamos ya todos cansados y agotados de esta situación que no conduce a nada. Amnistía Internacional cuestiona el encarcelamiento de “los Jordis”. También se cuestiona qué campaña electoral más atípica con candidatos en prisión. La prisión preventiva ha de ser el último recurso, no se puede usar ni como un cumplimiento anticipado de la pena, ni como una venganza política, que es lo que parece que ha hecho el fiscal general. Probablemente el Tribunal Supremo no vaya a incurrir en esta situación tan desmedida y desproporcionada
¿Le parece injusta, por tanto, la encarcelación de los exconsellers?
Creo que se ha aplicado en la línea de un castigo por hechos aún no juzgados. En la línea de “ahora vais a ver”. Cuando lo que había que haber hecho es dialogar y hablar. Y la fractura social en Catalunya ahí va a quedar. No se puede hacer un destrozo a la cohesión social de una comunidad tan potente, civilizada y moderna como la catalana porque sí, porque les interesa electoralmente a unos y a otros.
Pero el 80 % de la población catalana quiere un referéndum pactado. Se está jugando a intoxicar, a crispar y a buscar recorrido electoral, pero a medio o largo plazo la ciudadanía tiene claro que tiene que haber diálogo en forma de una reforma constitucional o proceso constituyente. El PP con la deriva a su extrema derecha de Ciudadanos está conduciendo a una involución democrática. Se les llena la boca con la Constitución a los que se cargaron el estado social con el artículo 135.
Pero parece que quien pierde votos es Podemos
A corto plazo la apariencia es esa, pero a medio o largo plazo la gente no es tonta. Ahora se juega a crispar emocionalmente posiciones para las que no hace falta pensar mucho.
Aún resta la mitad de la legislatura, ¿pero se vería como candidato otra vez?
Si se mantienen los parámetros que nos llevaron a la Alcaldía de lucha por la transparencia, empoderamiento ciudadano, que sean los movimientos sociales los que den energía e impulso… no tengo ningún inconveniente en volver a presentarme. Vivimos en una sociedad en la que nos sabemos entender, si nos dejan vivir y si la clase política no interfiere en el desarrollo de la vida social, los ciudadanos sabemos comportarnos en diversidad y reconocer la riqueza de esa diversidad.
En las recientes primarias de Podemos se ha repetido que quieren tener más peso en Zaragoza en Común
No habría ningún problema en eso. Podemos decidió no presentar candidatura a las elecciones municipales, pero siempre estuvo en Zaragoza en Común. Es más, Zaragoza en Común es la que se embarcó para reforzar a Podemos en la candidatura autonómica. Nacho Escartín es un buen ejemplo, porque procede de Zaragoza en Común. Todos somos el mismo magma, igual que IU, esto es un espacio de convivencia y no se trata de desembarcar, sino de seguir trabajando.