Tras cinco años de obras con cortes en la carretera de acceso a Benasque, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible reabre mañana viernes al tráfico en la N-260 entre el Congosto de Ventamillo y Campo, en la provincia de Huesca, tras invertir 75,7 millones de euros en acondicionar la carretera.
Así, a partir de las 14:00 del viernes 11 de octubre, finaliza el último corte de tráfico activado entre El Run y Campo para la ejecución de los trabajos y los vehículos podrán volver a circular por el tramo de 12 km, garantizando la conectividad de la región. En una primera fase, la circulación entre las poblaciones de El Run y Campo se realizará a 40 kilómetros por hora, ya que el Ministerio está finalizando una serie de trabajos complementarios y puntuales.
Los dos nuevos túneles del tramo se pondrán en servicio en las próximas semanas, una vez concluyan las pruebas de seguridad y de comprobación de sus instalaciones, relacionadas con el alumbrado, la señalización, entre otros, tal y como exige la normativa vigente en materia de seguridad. En esos tramos, la circulación se realizará por la carretera paralela antigua.
Características de la actuación
Las obras consisten en la ampliación de la plataforma de la carretera N-260 desde los 5,5 metros iniciales hasta los 8 metros mediante la construcción de voladizos apoyados y anclados en roca, para minimizar la ocupación y el impacto en las zonas que discurren junto al río Ésera. De esta manera, se facilitará el cruce de dos vehículos pesados o autobuses.
Además, el proyecto ha incluido la ejecución de dos túneles de 265 y 540 metros de longitud respectivamente.
Durante este periodo de corte, se ha extendido de la capa de rodadura, se han ejecutado los sumideros de estructuras, se ha implantado la señalización, defensas y balizamiento del tramo, y se han realizado plantaciones y actuaciones de hidrosiembra. Sin embargo, queda aún finalizar la señalización vertical, así como algunos detalles relacionados con el drenaje y la restauración ambiental del tramo.