El jueves puede ser una fecha que marque el futuro de un conflicto laboral que ya suma más de 600 días, el del autobús urbano de Zaragoza. El 27 de octubre, el comité de empresa y Avanza, la concesionaria del servicio, retomarán las negociaciones, encalladas desde septiembre, en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) del Gobierno de Aragón. Un encuentro precedido por el que se ha desarrollado este martes en el ayuntamiento y que ha concluido con el compromiso de los trabajadores de suspender los paros hasta la siguiente reunión, es decir, hasta el jueves, lo que significará también un respiro para los usuarios del transporte público de la ciudad, afectados por una huelga que ronda los 20 meses de duración.
La reunión de este martes ha llegado después de que el comité pidiera al consistorio que convocara un encuentro entre las partes. Una cita que se ha celebrado a las 13:00 y que ha concluido con la decisión de volver al SAMA este jueves y con la suspensión de los paros hasta esa fecha, pero no con su desconvocatoria oficial.
Al órgano de mediación llegarán después de que a principios de septiembre se rompieran las negociaciones. Entonces, la propuesta del SAMA, aceptada por la empresa, contemplaba un aumento del salario del 8,5% en tres años, revisable hasta el 12% según el IPC, entre otros beneficios. Unas condiciones que el comité no quiso llevar a referéndum.
Ya el pasado jueves, desde el comité de empresa avisaron de un posible recrudecimiento de los paros, que pasarían de ser de una hora a dos por franja, si no se celebraba ese encuentro y la plantilla daba luz verde en un referéndum a ese aumento.
Un encuentro “rápido”
La reunión ha resultado un encuentro “rápido”, en palabras de la consejera de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, en declaraciones a los medios de comunicación. En ella, ha explicado, las partes han puesto encima de la mesa “la necesidad de cerrar” el convenio colectivo.
Por parte del ayuntamiento han solicitado a comité y empresa que vuelvan al SAMA, ya que “solamente” en este órgano de mediación “puede cerrarse el convenio colectivo”, ha aseverado la responsable de Movilidad. “Cualquier otra alternativa estaría al margen de la ley”, ha destacado Chueca, quien ha deseado que la reunión del jueves “sea la última”.
“Todos entienden que se ha negociado ya muchas horas y que ahora ya se trata de ir a una reunión de cierre”, ha destacado. Igualmente ha recordado que el ayuntamiento “ha cumplido en todas las peticiones”. Por ello, ha solicitado a los miembros del comité “que desconvoquen oficialmente los paros” y “que negocien con buena fe”.
El consistorio enviará a Juan García Blasco, quien ya actuó como mediador en el pasado, en esta ocasión, como observador de la reunión. “Es lo que ellos piden porque entienden perfectamente que la mediación tiene que hacerse única y exclusivamente por los mediadores del SAMA”, ha apostillado Chueca.
Negociar “sobre la base de la oferta” del SAMA
Acerca de esta figura, el presidente del comité de empresa, José Manuel Montañés (Sattra), en declaraciones a este diario, ha especificado que lo que pedían era “una supervisión de las reuniones para que no hubiera malentendidos”.
También se ha referido a la desconvocatoria de los paros, una petición del consistorio que no han aceptado. En su lugar, sí que se han comprometido a detenerlos durante “los días que haga falta”. “De momento, si hay una reunión el jueves, se suspenden los paros para mañana -por el miércoles- y para el jueves”, ha señalado.
También se ha referido a lo expresado por parte de la empresa en el encuentro, que abre la puerta a llegar a un acuerdo en la próxima cita: “Avanza ha dicho que en una reunión podíamos cerrar esto, con lo cual, si viene con esta predisposición y quiere cerrar esto en una reunión, nosotros estamos dispuestos”, ha afirmado.
En cuanto a las sensaciones que le han suscitado este primer acercamiento tras la ruptura de las negociaciones, ha indicado que, por un lado, el consistorio ha accedido a las peticiones realizadas, como la de poner la figura del supervisor. “Pero, por otro lado, también esperábamos tal vez algo más”, ha matizado. Algo que, no obstante, de llegar a buen puerto las conversaciones, ha restado importancia: “Si al final se cierra el convenio en una reunión como han dicho, pues tampoco habría mucho inconveniente”, ha zanjado.
Sin embargo, se ha mostrado escéptico sobre las posibilidades de que se alcance el acuerdo en la próxima cita. A su juicio, que la empresa haya dicho que el convenio se puede cerrar en una reunión son palabras que “cada uno las puede interpretar como quiera”.
El presidente del comité sí que se ha mostrado contundente al afirmar que se le ha dejado “muy claro” a Avanza y al ayuntamiento “que la oferta del SAMA no se acepta por ningún sindicato” y que esta “tiene que ser la base para llegar a un acuerdo”, es decir, que “hay que negociar sobre la base de esa oferta”.
“Deben cambiar mucho las cosas”
Por parte de la empresa, el director de Avanza Zaragoza, Guillermo Ríos, ha deseado que “ojalá se consiga” cerrar el convenio en la reunión de este jueves, aunque ha advertido: “Deben cambiar muchas cosas”.
“Nuestro ánimo absoluto es de llegar a un acuerdo y de cerrar ya el convenio”, ha recalcado Ríos. Sin embargo, ha añadido que el comité “se tiene que dar cuenta de que no es la manera de proceder” el acudir a un cierre de convenio “amenazando con que si no se hace lo que ellos quieren, te duplican los paros”.
Ante el próximo encuentro, ha deseado que el comité también vaya “con ánimo de cerrar el convenio”, aunque ha avisado que “no sería aceptable” que exijan cuestiones “con costes económicos por encima de la propuesta del SAMA”.
“Creo que son condiciones muy competitivas que difícilmente se van a ofrecer en otros convenios y nosotros hacemos un esfuerzo máximo con el ánimo de cerrar esto”, ha indicado acerca de lo propuesto por el órgano de mediación.
De hecho, ha recordado que esa propuesta del SAMA se sitúa “muy por encima” de la económica que manejaba Avanza y que, si desde la empresa se aceptó, fue por intentar llegar a un acuerdo.
“Ellos -por el comité- decidieron no someterla al referéndum. Lejos de eso, dijeron que les parecía un buen punto para negociar, cuando eso no es un punto de negociación, es el punto ya final, de cierre”, ha destacado.