Arranca el curso en la Universidad de Oviedo con el objetivo de preparar la institución académica para el futuro

Avanzar en el trabajo iniciado hace tres años con la ambición de preparar la Universidad de Oviedo para el futuro. Es el mensaje que ha querido transmitir Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo, durante la ceremonia de apertura del curso académico 2024-2025.

El máximo responsable de la institución académica ha subrayado que el hilo conductor que ha guiado su gestión desde 2021 ha sido el “empeño y preocupación” de su equipo para que la universidad no llegue tarde al siglo que acaba de comenzar.

Villaverde, que ha hecho balance de la gestión de su equipo desde que se hizo cargo del gobierno universitario, ha destacado que su máxima preocupación es preparar la institución para los próximos años. “Tenemos que decidir entre todos qué universidad queremos ser, a dónde queremos dirigirnos, con el firme propósito de legar una universidad mejor a las generaciones venideras, una universidad a la altura de su tiempo”, ha subrayado el rector.

El rector de la Universidad ha comenzado su intervención con un cariñoso agradecimiento a la figura del rector Juan Vázquez, presente en la ceremonia, que, tras 48 años de servicio, este 31 de agosto finalizó su pertenencia administrativa a la universidad. “Gracias rector por tu dedicación y tu legado, seguirás siendo una voz que debe ser escuchada”, ha manifestado.

Respecto al número de matriculaciones de este año, el rector se ha mostrado “prudentemente contento y optimista”, pues ha afirmado que no solo se ha logrado contener “el impacto que tiene la caída demográfica” sino que además ha habido “un pequeño incremento” en el número de matrículas, que ya “superan las 20.000”.

El máximo responsable de la universidad también ha anunciado que se han iniciado conversaciones con el Gobierno asturiano para desarrollar un “ambicioso plan plurianual” con el objetivo de renovar las infraestructuras de la Universidad.

Según ha afirmado, la institución dispone de 58 edificios en cinco campus distintos que “requieren intervenciones urgentes” imposibles de realizar con el presupuesto de la Universidad.