Los precios se incrementaron en julio en Asturias un 2,9 por ciento respecto al mismo mes del pasado año, lo que supone una moderación respecto al mes anterior de seis décimas, mientras que la inflación de los alimentos se recortó en más de un punto, hasta el 3,5 por ciento.
No obstante, Asturias se situó entre las comunidades en la que más se incrementó el índice de precios de consumo (IPC) que ha hecho público este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE), que ha confirmado el dato adelantado hace dos semanas y que sitúa la inflación en el conjunto del país en el 2,8 por ciento interanual, seis décimas menos que el mes anterior, por el abaratamiento de la electricidad.
Por encima de la media se situó Galicia (3,1 por ciento), seguida de Asturias, Baleares, Canarias, Cataluña y País Vasco, todas ellas con el 2,9 por ciento.
Las bebidas alcohólicas y el tabaco
En Asturias, el apartado de bebidas alcohólicas y tabaco fue el que registró una mayor subida interanual (4,4 por ciento), una décima más del incremento registrado en hoteles, cafés y restaurantes, mientras que los alimentos crecieron un 3,5 por ciento, frente al 4,6 que se registraba en el mes de mayo.
En la evolución del precio de los alimentos influye especialmente la bajada de los precios de la fruta y de los aceites y grasas, frente a la subida en julio del año anterior, y coincide con la eliminación del IVA del aceite de oliva desde el 1 de julio.
Los precios del ocio y la cultura experimentaron una subida del 2,8 por ciento, mientras que el de la vivienda lo hizo una décima por encima y el de la vivienda un 3,1 por ciento.
El precio de las comunicaciones fue el único que registró una bajada de precios respecto a julio del pasado año, un 0,3 por ciento, mientras que el transporte se incrementó un 1,9 por ciento.
En lo que va de año, el IPC se ha incrementado en Asturias un 2,3 por ciento y ha experimentado una bajada del 0,4 por ciento en el último mes.
El alza de los alimentos se frena al 3,1 %
En el conjunto del país, el índice de precios de consumo (IPC) se moderó en julio hasta el 2,8 por ciento interanual, seis décimas menos que el mes anterior, por el abaratamiento de la electricidad, mientras que la inflación de los alimentos se recortó 1,1 puntos, hasta el 3,1 por ciento, la menor tasa en casi tres años.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado este martes el dato de inflación adelantado hace dos semanas, así como el de la inflación subyacente (sin energía ni alimentos frescos), que se moderó dos décimas y se situó en el 2,8 por ciento, la tasa más baja desde enero de 2022.
En la evolución del precio de los alimentos influye especialmente la bajada de los precios de la fruta y de los aceites y grasas, frente a la subida en julio del año anterior, y coincide con la eliminación del IVA del aceite de oliva desde el 1 de julio.
Los grupos que han tenido una influencia negativa en la evolución del IPC han sido el de la vivienda, en el que se encuadra la electricidad, que bajó 1,9 puntos, hasta el 3,2 por ciento interanual; y el de alimentos y bebidas no alcohólicas, que disminuyó 1,1 puntos, hasta el 3,1 por ciento.
También el grupo del ocio y la cultura, cuya tasa anual descendió 1,4 puntos, hasta el 1,6 por ciento, por la menor subida de los precios de los paquetes turísticos.
El aceite de oliva baja respecto a junio
De los componentes de la cesta de la compra, el aceite de oliva sigue siendo lo que más sube, un 38 por ciento, pero ha bajado un 5,5 por ciento si se compara con el mes de junio -debido a la eliminación del IVA desde el 1 de julio- y ha subido un 3,7 por ciento en lo que va de año.
Tras el aceite de oliva, lo que más ha incrementado su precio han sido los zumos de frutas y vegetales (17,4 por ciento), el chocolate (13,7 por ciento) y la carne de ovino y caprino (10 por ciento).
Los alimentos que han pasado al terreno negativo son otros aceites comestibles, con un descenso del 11,8 por ciento; la leche desnatada, que baja un 4,2 por ciento; la pizza y quiche, un 3,3 por ciento, y otros productos a base de cereales, un 3,1 por ciento.
Dejando a un lado el ámbito alimenticio, las mayores subidas en julio respecto al mismo mes de 2023 las registraron el transporte de pasajeros por mar, un 30,9 por ciento más; la joyería y bisutería, un 12,7 por ciento; los vuelos nacionales, un 11,7 por ciento; los seguros de vehículos de motor, un 10 por ciento; los paquetes turísticos nacionales, un 9,9 por ciento; y los seguros privados relacionados con la salud, un 9,5 por ciento.
En el extremo contrario, las mayores bajadas las registraron los equipos de telefonía móvil, con una bajada del 10,5 por ciento; el gas natural, que cae un 7,9 por ciento; las cafeteras, teteras y similares, un 5 por ciento menos; y los vuelos internacionales, con una caída del 4,9 por ciento.
La inflación mensual fue negativa
En comparación mensual, los precios de consumo bajaron un 0,5 por ciento respecto a junio y los grupos con mayor repercusión negativa fueron el de vestido y calzado, por las rebajas de verano, y la vivienda, por el descenso de los precios de la electricidad.
Por contra, influyó al alza el grupo del ocio y cultura, debido a la subida de los precios de los paquetes turísticos.
Lo que más subió de precio en julio fueron los paquetes turísticos nacionales (12,2 por ciento) y los servicios de alojamiento en otros establecimientos (10,8 por ciento), mientras que lo que más bajó fueron las prendas de vestir para bebés y niños, un 13,2 por ciento y las prendas de vestir para mujer, un 11,2 por ciento.
Seis comunidades autónomas registraron en julio una inflación superior a la media nacional: Galicia (3,1 por ciento) y Asturias, Baleares, Canarias, Cataluña y País Vasco, todas ellas con una tasa del 2,9 por ciento.
Castilla y León y Cantabria registraron las tasas más bajas, en ambos casos del 2,5 por ciento interanual.
En el mes de julio la tasa de variación anual del IPCA se situó en el 2,9 por ciento, siete décimas menos que la registrada el mes anterior. La variación mensual fue del -0,7 por ciento.