Representantes de la Plataforma 'Ayudas al Alquiler' consultan a diario la agenda pública de la consejera de Derechos Sociales y Bienestar del Principado de Asturias, Melania Álvarez. Apuntan el lugar y el horario donde está prevista su asistencia y se presentan en el mismo sitio y a la misma hora. No abuchean, ni tampoco aplauden. En silencio, recuerdan a la responsable del área de Vivienda que aún hay 2.000 asturianos que no han recibido el segundo plazo de las ayudas al alquiler de 2021 y que sigue pendiente la fecha de publicación de la convocatoria de 2022.
Yolanda Gutiérrez es su portavoz. Ella es una de las 2.000 personas beneficiarias que todavía no ha cobrado íntegra la ayuda pese a que cumplía con todos los requisitos: había entregado el contrato y los recibos. Asegura que la consejera les ha mentido a ella y a otros miembros de la Plataforma con los que se comprometió a abonar todas las cantidades adeudadas en una reunión celebrada el pasado 23 de marzo. Ese día, la consejera anunció que el segundo plazo se cobraría en una semana y se anunciaría la convocatoria de 2022 a principios de este mes de abril. Ninguna de las dos promesas se formalizaron.
“En abril de 2021 salió la convocatoria con las ayudas al alquiler. La administración tenía un plazo de seis meses para publicar las listas. Llegó el mes de septiembre y nos encontramos con el anuncio de la consejera de que se ampliaba el plazo en otros seis meses más porque había demasiadas solicitudes”, explica la portavoz.
“Nos dieron todo tipo de excusas, pero han incumplido el compromiso”
Los integrantes de la Plataforma decidieron iniciar las movilizaciones al comprobar que, un año después, seguían sin tener el dinero ingresado en las cuentas bancarias. Recurrieron a los medios de comunicación ante el silencio administrativo y su aparición en prensa, radio y televisión propició una llamada desde la consejería para convocarles a una reunión el pasado 23 de marzo de la que salió el compromiso del abono del segundo plazo y el anuncio de la convocatoria de 2022; dos promesas que, según comentan, siguen en el aire.
“La consejería ha dejado a muchísima gente por el camino. Al preguntar las razones de esta situación nos dieron todo tipo de excusas: desde que no habían presentado las solicitudes, que tenían deudas, que habían cambiado de cuentas bancarias o que éstas daban algún tipo de error. Pero no les creemos porque tenemos resguardos de las solicitudes y además todo el mundo sabía que uno de los requisitos en las bases de la convocatoria era precisamente no tener deudas para optar a estas ayudas”, señala.
De los 3.600 solicitantes que han visto aprobada la ayuda, quedan 2.000 pendientes de cobrar el segundo plazo. Son cuantías que oscilan entre los mil y tres mil euros, dependiendo de la situación de cada solicitante. En el caso de la portavoz de la Plataforma, de los 2.160 euros que tiene reconocidos sólo ha cobrado la mitad.
La portavoz explica que la primera vez que preguntó en el Principado por las razones que habían provocado el retraso en los pagos del segundo plazo desde la consejería adujeron que había dinero disponible, pero estaban pendientes de un problema burocrático. Posteriormente argumentaron que se estaba a la espera de un remanente de crédito y más tarde que había que esperar porque estaban pendientes de la oleada de incendios.
El retraso en el pago le está afectando en su día a día porque el alquiler se lleva la mitad de su sueldo mileurista. No obstante, afirma que dentro del colectivo ella puede sentirse una privilegiada porque trabaja, mientras que conoce casos de otros integrantes de la plataforma que apenas pueden llegar a fin de mes. Otros tienen hijos pequeños y no pueden pagar a sus caseros. Personalmente, conoce dos casos donde finalmente fueron desahuciados por no poder afrontar el pago del alquiler.
“Algunas personas están en una situación muy difícil para llegar a fin de mes”
Un total de 5.000 personas forman parte actualmente de la Plataforma que, entre otros servicios, ofrece asesoramiento e información para la tramitación de las solicitudes de ayudas en una lucha constante contra la administración.
Tania Rocas es otra asturiana afectada por el retraso en los pagos. El 3 de agosto pasado cobró el primer plazo y aunque en el Principado le dijeron que tenía todos los trámites correctos aún no cobró el segundo: “En el primer plazo recibí mil euros, pero aún me deben 800 euros”, ratifica. Es pensionista con tan solo 43 años, ya que tiene reconocida una invalidez permanente absoluta. El alquiler le cuesta 400 euros mensuales que salen de una pensión “muy pequeña” con la que tiene que subsistir. Con el resto del dinero paga los gastos de luz y agua y la alimentación.
Tania Rocas no entiende por qué cuando la empresa pública Viviendas del Principado de Asturias (Vipasa) gestionaba las ayudas del alquiler “nunca había problemas”, indica, por eso culpa al Principado de las dificultades que encuentran por no poder cobrar a tiempo.
De los problemas de insomnio a las ayudas de la familia
Rosa Pérez tiene concedida una ayuda de 2.300 euros. En el primer plazo cobró 1.300 euros que el Principado ingresó en una cuenta bancaria de la que era titular pero que no la utilizaba porque era muy antigua, por lo que la mitad de esa cuantía se la llevaron las comisiones bancarias. Aún le falta por cobrar los mil euros del segundo plazo. Actualmente no trabaja y su familia la ayuda a pagar el alquiler porque por sí misma es incapaz de llegar a final de mes.
“En el Principado me dijeron que todo mi expediente estaba correcto, pero no sé por qué no terminan de pagarme. Ya llevé tres veces la ficha de acreedor”, comenta. Rosa Pérez reconoce que esta situación le está provocando “mucha ansiedad” y cada vez tiene más problemas para conciliar el sueño.
Verónica Álvarez Rubio también forma parte de la Plataforma, pero a excepción de sus compañeras, ella sí ha cobrado íntegramente la ayuda al alquiler. En el primer plazo recibió mil euros y en el segundo cobró los 795 euros que tenía aprobados. El alquiler de su vivienda asciende a 420 euros mensuales.
Ella trabaja tres horas diarias en un supermercado porque está complementando la jornada laboral de una empleada que se acogió a la jornada reducida. Por ese trabajo cobra 490 euros y si tiene la suerte de poder hacer horas extras puede llegar “como mucho a 700 euros”, apunta. A pesar de estar en una situación mejor que sus compañeras al haber cobrado íntegramente la ayuda manifiesta que sigue apoyándolas incondicionalmente porque está convencida de que podía estar “en el otro lado”.
Es el caso de su sobrina, de 27 años, y madre de un bebé de nueve meses que está “desesperada”, según corrobora Verónica, porque aunque ambas cubrieron la solicitud y la entregaron el mismo día, la joven ni siquiera apareció en la lista: “Mi sobrina ha presentado un recurso y está a la espera de ver qué ocurre. De momento, su madre que está jubilada la ayuda con el pago del alquiler”, explica.
La versión del Principado
Según los datos facilitados por la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar, de la que depende la Dirección General de Vivienda, se han concedido 6.370 ayudas por importe de 11.454.184 euros, de los que a finales de 2022 había pagado un total de 10.048.007 euros. El Principado asegura que ya se han concedido el 88% de las ayudas, por lo que, según sus cálculos, queda por pagar un 12% del crédito que afecta al segundo pago de algunos beneficiarios, concretamente de 1.751 (27%) por importe de 1.406.1764 euros.
Estas ayudas se abonan en dos pagos: el primero, que ya han recibido todos los beneficiarios, se efectuó el pasado mes de agosto correspondientes a los recibos de alquiler presentados con la solicitud entregada, pero el segundo pago, que se correspondía con los segundos recibos, aún no lo han recibido unos 2.000 solicitantes, según los datos de la plataforma “Ayudas al Alquiler'.
La administración regional alega que estos impagos se deben a varias circunstancias: por un lado, a que algunos beneficiarios presentaron fuera de plazo los recibos, por lo que al intentar hacer el segundo pago figuran como deudores de la administración; otros cambiaron de cuenta bancaria en las últimas semanas de 2022 o hay un error en su cuenta.
Desde la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar sostienen que se envió un requerimiento a estas personas para que subsanaran la situación y se les dio la oportunidad de ponerse al día con la deuda o entregar los recibos no presentados en plazo para que pudieran cobrar la ayuda al alquiler. Como esta problemática del segundo pago sucedió a fin de año, actualmente están a la espera de la incorporación de remanentes de crédito afectado para tener saldo y abonar los pagos.
Asimismo, resaltan que en la primera convocatoria de ayudas que hizo el Principado de Asturias más de 4.000 personas se quedaron sin la ayuda por falta de crédito y, en esta ocasión, el Gobierno decidió ampliar el presupuesto en 4.000.000 de euros para que todas las personas que cumplieran los requisitos y tuvieran derecho pudieran acceder a las ayudas al alquiler. Sin embargo, la segunda convocatoria de la ayuda que habían anunciado aún no ha sido publicada.