El último fin de semana de julio se celebra en Gijón el Tsunami Xixón Festival (TXF), una de las citas ineludibles del verano, en el norte de España, para los amantes del punk-rock. Con un cartel repleto de nombres de referencia como Desakato, Def con Dos, Dropkick Murphys, Anabel Lee, The Hellacopters o Descendents, el Tsunami apunta a convertirse de nuevo, este año más que nunca, en una plataforma para expresarse libremente.
Pero sus promotores afrontan estas semanas previas unos días difíciles. Con el cambio de Gobierno en el Ayuntamiento gijonés, Divertia, la sociedad municipal que se hace cargo de la gestión de conciertos, del Festival de Cine y de la programación del Teatro Jovellanos, ha pasado a manos de Vox. Al frente está Oliver Suárez.
Todos los ojos están puestos en cómo gestionará Suárez la sociedad después de que, en el arranque del mandato, su compañera de partido en el consistorio, Sara Álvarez Rouco, dijera en una entrevista radiofónica que vetaría los espectáculos en asturiano. Algo que luego matizó tras una carta pública de la alcaldesa, Carmen Moriyón, enmendando sus palabras.
Desde su llegada al equipo de gobierno del consistorio el nuevo concejal del partido de la ultraderecha ha mantenido reuniones de toma de contacto con diferentes promotores y empresarios del ámbito musical y cultural, entre ellos, Iván Méndez, David Méndez y Ramón Noguera, organizadores del Tsunami.
Este encuentro, que se celebró en la sede del partido, fue difundido en el perfil de Instagram de Vox Gijón, y ha desatado comentarios negativos en redes sociales. Unas críticas a las que los promotores respondían con un contundente comunicado en el que reafirman el auténtico espíritu del festival “totalmente a favor de la libertad de expresión y en contra de que se utilice de forma partidista o electoral”.
“Siempre estaremos en contra de cualquier tipo de censura a la libertad de expresión”, añaden y continúan diciendo que se asegurarán de que todos los artistas nacionales e internacionales que van a participar en el Tsunami “puedan expresarse libremente y comunicar lo que deseen en sus letras en castellano, asturiano, galego, euskara, catalá, inglés o la lengua que deseen”.
“Tsunami siempre será un punto de encuentro con la libertad y la multiculturalidad”, puntualizan, para explicar a continuación el porqué de su reunión con el responsable de Divertia.
“Desde la organización siempre hemos velado por la correcta realización del TXF” y “para ello es totalmente necesario reunirse con cargos electos de la ciudad y con todas sus autoridades públicas. Es necesario para gestionar diferentes permisos para poder mejorar cada año y en definitiva, para que el festival se lleve a cabo”, explican.
Pese a la contundencia del comunicado, las críticas no han cesado en redes sociales, pero también los apoyos. Desakato, que se encuentra en su gira de despedida y serán los encargados de abrir el festival el viernes 28, también se han pronunciado en Twitter con un comunicado en asturiano en el que aseguran que Vox no conseguirá lo que busca, callarles.
“Creéis que podéis zarrar la puerta pero nun tenéis la llave y nun vais a ser quien aparar esti furacán cultural”, afirman dirigiéndose a la ultraderecha.
Sin embargo sí se han producido algunas cancelaciones. Dos grupos, La Élite y Strangis Guajes, se caen del cartel. “No son momentos para grandes comunicados, sino de acciones. Así pues después de la reunión que mantuvieron organizadores del festival Tsunami en la sede de Vox en Gijón, hemos decidido no tocar en dicho evento”, han dicho Nil Roig y David Burgués en un breve comunicado en su perfil de Instagram.
Estos representantes del nuevo punk añaden, en relación a la reunión de los promotores con el concejal de Vox, que entienden “que es necesaria la reunión, pero que se haga en el Ayuntamiento y sin la posterior difusión en redes, ya que es humillante para los artistas que participamos en este. La Élite nunca participará en donde el fascismo intente poner su sombra. VIVA LA LIBERTAD!!!»