“Esto no está en las manos de uno, pero sí en las de todos”

La frase no es mía, es del “Sr. Antonio”, presidente de la Peña Dominó de Cornellá, que colaboran –igual que con otras muchas causas locales– con Ayuda en Acción desde hace nueve años.

La frase concentra el principio básico de convivencia y de solidaridad, juntos podemos conseguir muchas cosas, pero es labor de cada uno dar ese primer paso y unirse o participar a la causa que considere más justa. Sobran las causas y siempre –aunque haya también muchas– faltan las manos.

En Ayuda en Acción tenemos una causa, trabajamos junto a algunas de las comunidades más pobres en África, Asia y América Latina para mejorar sus condiciones de vida, contribuyendo a que cada vez más personas puedan acceder a sus derechos más básicos. Para nosotros, la manera más potente de conseguir este complicado reto es el fortalecerles y apoyarles en sus organizaciones locales. Nosotros, gracias a nuestras socias y socios, apoyamos sus propios proyectos de vida digna.

Enños la red de colaboradores que hemos tejido es inmensa, la gran mayoría particulares, junto con empresas y administraciones, aunque éstas, salvo honrosas excepciones, están en estos momento desertando de este compromiso de solidaridad que una gran parte de la ciudadanía les exige (¿recuerdan el 0,7%?)… pero esto es otra historia… o quizá no.

Quizá no, porque desde Ayuda en Acción, en este curso académico, hemos ampliado nuestro ámbito de actuación junto a la comunidad educativa en España, en los colegios que tenemos al lado de nuestras casas, en nuestros barrios. Porque tenemos la ambición, a medio y largo plazo, de contribuir a crear una red de apoyo en la comunidad escolar y fomentar el tejido productivo, fortaleciendo capacidades, impulsando la educación financiera y posibles emprendimientos que sirvan para dar un horizonte de salida a estas familias, más allá de la cobertura de sus necesidades básicas.

Sin embargo, enños de trabajo de sensibilización en colegios de nuestro país, en los últimos dos años, hemos podido constatar cómo, debido a la prolongada situación de crisis, el paisaje ha ido cambiando y cómo cada vez más familias que hace uno o dos años podían hacer frente a necesidades básicas, han ido perdiendo su capacidad para hacerlo… estoy hablando de la imposibilidad para pagar los libros de texto, el apoyo extraescolar, la participación en actividades colectivas como visitas a museos o excursiones, o el comedor escolar. Nuevas familias que están en riesgo de comenzar a resbalar por una cuesta que te puede llevar a la pobreza y la exclusión si no se toman medidas. No hace falta decir que los recortes en servicios sociales no sólo no están ayudando, sino que están acelerando estas situaciones y dejando el traje del estado de bienestar en harapos y a millones de personas al borde la pobreza.

En este contexto, desde Ayuda en Acción vamos a comenzar a trabajar en este curso para contribuir, desde nuestra experiencia de trabajo fuera de España y desde la humildad de iniciar algo novedoso para nosotros, a cubrir esas necesidades básicas relacionadas con el ámbito educativo: comedor escolar, libros de texto, apoyo extraescolar destinado a más delocalidades de seis comunidades autónomas.

Como otras muchas organizaciones, pensamos que la mejor manera de tener un futuro más justo es invirtiendo (también dinero, señores y señoras del Gobierno) en los más jóvenes y por eso nos hemos esforzado en tratar de explicarles qué es eso de la pobreza y la exclusión, cuáles son sus causas y qué pueden hacer para que el mundo sea mañana un lugar más justo. Seguiremos contribuyendo a crear niños y niñas responsables y solidarios con otras personas.

Afrontamos esta nueva mirada al contexto en España desde la corresponsabilidad que tenemos como organización comprometida con la lucha contra las desigualdades, animados por parte de nuestra base social preocupada por esta situación y con la coherencia de querer actuar aquí con la misma ambición que llevamos persiguiendo desde haceños fuera de España. Es muy complicado, pero afortunadamente, con personas como el “Sr. Antonio” podemos tener esperanza.

La frase no es mía, es del “Sr. Antonio”, presidente de la Peña Dominó de Cornellá, que colaboran –igual que con otras muchas causas locales– con Ayuda en Acción desde hace nueve años.

La frase concentra el principio básico de convivencia y de solidaridad, juntos podemos conseguir muchas cosas, pero es labor de cada uno dar ese primer paso y unirse o participar a la causa que considere más justa. Sobran las causas y siempre –aunque haya también muchas– faltan las manos.