Nuevamente, en dos oleadas, los 756 sobrevivientes de esta 34ª edición del Marathon Des Sables cruzaron la línea de salida la mañana del viernes 12 de abril. La mayor parte del pelotón despejó el terreno a las 7 horas de la mañana, impresionados por la cima de Jebel El Oftal, que debían cruzar si querían finalizar la etapa. Tres horas más tarde, los mejores 150 competidores del ranking general iniciaron la quinta etapa, con la firme intención de darlo todo para obtener el mejor resultado posible.
En esta quinta etapa, los participantes se enfrentaron a la famosa cima de Jebel El Otfal: una montaña de arena de 250 metros de altura con una pendiente de un 25% de media. Un verdadero desafío, pero a la vez, un lugar con una increíble belleza que no deja indiferente a nadie: “Me encantó la escalada, me encantan las montañas”, agradeció Vincent Pilet (Francia) a la llegada. “Fue maravilloso, ¡estoy tan feliz!”, agregó Peter Jewitt (Australia). Una belleza que, sin embargo, contrasta con la dureza del terreno: “Estoy cansado. Ha sido una semana larga”, dijo David Bradley (Reino Unido). Incluso el ex campeón Laurence Klein (Francia) sufrió a pesar de sus tres victorias.
La llegada al quinto campamento dejó a los participantes sin palabras: bordeada por el Zireg (macizo montañoso), el campamento se encontraba en una llanura de arena salpicada de manchas verdes. El lugar está lleno de majestuosidad y refuerza la sensación de pequeñez que uno siente en el medio del Sahara. E inevitablemente, al llegar, la emoción es palpable, como demostró Nathalie Baulieu (Canadá): “Estoy muy feliz, un poco triste de que termine, creo que comencé a llorar 5 km antes del final”. Incluso los veteranos, como Vincent Gaudin (Francia), dejaron caer alguna lágrima en la línea de llegada: “Hice muchas carreras y no pensé que me conmoviera, pero sí, lo hice. El MDS es toda una leyenda”.
Y, como de costumbre, Patrick Bauer, director de la carrera, esperó a cada participante, del primero al último, para darles su medalla de finisher. Estos 70 gramos de metal al final de un cordón naranja, esta es la consagración de una semana de caminar y correr en medio del Sáhara. Por supuesto, es una inmensa alegría cruzar la línea de meta de la etapa del maratón, pero nadie puede esconder su tristeza: mañana solo quedará la sexta etapa, a 1 km de la etapa solidaria del Marathon Des Sables, y luego la aventura ya terminará...
Un perro termina el Marathon des Sables
Cactus se unió a la caravana del Marathon Des Sables en el kilómetro 13 de la etapa 2. Este hermoso perro perfectamente adaptado a la vida en el desierto dejó la posada en la que vive, cerca de las dunas Merzouga y, desde entonces, ha recorrido 175 kilómetros en el desierto, acompañado del resto de corredores. Él también recibirá su medalla de finisher.
En categoría femenina: una nueva campeona
Ragna Debats, holandesa que vive en España, sobrevoló la 34ª edición de Marathon Des Sables: victoriosa en cada una de las cinco etapas, tenía la ambición de clasificarse en lo más alto posible del podio. Y está cosechando bastantes éxitos, ya que termina en la duodécima posición del ranking de la general, a 4 horas por detrás del campeón Rachid El Morabity (Marruecos). Esta ha sido su primera participación en el MDS: sufrió una fricción en la parte posterior, al no estar acostumbrada a llevar una mochila muy voluminosa y pesada, pero su determinación no le ha fallado. De 40 años, la campeona mundial de Trail en 2018 consigue una victoria de prestigio en una carrera legendaria.
La marroquí de 33 años Aziza Raji, que sueña con cogerle el relevo a Touda Didi, la única marroquí que ganó el MDS, se está acercando a su objetivo al obtener un muy buen segundo lugar. El año pasado, que fue su primera participación, finalizó sexta. En esta edición se encuentra por delante Gemma Game (Reuno Unido), que ganó en 2019.
En categoría masculina: a por la séptima victoria
Mohamed El Morabity continúa hacia su gran objetivo: conseguir 10 victorias en el
Marathon Des Sables, como ya hizo en su momento Lahcen Ahansal. Y tal vez incluso podría vencerlo. Con 7 victorias y una sonrisa, reflejó claramente su alegría: “Estoy muy feliz de ganar. El Marathon des Sables sigue siendo la gran aventura que amo”. Su hermano pequeño Mohammed (Marruecos), 10 años más joven que Rachid, se encuentra en segunda posición en este 34º MDS. “Lo importante es terminar y que Rachid alcance la victoria, así como también el equipo”.