Su situación, en un monte que domina Vigo, nos ofrece una espectacular vista de la ría. Galiñeiro está formada por bloques de poca altura con vías explosivas en las que la dificultad se centra en unos pocos metros. La escalada ofrece una gran variedad de estilos debido a la composición de su roca, el gneis, que además es muy adherente. Las posibilidades de grado son muy variadas y sus más de 170 vías, repartidas entre veinte sectores van desde el V hasta el 8. La característica fundamental de Galiñeiro es su intensidad y la dificultad en escalar a vista debido a la nula visibilidad de los agarres.
Ruta por el Galiñeiro
El Monte Galiñeiro es el punto más alto del municipio de Gondomar, y sus 706 metros de altura dominan los valles circundantes por los que podemos realizar multitud de rutas senderistas en las que contemplar manadas de caballos pastando en estado salvaje o grabados rupestres como los petroglifos de Auga da Laxe. Destacamos el sendero P.R.G-01, de dificultad media y con 5 kilómetros de longitud y una hora de duración. Comienza en A Pasaxe y recorre Galiñeiro, hasta su cima, donde podremos observar restos de una muralla pertenecientes a un poblado celta; la presa de Zamáns, lugar ideal para la pesca; y terminamos de nuevo en A Pasaxe.
Historia y playa
El municipio de Gondomar cuenta con importantes vestigios arqueológicos. Podemos visitar dólmenes como el de Chaín o castros como el de Xián. Además está su Pazo, que fue construido en el siglo XVI. Y no nos olvidamos de las playas, las de Nigrán y Baiona están a pocos kilómetros de la escuela. Baiona es además el lugar ideal para practicar deportes náuticos o pasar una noche de marcha.
Tipo de Escuela: deportiva.
Equipamiento: anclajes fijos en la mayoría de las vías.
Tipo de roca: gneis con agarres romos, regletas.
Tipo de vías: explosivas.
Nº de vías: 174 repartidas en veinte sectores.
Longitud mínima/máxima: 12/35 m.
Graduación de la mayoría de las vías: entre V+ y 6c+.
Máximo grado: 8.
Época: de primavera a otoño. Hay que contar con el fuerte viento del Atlántico.
Observaciones: la estructura del gneis y la escasa visibilidad de los agarres complica la escalada a vista.
Lugares de interés: el 25 de agosto se celebran los típicos curros o rapa das bestas, en los que los vecinos suben al monte para traer a las manadas de caballos salvajes, clasificarlos y marcarlos.